Parte 20 Reto 9/10

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Mamá no estaba en casa, al igual que papá, no me había levantado para ir a la escuela, no tenía ganas para ver a Shawn en absoluto.
Tocaban a la puerta, me daba flojera bajar a abrír y mucho más si era mi tía Susie, ella siempre venía cada vez que necesitaba un favor, no me gustaba platicar con ella, pues me contaba su vida en dos horas lo cual era completamente aburrido y mas ahora, estaba tirada en la cama y seguían tocado, me levanté y talle mis ojos, di un gran bostezo.

— ¡Ya voy! — grité molesta y baje abrír la puerta

— ¿Que haces aquí? — mis ojos abrieron y mi expresión a flojera totalmente por escuchar la vida de mi tía en dos horas, cambió a una aún más rara.
— Quiero hablar contigo
— Pues yo no — hiba a cerrar la puerta pero el con su fuerza no me dejó
— Bien — dejé de forzar la puerta — ¿Que quieres?
— ¿Puedo pasar?
— ¿Para qué? — Arqué las cejas y luego negué — ¿Me hecharas en cara que por mí estamos en detención por dos horas todos los viernes?
— No, por favor — bajó la mirada Shawn apenado
— ¿O me lastimarás con tus palabras? — alegué con sarcasmo
— Vine a disculparme ¿Puedo entrar?

Se veía tan bien como todos los días, el sol pegaba en sus ojos haciéndolos ver llenos de brillo entre ese color miel claro, sus rizos tan despeinados y su aroma que rodeaba el espacio, sus mejillas sonrrojadas por el sol, maldita sea era hermoso.

— Pasa

Hice que subiera a mi cuarto, para hablar mejor, no quería que nos interrumpieran, el dejó que pasará yo primero y después él, cerro la puerta y se recargo en ella mientras yo me sentaba en el colchón de mi cama.

— Perdón — dijo viéndome a los ojos.

Quería decir algo, pero era cómo si mi boca no pudiera hablar, no sabía que decir tal vez un "Te amo" o "Vete al carajo" sólo me quedaba callada.

— ¡Di algo por favor! — me veía preocupado y se acercaba a mí
— Yo... — musite
— Sé que no fue correcto lo que hice, y mucho menos lo que dije — se inco enfrenté de mi, tomó mis manos con las suyas — y en verdad te quiero, y no me gusta estar mal contigo...
— Tampoco a mi me gusta — dije en secó, aún que por dentro tenía ganas de abrazarlo
— ¿Recuerdas cuando te hiba a decir algo y Nash interrumpió?
— Sí
— Te quería decir... — suspiró y sonrió viendo a cualquier lado, para no verme, arrugo los labios y yo estaba nerviosa por cada acto que el hacia, estaba tan cerca de mí — que quiero que tú y yo...
— No somos nada — burle y el rodó sus ojos
— Pero quiero que lo seamos
— ¿A que te refieres? — ahora sentía como si un calor inmenso invadiera mis piernas, y mis manos comenzaban a sudar
— Quiero que seas mi novia — me miró y sonrrojo después
— Shawn... — sonreí y luego vi la notificación en mi celular, decía "Di no" era un reto.
— Y sé que tal vez lo debes pensar y te dejaré hacerlo no te preocupes — me sonrió sin mostrar los dientes y yo parpadeaba lento, sin poder pensar alguna respuesta las que la que el juego me dijo.

— Shawn, siento algo muy bonito por ti pero... no es buena idea que seamos novios — bajé la mirada y eso me dolió como una acuchillada a mi corazón una y otra vez, tratando de contener las ganas de gritarle que sí, que era algo de lo que más quería, que quería estar con él día y noche, que cada vez que sonreía despertaba en mí todos los se sentimientos posibles, que con tal sólo tenerlo aquí, enfrente de mi era lo mejor de todo, que era como todas las maravillas del mundo juntas en una sola persona, que tenía el nombre de Shawn Mendes, definitivamente quería ser su novia, pero no podia.

— Me gustas mucho, eres tan linda en todos los aspectos — sonreí y estaba tan roja como un jitomate — Tienes todo lo que me gusta, adoró estar contigo, y no puedo estar mal contigo, por que te necesito, pero lo entiendo, si no sientes lo mismo...
— ¡No! — exclamé callandolo — no es de que no sienta lo mismo...

No era buena idea decirle lo tanto que anhelaba estar con él.

— Pero estoy confundida, están pasando muchas cosas en mi vida, justo ahora y lo pensaré, pero te contaré después por que estoy así... sólo entiendeme por favor — pasé mi mano por su mejilla y el la tomó, para luego besarla y asintió con la cabeza.

Bajé al baño, el estaba en mi cuarto, suspire y talle mi cara, no sabía si estaba muy idiota para dejar pasar esta oportunidad, o no por seguir el juego, pero con el hecho de que el sintiera lo mismo que yo al verme, era lo mejor de todo. Mi celular vibró y tenía ganas de aventarlo a la taza del baño, y luego bajarle para que se fuera a otro lugar lejos de mí, pero era ridículo.

40 retos
De una vez que está aquí Shawn, nuevo reto, sólo preguntale por que no vive con sus padres, buena suerte.

Lo guardé y suspire, de nuevo subí a mi cuarto y el estaba viendo su celular, al momento que llegué el lo apagó y estaba sentado sobre mi cama, yo tomé una silla y debía sacar sutilmente el tema de conversación.

— ¿Te gusta México? — pregunté para luego mis dedos jugarán entre ellos con nerviosismo
— Si demasiado, los tacos son increíbles — ambos reímos
— ¿Y no extrañas a Europa?
— Sólo a mi familia — sonrió levemente con un poco de tristesa, se veía que los extrañaba
— ¿Nunca has pensado en volver con ellos? — ahora mis piernas se movían, no podían estar quietas.
— Si, pero por ahora no, los visitaré...
— ¿Por que te veniste a México? — pregunté esperando que no se hartara de tantas preguntas
— Quería conocer otro lugar, estudiar aquí, no lo sé, es bueno conocer más personas, culturas ya sabes...
— Pensé que habías tenido problemas con tus padres — dije levantando los hombros
— ¡Oh para nada! Me llevo muy bien con ellos, sólo es eso y otras cosas...
— ¿Que otras cosas?
— Te diré luego, es raro y muy largo...
— Perdona por preguntarte tanto — me disculpé y ambos reiamos
— No te preocupes, esta bien.

Comenzamos en hablar de cualquier cosa, pasó tan rápido el tiempo que casi eran las 8:00 de la noche, el se debía de ir a casa, lo acompañe hasta la puerta y él se despidió de mí, de beso en la mejilla y luego nos quedamos viendo, uno cerca del otro, con los labios casi a nada de besarlos, sintiendo su respiración cerca, un moviendo sobraba para robarle un besó.

— Los amigos no se besan — musite y el río y luego se alejó.
— Nunca lo hacen — dijo y luego puso en marcha sus pies para irse.

Abrí la puerta y cerrándola me deje caer en ella, tenía tantas ganas de gritar pues tanto yo le gustaba a él él a mí.

40 Retos -SM-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora