You Belong With Me

Capitulo 1

2 años después
Trevor
–¡Trevor! Ya levántate, se te va a hacer tarde para la escuela— oigo que mi madre me dice desde la cocina y al ver la hora que es me levanto de mi cama rápidamente.
Al momento de abrir las cortinas para que mi cuarto no este oscuro me doy cuenta de que Grace está abriendo su cortina también, me voltea a ver y yo le sonrió, entonces ella hace lo mismo. Extraño hablar con ella de cualquier cosa. Desde aquel día del concierto empecé a alejarme de Grace, comencé a juntarme con mis compañeros de lacrosse, conocí a Elena, tiempo después empecé a salir con ella, es la capitana del equipo de porristas. Mientras que Grace se aisló de las personas, veía como en los recesos ella se sentaba sola a comer mientras leía su libro favorito.
Cuando la veo me acuerdo de aquel día, la besé y luego huí como un cobarde, le prometí que la llamaría y nunca le volví a hablar, seguramente me odia.
Bajo corriendo de las escaleras y me siento a desayunar con mi madre.
– Hijo, apresúrate, Elena llegará en 15 minutos y tu no has terminado—comenzó a regañarme.
Me término mi cereal y subo al baño a lavarme los dientes. A los 5 minutos, llega Elena en su coche y escucho que toca la puerta.
– Buenos días señora Robinson, ¿Cómo ha estado?.
– Muy bien Elena, gracias— escucho que le dice mi madre. Llego corriendo a la puerta y saludo con un beso en la mejilla.
– Hola, amor.
– ¡Trevor, hola!—me abraza. – Ya hay que irnos, recuerda que la vez pasada el maestro de Química te regañó por faltar a clases y llegar tarde y te dijo que la próxima vez te quedarías una hora extra de su clase, más a parte que te bajaría puntos si volvía a pasar lo mismo.
– ¿¡Qué!?, ¿Cuando pasó eso?, ¿Por que no me lo dijiste?— me voltea a ver mi madre y me regaña casi a gritos.
– No es para tanto, mamá— le digo mientras fuerzo una sonrisa.
Me despido de mi madre, cierro la puerta y me voy caminando e ignorando cualquier cosa que me quiera decir ahora Elena.
–¡Trevor!, ¡Amor!, ¡Espera!— oigo que me grita, pensaba no hacerle caso y dejar que siguiera gritando, pero en lugar de eso, me volteo y le digo.
–¿Enserio, Elena?, ¿Cómo se te ocurre decirle eso a mi madre?, a parte, sabes la razón por la que he faltado.
– Pues perdón, se me escapó, lo siento, sabes que no lo hice a propósito— me dice con una sonrisa en el rostro.– Ahora sube al auto.
– No, gracias, esta vez me iré caminando
–Pues como digas— se sube a su auto enojada.

Pasa el transcurso del día y Elena y yo seguimos sin hablarnos, al parecer creo que a ella no parece afectarle por qué está con sus amigas y amigos riéndose como si no hubiera pasado nada.

Son las 8 de la noche y me puse a escuchar la música de Alec Benjamin mientras hago la tarea de Matemáticas, dejo la ventana abierta por aunque ya sea noche, hace un buen de calor. Recibo una llamada y veo que es Elena, pensé en ignorarla pero decido mejor contestarla.
–¿Que quieres Elena?
–Me has ignorado todo el día, ya supéralo, te dije que lo sentía.
– Tu ni siquiera te dignaste a hablarme o saludarme, a parte te veías bastante feliz sin que yo estuviera ahí.
– No podía hacer nada, yo esperaba que tu te disculparas conmigo.
– ¿Hablas enserio, Elena?, ¿Por que me disculparía yo contigo?, tu eres la que dijo cosas de mas con mi madre sobre mis faltas, sabiendo que eso me pasó por tu culpa— la regaño
–Pues es que no hice nada malo— escucho que quiere empezar a llorar y me calmo.
– Esta bien, ya, lo siento— siempre termino yo disculpándome cuando pasan este tipo de cosas, aun cuando ella es la responsable de la discusión.– Hablamos mañana ¿vale?, bueno hasta mañana Elena y le cuelgo.
Volteo hacia la ventana y veo que está Rachel observándome mientras discutía con mi novia, comienza a escribir algo en el celular, voltea, me sonríe y reviso mi celular
– ¿Estas bien?— dice el mensaje
– Cansado del drama— le respondo
– Lo siento—abajo pone una carita triste a lo que yo le hago y me encojo de hombros.
Pensaba en escribirle algo que quería decirle hace años y no pude, pero como soy un cobarde, lo único que hago es cerrar la cortina y ponerme la pijama para irme a dormir.