Narra Eva:
Esto era fastidioso. Había pasando toda la cena mirando a esos dos infelices de Shu y Laito. Se creen que pueden morder mi cuello asi porque si. Sólo porque soy humana no significa que pueden tocarme como ellos quieran...no soy un juguete. Se supone que sea su novia, se supone que me traten como una ¡maldita reina!
Además de no poder comer nada por la incomodidad de esos tipos raros y hasta parecen emos, siento mi estómago matarme. Todos me observaban de vez en cuando mientras masticaban sus comidas con descaro. Ver como sonreían con sus colmillos afilados era aterrador. ¿Y si deciden atacarme todos ellos juntos? Moriría instantaneamente. Eso sin mencionar esos recuerdos que tengo de otros hombres...me preocupa...me preocupa ver tantos hombres en mi vida pasada.
Caminé por los pasillos mientras me estremecía levemente en mi vestido blanco y algo largo. Reiji me obligó a ponermelo para la cena, según él dijo que podría verme más "elegante" con esto. Pensandolo bien lo odio, este pedazo de tela vieja apreta mi abdomen con fuerza y sin piedad. Otra de las razones la cual no pude comer.
Entré a mi habitación y me encontré con algo curioso. Al parecer había un gatito revolcandose tiernamente en mi cama.
-hola pequeña perra- sus ojos se fijaron en mi rápidamente sin perder su tiempo. Fruncí el ceño mientras aguantaba cualquier comentario que lo enojara más que a mi. Debo ser cuidadosa, él podría matar me en segundos.
Caminé hacia la ventana de mi habutación y observé la noche de luna llena. No tenía ninguna expresión en mi rostro por ahora. Traté de mantenerme neutral sobre la situación o el dialogo que ibanos a tener. Sobre todo si vives con seis vampiros en una mansión. Debo estar loca...no se si prefiero estar en el infierno o encerrada aquí.
-Hola...-contesté sin tan siquuera mirarlo a los ojos. Traté de ignorarlo hasta que sentí como tomaba mis hombros por detrás y luego susurraba en mi oido.
-Te gusto lo de la ducha ¿cierto? Traté de tu primera mordida fuera especial. Aunque te desmayaste muy rápido- Rió suavemente acariciando mi oreja. Lo cual me provocó un gran escalofrío en mi piel pálida y delicada.
No aguanté y bufé -Quita tus manos de encima- me alejé de él sin darle importancia a esas palabras- Y no has sido mi primera mordida...Shu me la dio antes- le dediqué una sonrisita amable mientras fijaba mis ojos con los de él. Era bonito ver como su expresión traviesa se volvió seria y algo penosa.
-Ese maldito te toco...vaya que fue inteligente porque, tu sa gre es especial. No es igual a otras- estuve a punto de reírme. ¿Acaso recibir alagos de parte de ellos me ayudará a superar sus jodidas mordidas?
-Se que soy la novia de sacrificio...Reiji me explicó todo pero, eso no significa que puedas jugar conmigo como si fuera un bolso de sangre para ti-comenté fríamente sin cambiar mi actitud ni posición.
Él se acercó lentamente a mi con mirada de tigre listo para cazar- Oh pequeña perra...ser novia es justamente ser un saco de sangre. Te morderé, tocaré e incluso castigaré cuando yo quiero- sonrió al fin dandome una visión clara de en donde me había metido. Esto...esto es enfermo.
(...)
Agarré con fuerza la rosa blanca y delicada que mis manos arrancaron del jardín con tanto esmero. Me detuve en la puerta de la habitación del Subaru la cual parecía que nadie vivía allá dentro del silencio que trasmitía desde afuera. Respiré hondo para tomar el valor necesario y toqué su puerta tres veces.
Esperé algunos segundos y no respondió.
-¿No estará ahí?-susurré mirando la puerta más de cerca y luego sentí una mano tomarme de mi muñeca para darme vuelta bruscamente.
-¿Porque tocas mi puerta eh, no te vasta con tu hablar ruidoso?-era Subaru el que me asustó de esa manera tan cruel.
-Y-yo vine a...-miré la rosa blanca-¡Vine a agradecerte por cuidarme hoy en la ducha-sentí mis mejillas arder al extenderle la planta hermosa con pocas espinas. Él miró mis manos y luego se dirigió a mi con desagrado.
-¿Es en serio? De todas las cosas que me puedes obsequiar...¿¡Me das una rosa blanca!?- tomó la rosa dejandome con la boca abierta y luego le rompió todos sus petalos en mi cara para soltar todas sus partes al suelo incluyendo su tallo. Me sentí como basura...rechazada...
<<fashback>>
-Por favor aceptela-le extendí una carta de amor insistiendole con toda mi alma. Quiero que sepa que lo amo aunque él no me ame a mi. Porque Kou Mukami es un idol famoso y necesito que al menos me diga algo con mucha sinceridad.
Observé como movió su cabellos rubio como toda una estrella- Nunu~ no aceptaré esa porquería, Kou-Kun merece mejores cositas que tu- se rió en mi cara y luego acarició mis mejillas, hombros hasta llegar a ma carta en mis manos. La tomó con brusquedad y luego la rompió en mi cara...como si no fuera nada.
-Sólo eres una pequeña y sucia gatita- susurró riendo mientras miraba mi carta rota en el suelo. Al igual que mi corazón-No sirves para amarme...ni hacer ni guna cosa...nada...no sirves para nada- Kou me miró de pies a cabeza mirando mi uniforme y luego sus amigos y él rieron ráñidamente.
<<<Fin del fash bakc>>>
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Amor, odio y castigo (fanfic Ruki Mukami)
FanfikceGritos abusos castigos Es lo primero que pienso cuando escucho el nombre de Ruki Mukami. Eva es una chica que vive en las calles de japón. Sólo recuerda mucha sangre y unos hombres que la atacaban sin sentido. No entiende nada hasta que una noche al...