40 Retos -SM-

Parte 21 11:11

Seguía ahí, tirada en el piso cerca de mí puerta sin poder olvidar lo que había pasado hace un momento, de nuevo tocaron la puerta y como un rayo me levanté, acomodé mi cabello y abrí.

— ¡James! — exclamé y lo abraze y el a mí, luego nos soltamos — ¿Como sabes en donde vivo?
— Linda — lo pasé a casa — No creas que durante tres años en la secundaria olvidaría tu casa, era en la que más estaba siempre.
— Bueno tienes razón
— ¿Y tus padres? — preguntó el quitándose la chaqueta color azul fue para luego dejarla en una silla.
— Salieron, no han estado todo el día — hice un puchero y ambos nos sentamos en el comedor
— Cuentame ¿Como has estado todo este tiempo? Y por cierto ¿Qué paso ayer en dirección?
— Pues no e estado muy bien últimamente, sucedieron cosas que cambiaron mí vida en un giro de 360 grados — reí y el cruzó los brazos, me ponía mucha atención — en cuanto ayer, la semana pasada aflojé los tornillos del asiento del profesor y pues se dieron cuenta...
— Esperó y estés bien, cuentas conmigo — me sonrió haciendo un cumplido — ¿Por que lo hiciste?
— Jaja tal vez fue por que quería experimentar no lo sé...
— ¿El era tu novio?
— ¿Quien?
— El chico que te acompaño, él es muy atractivo dejame decirte — reí a una carcajada
— ¡No! El es mi amigo
— Pues parecía tú novio — dijo el obvio
— ¿Por que lo dices?
— Por que en la forma que el te mira, tu ya deberías saberlo, y se puso celoso de mí era como ¡A mí me gustan los chicos! — hacia movimientos con sus manos y ambos burlamos
— Nos gustamos pero sólo es eso — arrugue mis labios, mientras jugaba con una pulsera en mis manos
— Si tú no quieres a ese chico ¿Cual es su nombre? — arqueó las cejas
— Shawn
— Pues si tu no quieres a Shawn — descubría una paleta — yo sí — comenzó a lamer la paleta.

Me puse a reír pensando en decirle lo tanto que quería, pero eso me llevaría a decirle los retos, mis papás, y no era el momento indicado... mejor no.
Durante poco tiempo me contó su vida, no era como la de mi tía Susie aburrida, al contrario sus aventuras con chicos eran extravagantes, el se fue y yo
decidí ir a casa de Mena.

— ¿Buscas a Mena? — me dijo su madre, ella siempre había sido buena persona conmigo
— sí ¿Puedo subir?
— Adelante cariño — me pasó a su casa.

Pensé en tocar la puerta, pero pensé ¿Que sería lo peor? Mas que encontrarla desnuda, pero lo dudó, así que abrí la puerta.

— Oh yo ya me voy — dije al momento
— Espera — ambos dijieron sonrrojados.

Nash estába sobré Mena, ella aferrada a sus labios y el a su cintura.

— Yo ya me iré, mañana nos vemos — Nash le dio un besó en la frente a Mena, choco las manos conmigo y se fue sin más.
— ¿Ya son novios?
— No
— ¿Y por que se besan? — pregunté rodando los ojos para luego sentarme en su cama
— Amigos con derechos
— Tu no pierdes el tiempo eh Mena — dije en sarcasmo y ella asintió con la cabeza
— ¿Te gusta? — pregunté viéndola de reojo
— No — hizo una mueca — Bueno no sé
— ¡Eso significa un sí! — exclamé riendo
— No, no sé, pero sólo es eso gustó, dudo que pasé algo entre nosotros, o que me enamoré no sé
— ¿Como en los libros? — pregunté
— Si — suspiró — no algún día me voy a pelear con él, y me dare cuenta mágicamente que estoy enamorada de él, correre bajó la lluvia con el rímel corrido para buscar su perdón
— No lo sabemos...
— Nunca pasará, estoy segura — afirmó como si nadie quitará esa idea de su cabeza
— ¿No has visto a Carla? — pregunté desviando el tema
— No, desdé que sale con Cameron es como si no existiéramos — se levantó para recoger un cepillo y peinarse
— ¿No es raro?
— ¿Que? — exclamó mientras trenzaba su cabello
— Ellos, Ósea — me levanté de la cama para ir con ella — De la noche a la mañana son novios, y puedo asegurar que eso no lo planeo el juego, Cameron si si quiera sabía quién era Carla
— Si es raro pero — hubo un silencio durante segúndos — pero si se quieren, esta bien ¿No?
— ¿Y el reto?
— No seguirá, es lo más probable
— Quizás — asentí con la cabeza y luego suspiramos ambas.

40 retos
Mañana saldrán a comer con sus chicos.

Eso alcancé a leer en la pantalla de bloqueo de mi celular, mo guardé y me despedí de Mena, de nuevo salí, tomé mi bicicleta y me dirigí a casa, eran como las 11:00 de la noche, espero y no me digan nada mis padres, me hice 11 minutos en llegar, estacioné la bicicleta y suspire antes de abrír la puerta, si ellos ya sabían de lo que hice en la escuela, me iría muy mal, revisé el celular 11:11 la hora de pedir un deseó.

— Deseó que mis papás no sepan nada de eso — musite ríendo, parecía una niña de 5 años ilusionada con un unicornio.
Abrí la puerta y estaban cenando, estaban bien, no se veían enojados.

— ¿Donde estabas cariño? — preguntó mí madre a lo que respondí y ellos siguieron comiendo.

Subí las escaleras lentamente.

— Oye — exclamó fuerte mi padre a lo que me quede parada, me puse nerviosa — ¿No vas a cenar?
— No papá gracias
— Descansa

40 retos
No fue tu 11:11, fui yo la que te salvó.

Pensé en decirle "Gracias" pero ella también me arruinaba la vida, así que seguí subiendo las escaleras, llegando a mi cuarto me avente a la cama y era cierto, que ridículo los deseos de 11:11 no se cumplen, eso no pasa en la vida real.