UN AMOR MAS ALLA DE LA MUERTE

CAPITULO 1. LA SORPRESA.

Hace algunos días mi adoradisimo  padre nos sorprendió llegando unas horas más temprano de su hora acostumbrada y además invitándonos a cenar, la verdad es que a mi mamá y a mí se nos hizo súper raro, pero pues una cena fuera de casa no es como para rechazarla, en fin la cosa fue que ya estábamos por terminar el postre y el no decía nada, ya hasta que de plano mamá le pregunto que se traía y nos soltó la bomba. Si ya nos había sorprendido con la invitación a cenar, volvió a hacerlo nuevamente, nos salió con lo que podría haber sido una estupenda noticia, un ascenso, lo habían nombrado director general, ¡claro que era muy buena noticia! A nadie le cae mal una lanita extra, pero en ese momento yo no lo vi así, de no ser  porque gracias a ese ascenso muchas cosas cambiaron hasta podría haberlo felicitado.

Ese aumento de sueldo implicaba grandes cambios para mi familia, entre ellos y el más importante fue cambiar de residencia, el nuevo puesto de papá estaba a muchos kilómetros de casa y como era de suponerse, una oportunidad así no se presenta muy seguido, obvio; el acepto gustosamente su nuevo puesto en esa maldita nueva sede, ¿Cómo negarse a esa gran oportunidad? Un nuevo puesto, nueva casa, nueva vida, no es que lo que teníamos no estuviera bien, pero sus jefes supieron pintarle las cosas muy bonito que no pudo rechazarla.

¡Si, como no, nueva vida! Pero que estupidez mas grande, ni siquiera tuvo la delicadeza de preguntar que pensábamos al respecto, el señor ya había aceptado el puesto, solo nos estaba avisando que nos mudaríamos pronto, simplemente no le importo lo que mamá o yo pudiéramos decir, ella está acostumbrada, pero yo no tengo porque aguantarme, porque diablos voy a soportar que quiera cambiar mi vida de esa manera.

-No te preocupes. -Dijo mamá.

No preocuparme, no preocuparme, ¿Es que no se daba cuenta de las cosas??? ¿Es que por una vez en su vida no podía estar de mi parte? ¿Que nunca fue joven? Que todo saldría bien… ¡por favor!!!

Como no iba a preocuparme, no podía dejar a mis amigas, ellas nunca me lo perdonarían y mi novio, Josué me odiaría si lo dejaba, no podría vivir sin él.

 Apenas hace unos meses que logre que se fijara en mi, ni siquiera hemos podido salir solos, apenas estábamos pensando dar un paso más en la relación, ya saben lo que dicen los chicos… pasar a segunda base.

Así que vino el enfrentamiento…

-No puedes hacernos esto, mamá dile algo  -Como siempre callada, acatando sus órdenes-. No puedes, mi vida está aquí, mis amigas, mi novio, no puedes alejarme de él, es mi todo, papá por favor. -Unas cuantas lágrimas para convencerlo.

-¿Por favor que Gabriela? No seas tan dramática, después de todo ya existe el internet y puedes estar en contacto con tus disque amigas y tu noviecillo ese, así que bájale a tu teatro. -De nada sirvieron mis lágrimas así que comencé con las agresiones.

-Que fácil para ti no, como siempre no te importa lo que siento, nunca te ha importado lo que me pasa, ya debería de estar acostumbrada, pero si piensas que voy a abandonar todo estas muy equivocado, yo no me voy a mover de aquí, no voy a ir a ningún lado, además no es igual, si podría verlos por la cámara de la compu o podría hasta escucharlos, ¡pero no es lo mismo!

-Amor por favor, no te alteres de esa manera, piensa que es una gran oportunidad para tu padre, para la familia.

-¿Mamá como puedes decir eso, como puedes estar de acuerdo con él? Nos está alejando de nuestro hogar, de la gente que queremos.