Gatos Guerrero. Lealtad #5 Saga- el destino de los Clanes.

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Ala de cristal se estiró y se levantó.

-vamos- maulló secamente mientras caminaba hacia fuera. patas de bruma, la nueva lugarteniente, la saludó con un movimiento de cabeza mientras ella salía del campamento. caminó atenta a los sonidos del bsque, dudando como decirles que ahora era Ala de cristal. Cuando llegó era la prmera. Su aprendiz se sentó algo apartado de ella.

-¡Hey, Estrella de cristal! ¡y esa cara?- Hoja de hielo se acercó corriendo.- ¿Es por que no te di hoja de menta?- preguntó- de verdad... la necesitaba toda...

-no es por eso...y ya no soy estrella... Ahora soy Ala de cristal. 

Hoja de hielo parpadeó, totalmente cogido por sorpresa.

-lo siento...- susurró mientras ronroneaba pegándose a su costado.

-No te preocupes, Estrella de flor será una gran líder, y yo una guerrera... No necesito ser líder para ser feliz, de hecho estoy pensando en tener cachorros con nariz de Arándano, y mis obligaciones como líder me lo impedían.

-¡C-cachorros! Es es fantástico- ronroneó, aunque en sus ojos había tristeza. Ella en el pasado lo había querido más que a un amigo, aunque jamás se lo había confesado, pues ambos eran curanderos. Al ver su mirada supo que el también la había considerado algo más que una amiga. cerró los ojos dejando que su hocico se hundiera en el suave pelaje de su costado.

-Gracias- ronroneó apartándose y dedicando una fugaz mirada a su aprendiz.

-¡Hola!- el maullido llamó la atención de los tres gatos, que giraron la cabeza hacia Estrella escarchada y Zrpa de Cuervo.

-¡Estrella Escarchada!- maulló Ala de Cristal acercándose- Debes saber que ya no soy líder, ahora lo es estrella de flor. Creo que ella contará lo que consideré en la Asamblea.

-Oh... lo siento- maulló bajando la mirada- habrías sido una líder excelente.

-No se...- Ala de cristal carraspeó- ¿creéis que Cola de Avellana vendrá?

Todos se miraron inseguros.

-¡estoy aqui!- la gata se acercó corriendo con la cola en alto- Estrella de fango ya no cree en nada... no quería dejarme venir. Me ha dejado solo porque tienes que saber algo, Estrella escarchada.- la líder blanca la miró interrogante- Mañana Estrella de Fango te espera en la forntera.

-¿una batalla?- preguntó, bajo su piel sus músculos se habían tensados.

-Hablar... Pero yo llevaría guerreros.

-Gracias- maulló mientras echaba a andar- ¿Sigue la tos verde en vuestros campamento?- preguntó.

Ala de cristal negó con la cabeza:

-Ya apenas se oye alguna tos, la mayor parte han sanado bien.

-También buenas noticias- coincidió Hoja de Hielo- Se podría decir que practicamente ya no hay enfermedad.

Cola de Avellana parecía incómoda, Ala de Cristal la entendió. estrella Escarchada era líder de Clan y ella guerrera, dar información así no era lo mejor.

-Aun seguimos combatiendo, pero la mayor parte están sanos y fuertes de nuevo- masculló.

Estrella Escarchada asintió mientras se adelantaba para llegar al brote lunar. El resto la siguieron, antes de que nadie se agazapara Ala de Cristal alzó la cola:

-Yo, Ala de cristal, curandera del Clan de la Corriente, solicito a mis antepasados guerreros que observen a este aprendiz. Ha entrenaod duro para comprender el sistema de los curanderos y con vuestra ayuda, servirá al Clan durante muchas lunas. Zarpa de camaleón, ¿prometes respetar el sistema de los curanderos, mantenerte al margen de las rivalidades entre clanes, y proteger a todos los gatos igualmente, aunque sea a costa de tu propia vida?

-Lo prometo...- masculló

-Entonces, por los poderes del Clan estelar te otorgó tu verdadero nombre como curandero, zarpa de camaleón, a partir de ahora serás conocido como Cola de Camaleón. En Clan estelar honra tu fe y constancia, y te damos la bienvenida como curandeor del Clan de la Corriente.

El resto de gatos corearon el nuevo nombre. Ala de cristal esperó sentada a que todos se sumieran en el sueño, pero no se unió. Ya no era curandera. Allí quieta, con el helado tiempo, enseguida comenzó a sentir frío, se agazapó ahuecando su pelaje y se durmió.

***

-Ala de cristal...- la gata bizqueó y abrió los ojos.- El resto ya han salido, vamos.

Caminando junto a Hoja de hielo llegó al gran sauce. Cola de camaleón se había internado solo hacia el campamento, y el resto ya se habían destinados.

-Siempre me imagine siendo el padre de tus cachorros...- susurró hoja de hielo- pero siempre supe que eso sería imposible. Observaré a tus hijos crecer con orgullo, como si fueran míos. Seguro que nariz de arándano y tu teneis unos cachorros preciosos.

La gata lo miró y rozó su mejilla con la de él.

-Lo siento... Hoja de Hielo... jamás estuvimos destinados a estar juntos.

-Lo se, Ala de cristal, siempre lo he sabido...

Ambos se miraron a los ojos. Ala de cristal sentía como si se hubiera rotó algo en su interior. 

-Adiós. Que el clan estelar ilumine tu camino...- susurró hoja de Hielo mientras se alejaba cabizbajo.

-Quizá algun días encuentres otra gata... Y quizá tengáis cachorros juntos, aunque eso este fuera del código guerrero... Seré feliz con ello si tu lo eres- maulló. el gato le dedicó una última y larga mirada.

-Quizá...- susurró antes de sumergirse en la oscuridad.