En cualquier momento, tu vida, cambia de estación

CAPÍTULO 7

CAPÍTULO 7

Las palabras del profesor, le conmueven. Es verdad, ha sido patético, lo que acaba de ocurrir ahí. Se han dejado llevar por ''el que dirán'' y por la impotencia de aquel terrible momento. Mira, que a ella la ven como la ''problemática'' y en cierto modo, la palabra ''problemática'' lleva a muchos significados malos. Y en realidad, en el diccionario, no concuerda con ningún comentario de la gente, sobre aquella palabra.

-Bueno profesores, ya ha pasado. Yo me voy. Dice Martina nerviosa, decidiendo romper el silencio.

-Sí, y yo también. Dijo Ana nerviosa.

(MIENTRAS EN LA CASA DE LUISA Y MARTINA)

-Sí ¿dígame?

-¿Con quién hablo?

-Con Luisa Sánchez Villanueva, ¿qué desea?

-Le llamo del ''Instituto Teresa'' Su hija, acaba de tener una pelea, con una alumna de nuestro centro, llamada Ana. A favor, debo comunicarle, que no ha pasado nada, solo rasguños, y prácticamente ni eso. Están bien, aunque lo que ha pasado, no está bien. Por ello, queremos solicitarla, a que venga a una cita en el centro, con el tutor de dichas alumnas, ¿podría venir usted? Es mañana, a las 17:00

Luisa, no da crédito. Todo a pasado muy rápido. Prácticamente el responsable de la llamada, no ha respirado, ni ha esperado a una respuesta a lo sucedido. Ha soltado todo. Y encima, ella, tenía pensado irse mañana a Málaga, y en esa reunión, será como siempre. El tutor, haciéndole preguntas delicadas sobre el entorno familiar, mintiendo en algunas respuestas, y el tutor, dándole consejos, que claro está, está bien, pero con la actitud de Martina, no servirá para nada.

-Siento muchísimo lo de Martina. Es que de verdad, esa niña. Será castigada, creame. Bueno, y quería también decirle, que no puedo asistir. Mañana nos vamos a Málaga, y sería imposible ir, no puedo.

-Señora verá, esa reunión es muy importante, ya sabe, temas que aclarar con los padres, o la persona que venga de la familia de Ana.

-Lo sé y creame de nuevo, no quiero huir, ni menospreciar lo que ha ocurrido, se lo juro. Pero no puedo hacer nada.

-¿Podría venir hoy? Dice el responsable de la llamada, pasando del resto de cosas que Luisa, decía.

Luisa, no quiere ir, evidentemente. No quiere escuchar quejas y quejas. Y encima, está ocupada, hoy hará las maletas, y descansará y por si fuese poco, Martina, se enfadaría con ella por ir, pero....

-Sí, hoy podría.

-Bien, a las 17:00 la espero...

Ambos cuelgan, Luisa, espera a Martina, sabe que le tiene que dar una charla. Pero no quiere ser muy dura, porque, sabe de sobra que Martina, nunca le ha escuchado y no quiere tener una discusión que le haga a Martina cambiar de idea sobre Málaga. Que hace lo que ella quiere y cuando quiere, y eso lo odia. Debería haberle educado bien siempre.