La Rebelión de Las Diamantes. {Bellow Diamond} 💎

Cap 10.

--Perla--
Nos dirigimos hacia donde León estaba, entrando en su cabello. No estaba para nada segura de esto, en verdad me habría gustado negarme a todo esto... Otra Rebelión... Realmente no sé si podré volver a aguantar todo esto, y más cuando ella no está... Cuando Rose no está para protegernos y ayudarnos.

-¿Realmente... Es esto buena idea...? —Murmura perla agarrándose el brazo, desconcertada—

-Lo es. —Se gira Garnet a ella— Sé que no quieres revivir ninguno de esos momentos Perla, pero piensa, que si no nos unimos a ellas esa Rebelión podría regresar a la tierra, podría volver a ser todo como aquella vez.

-Aquella rebelión duró miles de años... —Agacha su cabeza— murieron muchas de nosotras, y todo lo que hicimos fue en vano porque ellas ya no pueden contarlo... Ni siquiera Rose puede.

-Rose habría querido esto también, —Garnet le toca el hombro— habría querido lo mejor para todas y para la tierra, estoy segura. —Le esboza una sonrisa—

Decidí ser yo la que liberase a Bismuto; tomé su burbuja y la exploté liberando su gema... Tomó su forma física que cualquiera reconocería de cerca o lejos.

-Oh, otra vez este sitio raro... —Mira a su alrededor confusa— (...) ¿¡Perla, Garnet!?, ¡se hace bueno volver a verlas amigas mías!

-Mucho tiempo sin vernos Bismuto —Le sonríe— de seguro lo que te diremos te gustará.

Le contaron todo sobre la nueva rebelión y qué había sucedido con las diamantes, todo sonaba muy paranoico para ella.

-¿¡Ayudarlas, a ellas!?, ¡estáis perdiendo la cabeza, no podemos ayudar a quién nos montó una rebelión que duró miles y miles de años e intentó destruir la tierra! No acepto, no no no. ¡Me niego a colaborar con las diamantes, antes prefiero quebrarlas! (💢) —El tono de Bismuto se alzaba del cabreo que sentía por esa idea—

-Hazlo por nosotras. Hazlo por Rose. —Le persuade Garnet— Sabes que Rose accedería a esto aunque las odiase, solo lo haría con tal de salvar la tierra de más rebeliones.

-Rose... (...) ¡Tsk, de acuerdo!, pero solo hago esto por el nombre de Rose Cuarzo, ¡nunca por ellas!

-Nos parece bien querida amiga. —Sonríe Garnet— Necesitamos tus mejores armas para esta rebelión, ¿podrás ayudarnos?

-¿Armas?, ¡que no se diga, traeré las más fuertes o mejores que hay! Si se trata de un diamante, entonces podré usar el Punto de Quiebre...

-¡No es necesario que lo uses! —Le interrumpe Steven— Es una arma demasiado fuerte, ¡no es necesario quebrarla, podemos hacerla entender!

-Oh hijo de Rose, ¡menudo el mundo en donde vives!, es una diamante que intenta destruir la tierra, ¡merece y debe ser quebrada! Y más si se trata de esa diamante de White Diamond, apenas se conoce de ella, solo que nunca trajo buenas intenciones. —Trata de explicarle Bismuto—

-Pero no entiendo porque debe ser quebrada... ¡también puede estar sufriendo! Solo pensadlo, ¡puede que le haya afectado que sus propias compañeras la defraudaran así!

-Ya basta, Steven. —Le detiene Garnet— Esto es un tema delicado que no deberías tocar aquí. —Se refería a Perla; su rostro palideció y tapaba la boca con sus manos, como callándose—

--Yellow--
En la nave buscaban cualquier movimiento de White o lugar. Pudimos conectar la nave a las cámaras de las recámaras y otras salas... Localizamos a White en su trono, con un ejército de perlas blancas, Ágatas blancas bien equipadas que entre ellas estaba esa dichosa Ágata que estuvo aquí, y otras gemas que lucían fuertes. Me fijé en que todas sus perlas eran iguales a su propia... Entonces tenía razón, White se deshacía de sus perlas cuando no cumplían el objetivo como ella quería... Paralicé la pantalla en ese momento como haciendo una captura, para poder quedarnos con sus ejércitos, tener más calculado cuantas son y cuantas debemos ser para la batalla.

-¿Has localizado algo, Yellow? —Le pregunta Blue acercándose—

-Si, una joya... —Sonríe ladina— El triunfo es nuestro sabiendo su ejército al completo. Vamos, debemos hablar con esas gemas y empezar a planearlo todo.

Bajamos de la nave yendo con las gemas. Traían a la Bismuto, su cara era de total desaprobación hacia nosotras y odio profundo.

-Bien, hemos logrado localizar a White, y he descubierto todo su ejército. White no es una diamante fácil, es la primera diamante de la autoridad y tiene más poder que nosotras 2 juntas. Por ello quiero darme el gusto de organizar yo misma el ejército.

-¡Já, va a ser que no diamante, eso siempre lo hago yo, y nadie me quita ese puesto! —Se impone Bismuto—

-¿Estás subestimando mis dotes para gobernar un ejército? Preguntaos por qué duró miles de años la rebelión con mis tropas. Soy la gobernante de mis ejércitos en el planeta madre, y nunca hemos perdido una batalla. Así que... —Se agacha mucho a su cara— Date un aire y deja esto a los verdaderos profesionales.

-Ya basta no peleen, de acuerdo Yellow, podrás gobernarlas tú por ser nueva aquí —Garnet tranquiliza el ambiente, o eso trataba de hacer...—

-E-Esperen un momento, ¿cómo pretendéis formar un ejército cuando solo quedamos nosotras de las crystal gems?, ¡es imposible que ganemos sólo nosotros 6!. —Exclama perla nerviosa—

-Te olvidaste de Peridot y Lapis... Greg también podría ayudarnos, conocía a tu madre bastante bien, Steven. —Asiente Garnet—

-¡Puedo reclutar a muchos de mis amigos que pueden ayudarnos, como... A Lars!, ¡O a Sadie, incluso a aquella mujer que Perla conoció!

-¡No, no, esa mujer no pinta nada aquí! Ni sabe lo que somos y su reacción podría ser mala... —Suspira Perla—

-Cierto, olvidamos a Lars... ¿pero él no seguía en el planeta madre? —Pregunta Garnet—

-Oh, cierto... ¡podríamos contactar con el!, allí también están nuestras amigas gemas defectuosas, ellas pueden ayudar, ¿no? —Dice Steven entusiasmado, hacía tiempo que no veía a Lars—

-Supuestamente él está con ellas en su nave. Diamantes, ¿podríamos usar su nave para contactar con nuestro amigo Lars? El se encuentra donde White Diamond, puede ayudarnos a ganar esto.

-Está bien, todo sea por tener un buen ejército y terminar con todo esto ya... —Le contesta Yellow a la fusión—

Todo estaba marchando según el plan y estabamos reclutando a todas las gemas que conocíamos o encontrábamos, incluso humanos que buscaban cooperar. Todo esto es muy extraño y desagradable... Cooperar con gemas de la rebelión... Lo que el destino es capaz de hacer, ¿eh?.
Empezaríamos a formar los ejércitos mañana mismo y a preparar todo el armamento, no podemos demorarnos demasiado.