Un Cafe Para Dos

Orden #4: Un Roll Ice Cream

—¿Hoy no era tu día libre? 

—HakYeon pidió el día libre, según me dijo tiene una cita. Por lo que me toca hasta el cierre.

—¿En serio? ¿El negro que trabaja contigo? ¿Ese HakYeon? —mira incrédulo a su hermana quien comía tranquila su cereal viendo la tv.

—Sí, él. A diferencia de otros, —mira a su hermano remarcando a quien se refería.— él sí puede despertar el interés en chicas. 

—Cállate. —la empuja con el pie casi tumbándola del sofá.

—Eres un bruto. Tienes a Wonwoo detrás de ti y te quieres hacer el difícil. 

—No me gusta, acepta que no soy gay.

—Cuando el chico de la tienda de la esquina me haga caso. 

—Eres el doble de su tamaño, no creo que le interese ser el de los tacones en la relación. 

—Tienes razón, no creo que Wonwoo ni nadie pueda fijarse en ti teniendo en cuenta que eres un poste de luz prieto y sin neuronas.

Ambos se ríen terminando de desayunar en la sala. Después de acabar sus labores en la casa salen caminando juntos hasta la universidad. Ambos compartían los mismos gustos por lo que decidieron entrar a estudiar cocina juntos, solo que Soowook se especializaba en la pastelería mientras que MinGyu por la cocina en general, aunque los postres no eran su fuerte. 

Soowook trabajaba medio tiempo en el cafe cercano a la universidad, teniendo algo de fama entre sus clientes que también eran estudiantes, ganando buenos amigos y conocidos gracias a esto. MinGyu por su parte era muy popular en sus clases por ser el mejor, especialmente en carnes y platos internacionales. En su facultad eran conocidos como los gemelos Soo Gyu, pues ambos eran un equipo completo de cocina.

—Hoy no quiero hacer absolutamente nada... —Soowook se sienta recostándose en la mesa quejándose. 

—Tienes todo el día para dormir, deja de quejarte. Apenas son las 11:00 a.m.

—Ese es el detalle querido Woojin, no puedo. Tengo trabajo hoy. 

—¿HakYeon faltó? —pregunta Wendy mirando a su amiga.

—El negro tiene una cita. —responde MinGyu tomando el asiento frente a Wendy quitándole una rueda de kimbap. 

—Eso es raro. —responde golpeándole la mano con la cuchara para que dejara su comida.

—Según me contó, es con una de las clientes, pero no me quiso decir quien era.

—Es su vida personal, es entendible. —dice Wendy cruzándose de brazos.

—Personal mis pel-- —se detiene mirando a MinGyu que tenia su mano abierta, esperando recibir algo de la azabache, sonriendo de lado. Ambos tenían un juego de tener que pagarle al otro si maldecían delante suyo, para quitarse la mala costumbre. Quita la mano de su hermano de enfrente suyo de mala gana miran— Igual tenía que decirme. Aunque me hago una idea de quien puede ser. 

—¿Quien crees? 

—Es su vida personal. —repite Woojin imitando la voz de Wendy.