Volviendo unos años tras, me veo una chica de solo 12 años; una nena, y por lo tanto tenía mi "Primer Amor", al cual vamos a llamar Thiago. Estuvimos aproximadamente seis meses de "novios" pero la verdad es que solo nos dimos dos besos.
- Te note raro últimamente - Le dije a mi ex mejor amigo que en ese momento era mi novio.
- No me pasa nada, ¿Por qué lo dices? - Dijo mirando hacia el suelo con nerviosismo mientras volvíamos de la escuela.
- Siento que tienes algo que decirme - Dije directa, cuando siento que alguien me oculta algo no me equivoco.
- Déjate de tonterías - Dijo, se subió a su bicicleta y se fue. ¡Qué le pasa! ¡Por que se enojó!. Me siento tan mal... Que me lo oculta, odio sentirme así.
Con la mente llena de pensamientos llegue a mi casa y saludo a mi mamá.
- ¡Hola má! ¿Todo bien? - Pregunto fingiendo estar feliz.
- Si amor, ¿Como te fue? - Preguntó mientras cocinaba. La miro ¡Y sí! soy muy parecida a mi mama, solo que ella es morocha de pelo y yo castaña (Aunque muchos me digan rubia)
- Bien má - Dije yendo a mi habitación, no tengo ganas de hablar. Solo de dormir y nada mas.
(...)
Abrí mis ojos y no sabía que día era, si era de noche o de día. Miré mi celular y me di cuenta que no había dormido tanto, eran solo las 1:30 p.m por lo tanto la comida ya casi debía estar. Me quedé en cama y me sonó el celular, al volver a mirar la pantalla me había llegado un mensaje de Thiago y cuando lo abrí me encontré con lo peor que pude leer:
"Luci... Perdón por esperar tanto tiempo para decírtelo, y que sea de esta forma, pero fue todo una apuesta. Lo nuestro nunca existió, ah... y por cierto. Gané $50, perdón. Chau"
Y así me quedé, shockeada, ¡Como el siendo mi MEJOR AMIGO aceptaría una apuesta como esa! ¿Cómo él me pudo mentir así? ¡¿Por qué?!
Y cuando menos me di cuenta estaba llorando, la primera vez que lloré por un chico, mi "primer amor" ¡Como no me di cuenta Dios! ¿Por qué a mi?... Era lo único que se me pasaba por la cabeza mientras lloraba.
- ¡A comer Lu! - Escuché a mi mamá desde el comedor. No tenía ganas de salir, se me había pasado el hambre, pero no tenía opción así que me levanté, me lavé la cara y fui a comer.
- ¿Te pasa algo? - Dijo Carlos, el esposo de mi mamá mientras ella y mi hermano me miraban con cara rara.
- No. Solo me quede dormida, por eso mi cara - Siempre zafaba con esa respuesta. No contestaron nada, solo me senté y comí.
Al terminar de comer pedí permiso para ir a casa de mi mejor amiga, a la única que le podía contar, con la única que me podía desahogar. Ella vive un poco lejos, pero nada impedía que valla a verla; como vivía en un pueblo, no había colectivos, tenía que caminar 5km para llegar a su casa. Tiene una casa bastante grande, hermosa y muy cómoda con columnas afuera y muchas montañas alrededor, hermosa vista...
- ¿Hay alguien? - Dije tocando la puerta. Ojalá que si, caminé mucho para llegar.
Abren la puerta - ¡Hola! - Dijo el hermano mayor de mi mejor amiga sorprendido por mi presencia *Federico* dije en mi interior. Lo que me faltaba, encontrarme con él.
Odio la forma en la que me sigue con la mirada, me incomoda y mucho. Es grande, tiene 17, pero porque no decirlo es muy atractivo, me gusta lo que veo pero al darme cuenta esquivo la mirada y paso a la casa.
- ¿Esta Ema?- Dije sin saludarlo, lo importante era estar con mi mejor amiga, necesitaba desahogarme.
- Sí, pasa. Está en su habitación. Y para la próxima, es de mala educación no responder un saludo - Dijo pícaro, no quería hablar con él. Mi mente lo rechaza, de alguna u otra forma y no se por qué pero me ponía nerviosa.
- Sí, hola y chau - Hice una sonrisa irónica, lo esquivé y tomé camino hacia la habitación de mi mejor amiga.
Ahí estaba, acostada y escuchando musica con los auriculares
Ella es muy bonita, rubia (pero no hueca), amorosa y completamente confiable.
- Ema - Dije levantando un poco mi voz para llamar su atención, mientras pegué un salto y la abracé. ¡Cuanto necesitaba esto!
- ¿Estas bien? - Preguntó con ansias y cara de preocupación mientras se separaba de el abrazo
- No, pero no puedo contarte aquí - No es el lugar, de eso estaba segura.
- Bueno, vamos entonces - Se sentó en la cama y se puso las zapatillas, me tomo de la mano y salimos corriendo de vuelta camino hacia mi casa.
En el camino le conté todo, le mostré el mensaje y en su cara se veía decepción, Thiago también era su amigo y de seguro tampoco se lo esperaba, al igual que yo.
- Tengo una idea, pero... No sé... - Murmuró Ema insegura.
- ¡¿Idea?! ¿Cómo? - Me paré en seco. Si había una solución la necesitaba urgente.
- Se que es mi hermano, que no debería decir esto pero... - Dudó un poco antes de continuar - Un clavo saca a otro clavo. ¿No es así?- Mientras hablaba me miraba seria. Estoy confundida, ¿Que tiene que ver Fede en todo esto?
Al ver mi cara de confusión ella siguió:
- ¡Sí!, vos le gustas y quizás el puede ser tu solución... ¿El te gusta? - Me quedé muda, quieta, quizás hay una forma de olvidarme de Thiago. Y no, no me gusta, me parece grande para mí. - Pero es una solución... - Murmuré y mi mejor amiga me miró esperando una respuesta y por primera y última vez le mentí.
- Sí, si me gusta - Lo solté. ¿Que podía perder?
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Esto Es Solo Nuestro •EESN•
Teen FictionNo les voy a contar una historia de amor, mas bien les voy a relatar como se puede sentir adrenalina con el simple hecho de estar a centímetros de alguien no debido. Te atreverías a desafiar lo prohibido y pasar un rato completamente sin que nada t...