Nuestro querido Demonio Sebastian ya lleva 3 años sirviendo a su querido y joven amo Ciel Phantomhive, el pequeño conde lo sabe todo acerca de su mayordomo, a no ser de una sola cosa, esta es que su mayordomo siente algo por el pequeño conde de 13 a...
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P.O.V Sebastian
Mire al Joven Amo dormir por unos pocos segundos más para despertarlo, de lo contrario no comería su merienda y llegaría tarde al evento de la Reina Victoria y se molestaría bastante.
-Joven amo, ya es hora de despertar, no quiere llegar tarde a su evento ¿O si?- Coloque mi mano en su hombro moviendo lo suavemente para que despertara.
En cuestión de segundos el joven amo dió unos quejidos y comenzó a abrir sus ojos, al ya tenerlos completamente abierto los comenzó a frotar con sus manos para despertarse totalmente.
-¿Qué hora es?- Dijo el joven amo mientras se alejaba un poco del escritorio y daba un pequeño bostezo.
-Son las 7:40 joven amo- Dije sonriéndole como de costumbre mientras el mantenía su adorable expresión seria de siempre - por cierto, aquí está su merienda- coloque delicadamente la charola con los aperitivos en su escritorio mientras él solo los veía.
-Bien, puedes retirarte, te llamaré en cuanto termine- el joven o comenzó a comer aquel biscocho y yo antes de retirarme hice una reverencia para luego salir y dirigirme a el jardín, en estos días era muy pacífico estar afuera.
Al estar ya afuera pude ver a una hermosa gatita negra, me agache levemente y la acaricié mientras sonreía.
Los gatos son el animal mas hermoso de este mundo, son simplemente perfectos.
Después de un rato deje de acariciarla y decidí entrar ya que quería ver cómo iban las cosas ahí adentro, al entrar me percate de un aroma un tanto raro.... Era como.... Leña?.... Humo?....Fuego?.... FUEGO!
Me diriji rápidamente a la cocina donde estaban los demás sirvientes tratando de apagar un incendio.
-¡¡¿Pero que fue lo que sucedió?!!- grite mientras los miraba molesto, ellos solo me miraron por unos pocos segundo y les ayude a apagar el fuego, al ya estar apagado volví a preguntar- ¿Que fue lo que sucedió?-
-Es que queríamos hacer un pastel para Sebastián-San!!! Y el Joven amo!!!, Y se nos quemó- Dijo Finnian mientras hacía un puchero y comenzaba a llorar.
-Es que queriamos hacer algo para agradecerles a ti y al Joven amo todo lo que han hecho por nosotros...- Dijo Bard algo avergonzado mientras apagaba su cigarrillo.
-S-Si, nosotros deseábamos hacer algo especial para ustedes pero.... Somos muy inútiles!!!- Dijo Mey-rin comenzando a llorar junto a Finnian -Adenas queríamos que fuera una... Una sorpresa, pero todo se arruino- continuaba mientras abrazaba a Finnian.
Sonreí levemente al verlos, a pesar de ser unos buenos para nada, en este momento se me hacían bastante tiernos.
-No tienen que hacer nada para agradecerle, el trabajar con ustedes es un honor- la verdad no lo era del todo pero poco a poco les e agarrado un poco de Cariño a este trío de idiotas buenos para nada - Si hay alguien a quien deben agradecerle es al joven amo, si no fuera por el ni yo ni ustedes estaríamos aquí-
