Cap. 1 (?

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__Un día, en clase de gimnasia, se estaba jugando un partido de quemados, chicos contra chicas. Todo iba bien, no había nadie que pudiera derribar a Sam, siempre esquivaba o atrapada las pelotas. En cuanto al resto...
__Caín era intocable, pero siempre que agarraba una pelota, se le caía, y si la lanzaba, raramente le atinaba a algo.
__Lazarus también esquivaba, pero nunca sabía que hacer con lo que tenía en las manos. O le pasaba la pelota a alguien más, o la tiraba en cualquier dirección.
__A Judas le costaba esquivar, pero siempre usaba estrategia para pegarle a todos con la pelota.

__De pronto, como era de esperarse, a Judas le dio una pelota. Pero no fue en el brazo, la pierna, o el pecho: fue un pelotazo en el rostro, justo en la nariz.
__Él se encontraba de rodillas, con una mano en el suelo y la otra en la cara.
__Como ya había sufrido bastante, era fácil aguantar uno que otro gemido de dolor, pero el dolor seguía ahí.
__La chica que tiró la pelota se carcajeaba con sus amigas, mientras los chicos se aseguraban del bienestar de Judas.
__Cuando Sam notó que las chicas se reían de Judas, agarró discretamente la pelota y se la tiró a la líder, pegándole también en la cara.
__Todo había quedado en silencio, a excepción de la escandalosa y burlona risa de Sansón, quien sólo quería ver sufrir a esas chicas, pues no era la primera vez que se reían del sufrimiento de alguien.
__Caín y Lazarus miraron al chico con asombro y un poco de miedo. Ambos sabían que Sam no pensaba con la cabeza o los testículos, pensaba con los puños.

Caín: Sam, déjala. No lo vale.

Sam: Oh, pero desearía tanto ver sus feos rostros llenos de maquillaje barato rogando por piedad...

__La chica se acercó con las manos en la cintura y se paró frente a Sam, haciéndolo sonreír.

Ella: ¡Te crees mucho porque eres hombre!

Sam: Y tú te crees mucho por vestir de puta y maquillarte de manera horrible a los 13 años.

__La chica intentó contenerse, pero acabó dándole una fuerte bofetada a Sansón.
__El gran salón de gimnasia se había inundado en un silencio sofocante.
__Todos creían que Sam le devolvería el golpe, pero no fue así. Sólo se quedó mirando la mano de la niña unos segundos.

Sam: ¿Crees que puedes pegarme porque eres una chica? *agarra la muñeca de la chica con fuerza, haciéndola soltar un gemido un poco fuerte* ¿Qué debería hacer yo ahora, eh?

Judas: ¡Sam, no lo hagas!

Sam: *mira a Judas por un segundo, luego vuelve a la chica* HA. Tienes suerte de que él esté aquí, perra inmunda.

__Laz llevó a Judas a lavarse un poco la cara mientras el resto se retiraba a sus respectivos hogares.

Laz: ¿Estás bien?

Judas: *sin prestar mucha atención* Sí.

__Haciéndose el tonto, Laz apoyó la cabeza en el hombro de su amigo. Este lo miró confundido, no estaba acostumbrado a ese trato.

Judas: ¿Ocurre algo?

__El menor respondió con un movimiento de hombros.
__Cariñosamente, Judas le hizo caricias en la cabeza al pequeño. En respuesta, él hizo unos graciosos sonidos de gato.

Judas: Eres lindo😊.

__Ese momento fue muy agradable para ambos, pero no sabían que alguien los escuchaba detrás de la puerta: era Caín.
__Él era muy celoso, aunque no podía hacer nada al respecto. Odiaba ver a Judas con cualquiera, sea su amigo, su hermana o la chica que lo atiende en el kiosco, sólo no le gustaba dejar de ser el centro de atención de Judas.
__Lentamente, se alejó de ahí y salió, llevándose consigo el celular de Judas que supuestamente debía devolver.

¿Qué pasará con el celular de Vegeta?
¡Descúbrelo en el siguiente episodio de Dragon Ball Z Kai!
(Uy, creo que le pifié...)

¿Que creen que hará Caín con el celular de Judas?
Díganmelo en los colentarios ⬇7w7⬇(?

El monstruo dentro de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora