Bajo el Agua [Klance]

Bajo El Agua

Me encontraba sin palabras. El mundo que se ocultaba debajo de aquellas aguas espesas, era completamente sorprendente y único. Tanto sus colores como emociones que parecían bañar el lugar. Era simplemente magnífico. Digno de una película de fantasía, donde todo es alegría y sonrisas.

Llevábamos unos minutos nadando, no había tema que hablar. Un espectáculo con el cual la mirada es suficiente. Aún seguíamos tomados de la mano, eso acabo de notarlo. Todo pareció haberse parado, el sonido disminuyó y no podía apartar mi mirada de nuestras manos entrelazadas. A pesar de que el agua está fría, sus manos eran cálidas. No quiero soltarlas~.

-En qué tanto piensas Lance? - Preguntó el chico Mullet mientras se detenía, aún sin soltarme. -

-Me gustan tus manos, son cálidas. - Hablé sin pensar, lo cual ocasionó un fuerte sonrojo bastante notable. - E-es que tanto estar bajo agua las debe de volver así, no?. Mira esa suavidad, pareces tener toda la piel así, me dan ganas de tocarla. - Se sonrojó. - T-tranquilo, no planeo hacerte nada malo. - Llevé mi mano a mi cuello, dandome leves golpes. - Lo lamento~-

-Tranquilo. - Lo escucho reír. - Puede que tengas razón, el agua crea este efecto... Supongo. - Sonríe dejándome completamente cautivado, olvidando la vergüenza. -

-Y dime... Cómo conociste al viejo?. - Pregunté curioso. -

-Supongo que te refieres a tu abuelo... Mhh~ veamos. - Puso una mano en su barbilla mientras pensaba. Sus labios son rosas y brillantes, usará algún tipo de labial para sirenas?. - Si mal no recuerdo su barco se perdió en una tormenta y llegó a la isla sobre un diminuto bote. Esos que usan para pescar. Podría decir que llegó en el momento justo, ya que unos cazadores habían encontrado la isla y enterado de nuestra existencia. Queriendo así cazarnos... Pero gracias a él, que peleó ante 5 hombres musculosos, nuestra especie e isla está a salvo. - Comentó orgulloso con una sonrisa. - Yo aún era pequeño, pero recuerdo la manera en que los enfrentó. Fue fantástico, podría llamarlo un héroe. Como agradecimiento, mi padre le dijo que desde ese momento en adelante serían aliados, y que sería capas de pedir todo lo que esté a nuestro alcance. Pero el solo quiso hablar conmigo y me dejó un recado. - Su sonrisa no desaparecía más un sonrojo en su rostro aparecía. -

- Eh?, Recado?. Osea... Una promesa?, de la que me hablaste?. Cuál es?, de qué va?. No me entregarán a los tiburones, o sí?. O es que hay un tipo de pulpo malo llamado Medusa que ya se hizo cargo de el antiguo reinado?. - Comente a medida que iba agrandando los ojos, pero al parecer dije algo chistoso. Ya que aquella bella melodia que deseaba escuchar el resto de mi vida, inundó mis oídos. -

- No!, para nada!. - Siguió riendo. Eso me relajó y sacó unas sonrisitas. - Cuánta televisión has consumido para llegar a esas conclusiones?. -

-Espera... Tienen televisión?. - Cambié de tema curioso. -

-Claro que no!, tu abuelo nos contaba las cosas que habían allá. Espero algún día poder visitar la ciudad de arriba. La imagino grandiosa, llena de luces y tecnología. Los autos ya vuelan?. O los humanos?, con máquinas... Obviamente, no? - Comenzó a bombardearme con preguntas. -

-No, no. Aún no. - Reí divertido. - Todo está soñado pero aún no se ha logrado... Algún día iremos juntos y veremos como avanza todo, dale?. - Propuse sonriente. -

- En serio?!. Lo dices en serio?!. - Comentó... Bueno, casi gritó mientras me movía con sus brazos de un lado a otro. -

-Claro, claro!. Es una promesa!. - Dije riendo... Mira viejo, lo que he sacado de ti. Agradezco el hecho de ser bueno cumpliendo las promesas. - Qué tal si me muestras tu hogar?. - Pregunté de la nada. Habré cometido un error?... Si no es así... Por qué parece un tomate?. - Estás bien?. - Dije preocupado, por ahí que a las sirenas les agarra fiebre de un momento a otro. -

-A-si, c-claro...sucede..que las sirenas solo mostramos nuestro hogar... En el momento... Que.. Ya sabes... - Se puso más rojo..., eso es posible?. Parece su cola. -

-En el momento de qué?, no entiendo. - Dije insistiendo, no suelo ser paciente en muchas ocasiones, y esta es una de ellas. -

-Ay, no me hagas decirlo. Es vergonzoso. - Agachó su mirada impidiéndole verle. Carajo, no lo hagas. Estas bien lindo como para esconderte. -

-No lo capto. Para que te des una idea... Un día me contaron un chiste, en tercero de primaria.. Lo entendí en cuarto de secundaria y me tente bien feo a media clase. El castigo que me dieron no lo olvidaré jamás. Limpiar!. - Dije para luego estallar en risas y parar para decirle. - Así que sueltalo León, no capto. - Insistí. -

-E-está bien, pero acércate. - me tomó por los hombros y asomó su rostro a mi oído para poder susurrar me. - Al momento de mostrar el hogar es cuando dos personas se unen, dejando su marca una en la otra. Donde su amor se formaliza y una nueva vida comienza. - y eso me mato, ahre. No literal, osea, me paralizó. -

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Empiezo a odiar el  colegio.
Espero y lo hayan disfrutado.
Posibles errores a corregir.
Tengan una buena semana!

850 palabras