BROOKE
- !BROOKE DESPIERTA DE UNA SANTA VEZ! - escuché desde detrás de mi puerta. Como siempre, lo mío no es despertarme temprano, y menos para ir a acompañar a mi querida hermana a comprar. No me avergüenzo de mi amor hacia la cama, hacia el sueño,... es más, puedo tirarme durmiendo más de 10 horas seguidas y después durmiendo una siesta de 3 horas.
Pero dejando esta gran habilidad que poseo, me levanto de mi cama corriendo para arreglarme puesto que una de las cosas que me dan más miedo después de las cucarachas es ver a mi hermana cabreada. Después de haber escogido un outfit sencillo (vaqueros y una camiseta blanca básica y unas sandalias marrones) me ducho y me maquillo para no ir cual zombie por la calle, pero de una forma sencilla , con corrector de ojeras, polvos y un poco de rímel para resaltar mi parte favorita de mi cuerpo, mis ojos. No puedo negar que el color de mis ojos no me gusta, es un verde muy exótico y raro, y más cuando llega el verano y se aclaran más quedándose en un color precioso.
Cuando cojo el teléfono, veo que son las 11. Genial. No se si reír por el hecho de que me he despertado temprano o llorar porque hace media hora que mi hermana me ha llamado/gritado.
Y sin más dilación, salgo corriendo en busca de la bestia en la cual estará convertida mi hermana por el enfado, pero tras buscar por toda la casa, con lo único que me encuentro es con una nota pegada en la encimera.
" Queridísima hermana, cuando vuelva te voy a pegar por levantarte tarde pero ahora como tardas mucho me voy yo en el coche, ciao. Daphne".
- La voy a matar.- digo en voz alta. No hay cosa que odie más que arreglarme para nada, así que desayuno tranquilamente cereales con leche y saco a pasear a mi amado Scooby. Éste es un perrito Yorkshire Terrier que me acompaña desde hace dos años y nueve meses, como regalo de mis 15 años. Sí, me quedan 3 meses para la mayoría de edad, increíble, pero tampoco estoy tan ilusionada como creía que iba a estarlo toda mi vida, porque chicos, eso significaría que estaríamos en medio de mi primer año de universidad, y no, no queremos que llegue eso todavía.
Una vez que salgo a la calle, llego a la plaza en la que siempre me ha gustado leer tranquilamente mientras que Scooby corretea y juega con los demás perros puesto que esta vallada, aunque eso no implica que no le eche un ojo de vez en cuando, pero es relajante. Así que me disponía a leer hasta que escucho a alguien gritando a lo lejos y distingo que es una figura masculina junto a mi querido Scooby.
- ¡DE QUIÉN COÑO ES ESTE PERRO QUE SE HA MEADO EN MI MOTO!- grita poniéndose cada vez más rojo de la ira.
-P-p-p-perdón es mío, de verdad que lo siento no es usual que haga eso...- empiezo a tartamudear sin querer pero joder, como no voy a hacerlo si me saca 3 cabezas.
-Niña deja de hablar.- me interrumpe. - Ya puedes estar quitando el meado de tu perro de mi querida moto o sino...-
- O sino que.- Le digo lo más borde que puedo. En una situación normal ya estaría corriendo a mi casa como una loca, pero el hecho de que me llamen nena o niña me cabrea demasiado, así que saco mi lado más "valiente" e imprudente y le respondo. Pero veo que no funciona cuando empieza a reírse como si le hubiera contado un chiste.
- Mira niñita no me respondas así, porque no sabes quien coño soy así que mejor baja tus humos princesita.- me dice acercándose cada vez de forma más amenazante.
Y bajo esa amenaza y esa mirada asesina, cojo a Scooby entre mis brazos y me disponía a llorar del miedo y responderle lo más dignamente posible hasta que escucho una voz detrás de mí.
- ¡Eh Will, tranquilízate tío, no es culpa suya!-.
Me giro y miro a mi salvador encarnado en un chaval de la misma estatura del tal Will, pero menos gruñón. Me fijo y este es moreno, castaño, con pelo corto, facciones muy masculinas,... en resumidas cuentas, muy atractivo. Me tranquilizo gracias a su voz, ya no tengo ganas de llorar así que me armo de valor para volver a dar la cara al chico malhumorado y me encuentro con que me está mirando fijamente, como si me estuviera analizando, pero al darse cuenta de que yo también le estoy mirando, desliza su mirada hacia, al parecer, su amigo.
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Todo lo que he hecho.
Romance¿Qué pasa cuando dos mundos diferentes colisionan? ¿Qué pasa cuando no puedes detener esos sentimientos que tienes hacia otra persona que es justo todo lo contrario a ti? Brooke, una chica que le gusta pasar desapercibida entre todas las demás chica...