Tu alma es mía[Editando]

Capítulo 9 "Atracción"

- ¿Que has pensado? ¿Ya te decidiste a ser mi reina?- pregunto Goku.

- No lo sé aún ...no he tomado una desición.

-Podríamos pasar el resto de la noche juntos, si tú lo deseas- acercó sus labios a los míos, y me besó; cuando se separó tuve que inventar un nuevo pretexto para no sentirme más incómoda de lo que ya me sentía.

- Hoy no, tengo que salir con Videl; de hecho me está esperando, lo siento- Videl era una bruja, era una amiga que de vez en cuando nos reuniamos; claro que hoy no era el caso.

- No te preocupes, me retiro; pero no sin antes recordarte que estaré esperando impaciente tu respuesta- me planto un beso y se marchó.
Cerca de la salida donde estaba la gran puerta que me recibió al principio, mire a alguien entre las sombras, luego escuche su voz...esa voz que tanto me facinaba oír.

-¿Rompiendo corazones?

- ¿No te enseñaron a no oír conversaciones ajenas?

-Tengo que admitir que me puse un poco celoso al verte con él.

- ¿Tú? ¿Celoso? No hay motivo¿O sí?

- Te invitó una copa; podemos ir a mi casa ¿Qué dices?¿Aceptas?

-No lo sé - mordí mi labio- ¿no estabas acompañado por Sayuri?- Se acercó a mí, tomándome por la cintura.

- A ella no le importará si me retiro antes- dijo susurrandome al oído.

-Esta bien...vamos- no pude negarme...tal vez el tiene un poder sobre mí que aún desconozco

Llegamos a su casa; era muy elegante; tenía una fuente y un jardín lleno de rosas...al entrar fuimos directamente hacia la sala.

-Toma asiento preciosa, enseguida te traeré un trago.

-Si...gracias- estaba nerviosa; jamás había sentido miedo y excitación al mismo tiempo.

- Toma preciosa- me dijo, dándome un vaso con wiski.

Hablamos de nosotros, cerca de una hora, de todo lo que había sido nuestra vida tantos años, cuando de repente sin previo aviso me beso.

-Lo siento, no pude resistir besarte, eres tan hermosa somo pienso en hacerte mia esta noche- lo dijo directamente, sin previo aviso. Solo me quedé en silencio; pero yo me sentía igual que él...

Me subí a sus piernas, quedamos frente a frente, y mire su rostro, comencé a besarlo; luego mis manos bajaron sutilmente para desabotonar su traje...