Consecuencias

227 12 0
                                    


–Exacto –dijo Átropos, con una mirada penetrante– pero debiste decirnos hace mucho tiempo, Zeus, porque ahora tomaremos serias medidas con tu hija. No podemos dejar pasar este incidente como si nada.

–¿Qué tipo de medidas? –preguntó Zeus, sintiendo como se le formaba un nudo en la garganta.

–Ya que tu hija ha atentado contra nuestra importantísima labor y además desconocemos su destino, con o sin tu consentimiento nos la arreglaremos para ver su destino y definir cuanto le quede de vida y de qué manera morirá. Te informamos inmediatamente que no le queda demasiado y que morirá de una forma que seguramente recordaras por toda tu miserable vida, Zeus. Aprovecha de reconciliarte con ella en lo que le quede de vida, pero por ningún motivo debes decirle lo que acabamos de hablar, ¿entiendes?. Si lo haces, haremos que tengas la muerte más horrible que ha existido jamás. Ten por seguro que observaremos cada movimiento tuyo, cada palabra, cada gesto. ¿Te parece?

Zeus estaba a punto de romper en llanto, pero lo contuvo. No podía permitirse una humillación así. Aclaro su garganta y dijo:

–Esta bien. Lo que ustedes digan. Pero, ¿hay algo que pueda hacer para conservar a mi hija con vida, oh respetables hermanas del destino?

El secreto de Zeus [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora