Todo lo que he hecho.

Capítulo 2

BROOKE

No me puedo creer que haya sucedido esto. Me encuentro ante mi queridísimo armario para irme de fiesta y sin tener ganas. Con pesadez revuelvo mi armario completamente en búsqueda del conjunto perfecto, hasta que al fin doy con una falda larga turquesa, la cual conjunto con una blusa blanca, con un cinturón y unos tacones marrones... et voilà!

Todavía me estaba maquillando cuando escucho un claxon, por lo que voy a mirar por la ventana y veo que mis amigas me están esperando ya dentro del coche. Estupendo. Me había puesto a prepararme una hora y media antes para evitar esto, pero no he podido resistirme a dar mi concierto diario de canciones pop mientras me ducho. Así que termino de pintarme corriendo el rabillo de los ojos y salgo pitando hacia el coche, consiguiendo pisarme mi maravillosa falda y cayéndome así al suelo. Evidentemente mi dominio con los tacones tampoco es mi mayor virtud, pero por lo menos ha sido en el asfalto por lo que mi conjunto no se ha manchado de césped y por suerte no había nadie en la calle, quitando a las dos personas del coche que se estaban riendo como si fueran dos cerdos a base de mi caída. Decido levantarme lo más dignamente posible y entrar en el coche diciendo: - No quiero ni una sola palabra sobre esto.- intentando sonar enfadada y lo único que obtengo de ellas es sus risas aún más alto, por lo que no puedo soportarlo y uno a ellas, por que la verdad que si le hubiera pasado a ellas me estaría riendo de por vida.

El camino hacia la discoteca se me hace corto porque a pesar de estar a 30 minutos, nos la pasamos cantando y riéndonos todo el rato, así que cuando llegamos no me quería salir del coche por que ya nos lo estábamos pasando bien allí dentro, pero por desgracia tengo a dos amigas muy brutas que me sacan empujándome, literalmente.

Cuando salgo del coche me acuerdo que tengo que enviarle un mensaje a mi hermana mayor para que se tranquilice. Aún no se como he conseguido convencerla de que pudiéramos venir... bueno si, tengo que limpiarle el cuarto durante una semana, muy cruel. 

Decidimos entrar al escuchar Hey Mama de David Guetta y Nicki Minaj  desde fuera de la discoteca ya que era una canción que nos encantaba a las tres antes y nos pusimos a cantarla cual cantantes profesionales. Tanto nos metimos en el papel que acabamos como en una especie de tarima cantando. La verdad es que me encanta cantar, tanto como jugar a baloncesto, pero el tema de cantar en público no me iba mucho porque me daba mucha vergüenza, no se como lo he hecho pero cuando me dejo llevar por ellas es distinto y dejo "el que dirán" a un lado. Y todo iba bien hasta que distingo entre la multitud (que extrañamente nos estaba animando y aplaudiendo) a dos figuras familiares (las cuales acababan de entrar) mirándonos. Y así tal y como se fue la vergüenza, esta volvió en un instante al darme cuenta de que el malhumorado de esta mañana me estaba volviendo a mirar como si me estuviera analizando, pero esta vez tenía la expresión mas suave y al parecer, una incipiente sonrisa. Pero gracias al dj, la canción acaba justo en ese momento y yo, como no, salgo corriendo al baño. Detrás entran corriendo Hazel  y Tessa con cara de preocupación.

-¿Que te ha pasado?- me pregunta Tessa.

-Chicas ayer se me olvidó contaros que conocí a dos chicos, por culpa de Scooby que se hizo pis en una moto de uno de ellos, y bueeeeno... no es que fueran muy feos que digamos.- termino de decirles.

-¿Y eso es lo que te preocupa?¿Eso es que te gustaron?- pregunto Hazel esta vez.

-Punto número uno, no puede gustar alguien sin conocerlo. Punto número dos, no lo se me ha dado un ataque de vergüenza repentino pero chicas, antes de esto, ha sido impresionante lo que ha pasado allí.- digo riéndome en esto ultimo. Ellas saben que me cuesta cantar en publico, por no decir que solo les he cantado a ellas y a mi familia, pero doy gracias de tenerlas por que ellas me animan a hacer cosas diferentes.