Poison - H.S [Español]

Capítulo 40

"Vale, qué preferirías, ¿tener la habilidad de controlar la mente de la gente o de controlar el espacio y el tiempo?" pregunto.

Four y yo hemos estado jugando al juego de "Qué preferirías" durante los últimos cinco minutos. 

"Controlar el espacio y el tiempo" contesta sin ninguna duda. 

"¿En serio? ¿Por qué?" pregunto. Todas sus respuestas son diferentes de lo que hubiera pensado previamente y sus razones tras ellas son también interesantes.

"¿Nunca has querido volver atrás en el tiempo y arreglar algo? ¿Cambiar algo que sucedió? ¿O quizás congelar el tiempo mismo, solo por unos minutos? Mira, con el control mental puedes ordenar a alguien hacer lo que quiera, pero no es real. Controlar el tiempo y el espacio te permitiría solucionar cualquier error que hayas cometido, incluso si ha sido el mayor fallo que haya sucedido en el mundo" me dice. Me encanta oírle hablar cuando está así, a veces puede ser un arrogante y un borde, pero otras veces habla con tanta pasión y vida...como la escritura en sus diarios.

"Hmmm" pienso en su respuesta, viendo la realidad que se esconde tras sus palabras.

"¿Qué hay sobre ti?" pregunta, centrando la atención en mí.

"Probablemente lo mismo" le digo después de haberlo pensado durante un corto minuto.

Continuamos caminando por la larga carretera, pero esta vez ninguno de los dos habla, solo pensamos. Me sorprende que no haya llovido todavía. Four y yo llevamos caminando treinta minutos en este oscuro e insólito camino, tratando de llegar a mi casa. Probablemente tenga que conducir el coche de mi padre para llevar a Four a casa ya que nuestros coches están indispuestos.

Mi mochila empieza a pesarme y estoy caminando como si tuviese joroba. Trato ajustarla de forma que me resulte más cómoda, pero no sirve de nada. 

"¿Quieres que cargue eso por ti?" pregunta Four, dándose cuenta de mi extraña postura. 

"¿Qué? Oh, no, lo tengo controlado, gracias" contesto, aún ajustando mi mochila. Sería agradable si él me la llevase, pero no quiero ponerle en un compromiso.

"Oh, vamos Hunter, parece que llevas como un millón de libros ahí dentro". Sin tener oportunidad de responder, coge la mochila de mi espalda y la coloca sobre la suya.

"Joder, esto pesa, ¿cómo cargas con esta mierda contigo todo el día?" su altura parece haber disminuido mientras camina junto a mi, ligeramente encorvado por el gran peso de mi mochila.

"Normalmente dejo la mayoría de las cosas en la taquilla según voy dando las clases y después conduzco a casa" le digo mientras caminamos por el desierto asfalto. Lo único que puedo ver son grandes y verdes pinos en los alrededores. "Gracias, de todas formas"

"De nada, Hunter" dice con una rara sonrisa. No puedo decir qué tipo de sonrisa es, pero es juguetona. Me mira y su sonrisa no se limita a los labios, sino que en sus ojos también se puede ver. Están brillantes y abiertos, llenos de misterio.

"¿Qué?" empiezo a sonrojarme mientras me mira, sin apartar sus ojos de mi. Sonrojarme es la reacción natural cuando alguien me mira. 

"Solo me gusta mirarte, eso es todo Hunter" su sonrisa crece aún más y después gira su cabeza para mirar al frente mientras andamos.

"¿Por qué no dejas de decir mi nombre?" pregunto curiosamente. Casi en cada frase que me dice, usa mi nombre.

"Porque te gusta cuando digo tu nombre. ¿Recuerdas?" una traviesa mueca aparece en su cara, imitando mis palabras "Me gusta cuando dices mi nombre" dice representando mi voz perfectamente.