Capítulo 3

121 16 17
                                    

Me desperté y todo estaba completamente oscuro, saqué un brazo de entre las sábanas y busqué a tientas el móvil en la mesilla de noche. Tras escuchar caer al suelo un par de objetos, lo encontré, lo encendí y me sorprendí al ver la hora, eran las doce de la mañana, ¿cuántas horas había dormido?

Me levanté, subí la persiana y suspiré frustrada, llovía de nuevo. Arrastré los pies hasta el cuarto de baño y me miré al espejo, tenía el pelo enmarañado y los ojos llenos de legañas, asqueroso. Me lavé la cara un par de veces y me peiné, bien, al menos ya no daba miedo. Volví a mi cuarto y me cambié de ropa, maldecí para mis adentros al recordar que solo disponía de pantalones cortos y de camisetas de manga corta. Cogí unos pantalones cortos grises y una camiseta rosa con degradado, me puse unas sandalias y ya sabía que iba a hacer hoy, era día de compras, como no consiguiera ropa más abrigada acabaría cogiendo una pulmonía.

Bajé a la recepción y cogí un plano de Londres, no entendía absolutamente nada, era una negada para orientarme, y más en sitios que no conozco.

Salí y anduve hasta la parada del autobús, ahora el dilema, ¿cuál tenía que coger? Me acerqué a una chica que estaba sentada en el banco de la parada y la pregunté.

- Perdona, ¿podrías decirme qué autobús tengo que coger para ir al Oxford Street?- Pregunté sentándome a su lado.

- Si claro, casi todos los buses paran ahí, en esta parada creo que son el 101, 105, 145, 179 y 230, mira, ahí viene uno, ese para allí.- Dijo señalando un gran autobús rojo de dos plantas que se acercaba.

Me levanté del banco, le di las gracias por sus indicaciones y extendí mi brazo hacia la carretera para indicar al bus que parara, y eso hizo, se abrieron las puertas y subí al interior, pagué el billete y subí al piso de arriba a sentarme.

****

Mi móvil vibraba como loco, había perdido la cuenta de las veces que me habían llamado esa mañana y que lo había ignorado, y continué haciéndolo. Llevaba toda la mañana jugando al nuevo Fifa para la Play, la verdad es que los gráficos son los mismos que en el juego anterior, pero han actualizado los equipos, suficiente para comprarse el juego.

Iba por el tercer partido de la mañana, ganaba por dos, cuando el timbre sonó cinco veces seguidas, solo podía ser una persona.

- Hola Harry.- Dije mientras abría la puerta.

- ¿Cómo sabías que era yo? - Parecía nervioso, entró en casa y se sentó en el sofá.

- Eres la única persona que conozco que llama así al timbre.- Me senté a su lado preocupado, no era normal que me visitara tan temprano.- ¿Qué pasa Harry?

- Lo sabrías si hubieras cogido el móvil.- Se le notaba enfadado, ahí supe que algo iba mal, pero que muy mal.- Los managers se han enterado, de todo, y nos han reunido a todos en el despacho de Simon en una hora, como eras el único que no había respondido a los whatsapps del grupo hemos supuesto que no sabías nada de nada y hemos quedado en que vendría yo a por ti y nos encontraríamos todos allí, va a haber problemas Niall, tenemos que estar preparados para lo que pueda pasar.

- Pfff, joder Harry, no quiero problemas, de verdad, quizá no debimos romper el grupo, solo nos ha traído problemas.- Pensé en las directioners, ellas lo daban todo por nosotros y nosotros vamos y nos disolvemos, no lo veía justo.

- Ya... A mi me dan pena las fans, lo están pasando realmente mal...- Los dos nos quedamos en silencio unos segundos.- Pero quién sabe, quizá las cosas cambien, lo sabremos en un rato, ahora debemos irnos Niall, no podemos llegar tarde.

- Está bien, déjame coger la chaqueta.- Subí al piso de arriba a por la chaqueta, cogí la primera que pillé y me la puse, momentos después Harry y yo estábamos en su coche de camino a las oficinas de la discográfica.

The end is just the beginning (Niall Horan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora