Deseo Prohibido (Terminada)

Viviendo el romance

Shun comenzó a cambiar su semblante, en la escuela sus calificaciones subieron pero hacia lo posible por ir directo a casa saliendo, sus amigos estaban felices por el, todos excepto Seiya quien sabia la causa de ese buen humor y eso era por que hacia años que estaba enamorado de Ikki y le parecía injusto lo que Shun hacia a sus espaldas.

En la facultad sus amigas se preguntaban a que se debía esa nueva alegría.

- Yo creó que Shun esta enamorado -

- Pues quizás, pero quien sera ese tipo misterioso que lo trae loco -

- Mmm será el profesor Shaka, yo he visto que a veces se queda después de clases con el -

- Todos se quedan después de clase con Shaka es muy bueno dando consejos -

- Quizás le haya dicho algo a el ¿y si le preguntamos? -

-Hola June, Miho, Freya, de que hablaban - les pregunto Seiya.

- Solo teníamos curiosidad por el comportamiento de Shun últimamente -dijo June.

- Tu eres su mejor amigo Seiya ¿sabes de quien esta enamorado?
- Freya lo miro con curiosidad.

- Pues, si lo se -

- ¿Y quien es? -dijeron las tres al mismo tiempo.

- No diré su nombre pero les diré como es, tiene piel bronceada ojos azul cielo y es rubio -

- Debe ser muy atractivo - dijo Freya.

-Pues lo es -Seiya se sintió incomodo - Si pregunta no lo escucharon de mi ok -

-Esta bien - todas sonrieron, ahora averiguarían de quien se trataba.

Shun había llegado a su casa término su tarea y preparo la comida, le gustaba cocinar para su amante y había comenzado a lucirse con platillos rusos dado que supo que Hyoga provenía de ahi.

Había terminado la cena y mientras preparaba la mesa el rubio apareció al lado de Ikki.

El peliazul era un hombre de hábitos por lo que al llegar lo primero que hacia era dejar los zapatos en su cuarto para ponerse pantuflas, esto le daba tiempo al rubio de tomar a Shun entre sus brazos y saludar a su querido peliverde.

- Que tal el trabajo, mi amor -le decía pasando los brazos por el cuello del rubio.

- Lo de siempre, es una rutina lo único que lo hace llevadero es llegar a casa y ver a mi conejito dispuesto a darme amor-

Se dieron unos cuantos besos antes que se escucharan los pasos de ikki bajando la escalera justo a tiempo para tomar cada uno su lugar en la mesa.

Ikki había notado un cambio en la actitud de ambos ya no había hostilidades, eso era perfecto excepto por una cosa...

-Hyoga vamos a la cama ha sido una semana difícil y necesito relajarme - le decía al oído mientras lo abrazaba por la espalda.

-¡Hermano necesito tu ayuda!-

- ¡Enseguida voy Shun! no tardo te veo arriba -le dijo en voz baja al rubio y le dio una nalgada.

Estas interrupciones eran muy constantes, llevaba varios días sin tener sexo con el rubio

Shun mejor que nadie conocía a su hermano por lo que cuando veia a Ikki con claras intenciones de tener sexo con Hyoga solía llamarlo con pretextos pues el no permitiría que volviera a tocarlo.

Incluso le preparaba infusiones durante la cena con fármacos que sacaba de su facultad, su deseo por el rubio lo había cambiado pues ya llevaba días drogando a Ikki para dormirlo.

En cambio Hyoga y Shun tenían sexo diario en la habitación del menor, que estando seguro que Ikki no despertaría gemía y hasta gritaba el nombre del Ruso.

Una de esas noches después de hacer el amor, Shun no se veía especialmente contento.

- Por que no le dices a Ikki que me amas y nos vamos de aquí -

- Por que el no lo permitirá, creo que es hora que sepas algo sobre tu hermano, en la empresa nadie se mete con el debido a que se vio involucrado en una riña con un compañero en la que hubo una amenaza de muerte de por medio, quizás no significaría nada excepto que ese sujeto desapareció de un día para otro -

- Ikki no sería capaz de algo así o eso creo -

-Al poco tiempo supe que aquel tipo pretendía a su hermano es decir a ti -

- ¿Sorrento?-

- ¿Lo conoces?-

-Si, Ikki lo trajo una vez a casa -

-Bueno ahora sabes que el no volverá y la verdad después de aquel incidente nadie se quiso arriesgar, yo te vi casualmente cuando iba rumbo al trabajo, eras el joven más hermoso que hubiera visto-

Shun se ruborizó y lo miro sentándose junto a el.

-La segunda vez que te vi estabas con el  y no te niego que los celos me carcomían así que ese día en el trabajo me propuse hablar con Ikki no supe como abordar el tema así que le pregunte si tenía novio, eso fue muy estúpido ya que empezó a coquetearme -

- Sin embargo solo así comenzó a contarme de su vida y de ti, pensé que era buen momento para entrar de lleno pero recordé a Sorrento y me arrepentí, no había opción viable le seguí el juego comencé una relación con el solo salimos unos meses y le pedí que me trajera aquí -

- Entiendo pero aun así ya no quiero ocultarlo, quiero estar contigo, debemos decírselo -

-Amor no creo que las palabras sean suficientes en este caso -

-¿Y que propones?- El peliverde lo abrazo y comenzó a besar sus hombros.

-Tomar medidas mas drásticas mi amor ¿Que estas dispuesto a hacer para estar conmigo? -

- Lo que sea, estoy dispuesto a todo -

-Eso es justo lo que quería oír mi amor- Hyoga lo beso y volvió a meterse a la cama con el para hacer el amor una vez mas.

A la mañana siguiente Shun buscaba en Farmacología algo que le ayudara a resolver su problema.

- Hola Shun ¿necesitabas algo?-

- Hola Freya buscaba cloruro de potasio -

-Mmm eso esta en medicamentos controlados, necesito una receta medica pero tratándose de ti y solo esta vez haré una excepción-

- Gracias Freya eres una gran amiga -

La rubia saco del cajón un frasco

- Solo te recuerdo es un miligramo por Kilo deacuerdo al peso del paciente si lo llegas a exceder sufrirá un paro cardiaco así que ten cuidado -

- Así lo haré, gracias -

Shun ya iba demasiado lejos cuando alcanzo a escuchar

- ¿Y quien es el hipertenso? -

Shun en voz baja solo dijo - Ikki -