Capítulos Tres

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Capitulo Tres

Ana 

Desde el día de la boda han pasado 3 meses, la misma cantidad meses que han pasado desde que Gabriel y yo nos besamos por primera y única vez , el día de la boda  todo pasó muy rápido, la fiesta transcurrió  sin ningún tiempo de problema y mamá se la pasó de mesa en mesa con papá hablando con cada invitado lo cuales  era tan rico como el señor Smith, la mayoría de los invitados eran socios y  amigos de Gabriel y su padre, papá estaba aprovechando de hacer sus conexiones para futuros negocios, mama hizo lo que quiso con el banquete, desde un cantante, una banda de música que  Gabriel ese día había contratado, lo que más me molestó fue que mi padre hizo que vinieran algunos periodistas haciendo  que Gabriel se molestara mucho, quería  que la boda del año apareciera en tantos  periódicos como en  revistas, vendieron las fotos  que se iban a tomar hoy, papá había demostrado ser una mierda de padre que iba tras el dinero sin importar que. 

Quise tanto salir corriendo de la fiesta, era como ver un circo dónde el payaso será mi padre. 

Nadie pero nadie  tomo en cuenta mi opinión, nadie pregunto si me gustaba el vestido que la verdad lo odie me presionaba mucho los pechos impidiéndome  respirar y me picaba las piernas porque el encaje de las medias panti era tan  fastidiosos, Gabriel me preguntó en muchas ocasiones que si quería cambiar de ropa por jns más cómoda.  Pero mamá me había dicho que ni una palabra de cambiar mi vestido, así que solo podía negar con la cabeza. 

 Sin contar, que Miss simpatía fue el novio mas  frío y a la vez amable de la noche, era una combinación loca de ver estaba comenzando a creer que Gabriel era bipolar, derepente tenía arranque de amargura, llegué a pensar que me ahogaria con el pastel  o algo así, desde que nos dimos ese beso en la iglesia su humor cambio drásticamente, parecía que mi precencia lo molestaba mucho. 

Pero joder su labios eran suaves, su perfume me acompaño durante toda la noche hemos tados tomados de la mano y sonriendo a cuanta personas nos saludan,  en el momento del baile estaba tan cerca de mi que  su pecho fuerte me hacía sentirme cómoda. 

Pero a decir verdad lo que me preocupa realmente era la actitud que estaba  tomando Gabriel,cuando llegamos a la nueva casa dónde el y yo viviriamos solos sin nuestros padre y destacando que de humilde no tenía nada está casa ni la casita del perro. El se estaba comportaba de forma tan obstinada y frívola y creo que ya no son siemples cambios de humor. 

El chico que dijo ser mi amigo desaparecio por completo y no sabía cómo encontrarlo, no teníamos esa confianza entre nosotros era tan agotador esperar todo los días cual sería su ánimo diario y tener la duda de si era mi precencia la causante de todo esto. 

Tampoco es que yo quisiera un esposo amoroso, atentó y cariñoso o tenerlo pegado en cada momento, solo que pensé que todo sería destinto una ves casados. Pensé que sería como vivir con un compañero de cuerto con el cual te llevas muy bien. 

No para nada fue asi

Su actitud, su forma de ser era tan irritante

Por lo menos comencé a notar algunas cosas en su comportamiento que me preocupaban de alguna manera muchas veces  salia de casa muy temprano casi de madrugada y otras  llegaba tan tarde, algunas veces le decía a Marcela la ama de llave que el mismo contrato sin pedir mi opinión,  que estaría muy ocupado y que fuera ella quien me acompañara a comer o a entretenerme  como si yo fuera un perro que hay que pasear. En realidad  no me molestaba para nada, me molestaba el echo de que nada de eso me lo comentaba primero a mi, siempre me enteraba de todo por Marcela. 

El simplemente tomo decisiones sin consulta primero cosas como debo tener un chofer y gracias a dios no sabia aún como lo hizo pero  pudimos tener a Rafe el chófer de mi familia con nosotros. Otras de sus órdenes fue que debo  dormir con el en la misma recamara junto con el. 

Lo Siento Quiero Separarme De Ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora