Desperté, y a diferencia de los otros días; Andy no estaba en la cama.
Frote mis ojos para acostumbrarme a la iluminación de la habitación, la cual era bastante debido a la gran ventana en el dormitorio.
—Ah, Despertaste —Entro Andy— Dormiste bastante...
El se encontraba perfectamente vestido y arreglado, a completa diferencia de mi puesto que mi cabello debe ser un desastre con apariencia de nido de pájaro y...Tampoco estoy vestida que digamos.
—Buen día —Hable sin ganas, quería seguir durmiendo.
—Necesito que te arregles, saldremos en unos minutos con mi familia.
—¿Cuantos minutos?
—10.
Eso fue suficiente como para salir corriendo y entrar al baño como desesperada.
•••
El viaje no fue tan largo, a decir verdad. Estábamos en un río al que por obvias razones (El frío devastador) no podíamos entrar.
Pero al final no fue tan malo el echo de no poder entrar al río, puesto que nos quedamos en una acogedora cabaña junto con los familiares de Andy.
—E-Entonces el unicornio Morado salto por el puente roto para poder salvarme del Extraterrestre malo. —Termino se hablar la pequeña Violett mientras yo las observaba con toa la atención posible.
—Yo una vez fui un unicornio, y baile frente muchas personas.
A la pequeña le brillaron los ojos y escuche una carcajada.
—¡Yo también quiero ser un unicornio!
Dure un rato mas hablando con la niña, hasta que llego el momento de la verdad.
Jugar Uno
Y tenia una hermosa jugada en mis manos, literalmente.
2 cartas de cargate cuatro, y era ese el momento para usarlas
—¡Uno! —Grito Andy, y yo lance mi ataque
—Maldita sea... —Al el soltar eso Una de sus tías le dio un golpe en la pierna, puesto que habían menores presentes.
Continuamos en el juego de mesa un largo rato hasta que sali de la cabaña Junto a Andy para caminar a la orilla del río.
—No te perdonare esta jugada —Coloco una mano en su pecho de manera dramática.— Pensé que me amabas
Se que lo dijo por "Molestar" pero me quede callada, no supe que responder ante eso. Por que si, Según yo lo hacia, pero es complicado soltarlo tan a la lijera
A continuación, el silencio mas incomodo del planeta tierra.
