TODO LO BUENO ESTÁ POR LLEGAR:
Cuando se termina una relación,
hay que dejar tiempo.
Ceder paso a tus colmillos
para que se vuelvan a afilar.Y entonces respirar,
no dos o tree veces,
sino miles,
miles más.Oxigenar una rutina pasada,
una boca que ya no besaras,
olvidar unos ojos,
que ya no te mirarán igual.Respira,
aléjate,
si tiene que volver, volverá.
Y si no, recuerda esto:
todo lo bueno está por llegar.