-¿Y bien? ¿Cuál es el plan?
Las tres amigas se encuentran cómodamente sentadas en el salón de Mi Ran. Bueno tan cómodo como lo permite el diminuto ático donde vive de alquiler que consiste apenas en un salón-comedor con cocina, un baño y un dormitorio donde entra poco más que la cama y el armario empotrado. A pesar de todo las tres amigas se las han arreglado para recostarse cómodamente en una pila de cojines sobre el suelo, con el portátil al frente y dispuestas a iniciar una gran aventura. Después de todo aquella casa es el lugar más propicio para reunirse ya que Hana vive con sus padres y Joon comparte un piso con otras amigas en las afueras de la ciudad. Así que de algún modo el minúsculo apartamento de Mi Ran se acaba de convertir en su centro de operaciones super secreto.
La muchacha mira a sus dos amigas, las evalúa en silencio, meditando lo que está a punto de proponer.
Joon es menuda y delgada, con una bonita cara en forma de corazón de rasgos orientales traicionado tan solo por el color avellana de sus pequeños ojos rasgados, acostumbrados a reír, y la mata de rizos de un rubio tostado que recubre su cabeza, legado de su ascendencia española. A primera vista es difícil adivinar la personalidad fuerte y decidida que yace tras su pequeña figura.
Hana, en cambio, es alta y delgada, tal delgada que incluso las modelos la envidiarían. Su piel pálida, su rostro triangular, las finas cejas curvadas que coronan sus relucientes ojos negros y el largo, sedoso y perfectamente liso cabello azabache... si fuera consciente de ello y se arreglara un poco sería sin duda el tipo de chica que hace volverse a los hombres en la calle. Pero vive tímidamente completamente ajena a sus encantos, presa a menudo de sus inseguridades. Tan solo los más allegados son conscientes de la fuerza interior que oculta.
Junto a ellas Mi Ran siempre se siente algo simple y burda. De mediana estatura y delgada, con más curvas de las que le gusta dejar ver, carece de la envidiable figura de Hana ni el exotismo de Joon. Se siente incómoda con la excesiva feminidad de su propio cuerpo, tan poco acorde a su personalidad introvertida. Una corta melena castaña a menudo despeinada enmarca un rostro ovalado ni bonito ni feo en el que tan solo destaca la profundidad de sus ojos de medianoche.
Con todo y pese a sus diferencias, o tal vez precisamente debido a ellas, las tres hacen un equipo envidiable.
Carraspea para aclararse la garganta antes de empezar a hablar. Joon y Hana se vuelven hacia ella expectantes.
-He pensado que tal vez deberíamos cambiar de nombre al grupo-titubea. Le causaba cierto pesar decir aquello- Ya sabéis que ACOSSO no suena precisamente bien... Podría dar una mala impresión.
Joon se apresura a enarcar una ceja.
-¿Es eso lo que te ha estado preocupando?- pregunta, su voz no puede evitar el deje burlón- De verás, Mi Ran que a veces te preocupas por las cosas más insignificantes.
Mi Ran sonríe a modo de disculpa.
-Yo no quiero cambiar el nombre- musita Hana- Me gusta el nombre. Somos ACOSSO, no hay de qué avergonzarse.
-¡Exacto!- corrobora Joon asintiendo muy seria- Además, ¿quién lo iba a saber? ¿Recuerdas? El Supersecreto queda entre nosotras.
Mi Ran deja escapar una risita. Se siente aliviada, lo cierto es que a ella también le gusta el nombre. Puede ser algo tonto e incluso infantil, pero es el nombre tonto e infantil con que se identifican. Ellas son ACOSSO, así de sencillo. Sonríe aliviada. Se sentía en la obligación de proponerlo como medida de seguridad pero le tiene demasiado cariño al nombre para dejarlo marchar.
-En ese caso tal vez deberíamos inventar otro nombre oficial, ya sabéis por si queremos abrir una web o atraer gente- propone- Y seguiremos siendo ACOSSO entre nosotras. ¿Alguna idea?
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Fan Wars
Fanfiction"Siempre te están observando... No podrás escapar de ellas" Corea del Sur. Actualidad. Un grupo de amigas hartas del acoso de las "fans sasaeng" deciden tomar cartas en el asunto y crear su propio Equipo Antidisturbios para proteger a sus idols. ¿Pe...