Viejo Hogar

10 2 4
                                    

La Tierra

Cuadrante 28

Las "agujas azules" de la hipervelocidad se disiparon permitiendome contemplar la tierra, envuelta en una leve capa radioactiva haciéndola lucir de un tono grisáceo y café, muerta... ¿Donde debería buscar? Empecé a acercarme al planeta, conforme me acercaba las insípidas nubes cubrían mi nave hasta que logré pasarlas, las ciudades estaban inundadas en la espesa niebla, había niebla demasiado alta, sobrepasaba muchos edificios y solo podía ver unos cuantos a lo lejos Aterricé con mi nave en uno de los edificios en ruinas más cerca que tenía, aún tenía el suficiente espacio en el destruido tejado donde pude alojar mi nave.

Antes de salir tomé las medidas adecuadas para no resultar afectado por el ambiente venenoso colocándome botones de oxígeno comprimido en la nariz, cubriendo mi boca para no respirar el aire del lugar y por último poniéndome lentes de contacto que protegían completamente mis ojos además de que me otorga información visual de mis alrededores.

Salí de la nave con todo lo que necesitaba, pero no tenía un arma, regresé a la parte de atrás para buscar algo, solo encontré munición, pero de pronto algo resplandecío en mi rostro, era una espada, muy vieja, pero parecía que servía.

-Supongo que peor es nada -Dije desanimado

Salí de la nave, estaba de pie sobre el edificio, medría alrededor de 200Mts. De altura, apenas podía ver el suelo y unos cuantos edificios huecos, la niebla tóxica obstruía mi visión a pesar de los lentes de contacto, sin embargo, me mostraba los componentes en el aire... Azufre... Hidrógeno... Nitrógeno...

De pie en el poco tejado que tenía el edificio, pude ver dentro del mismo, el piso de abajo no estaba tan lejos como pensaba, pero parecía que colapsaría en cualquier momento ya que estaba demasiado dañado.

Me acerqué a la orilla del edificio y bajé al siguiente piso caminando por la orilla destruida.

Cuando bajé, parecía una oficina, habían escritorios apilados junto a una puerta de una habitación de vidrio, los vidrios estaban rotos pero, los restos estaban tirados fuera de la habitación, no hacía dentro, varias paredes de cubículos tiradas por todos lados, al fondo había unas escaleras al lado de un elevador obviamente inservible.

Me dirigí hacía las escaleras y comencé a descender el edificio, cuando puse la mano en el barandal, estaba húmedo, revisé que había en el barandal, era sangre, pero, estaba fresca, era mucha sangre estaba únicamente en el barandal, también en la pared que estaba a mi lado derecho.

Sin pensarlo, saqué mi espada y seguí bajando las escaleras, el rastro seguía, no quería toparme con lo que sea que haya hecho eso, con cada peldaño que bajaba mi sangre se congelaba un poco más, el rastro de sangre seguía, hasta que en una vuelta en aquella escalera de caracol... la sangre iba hacía arriba... Voltee lentamente hacía arriba siguiendo el rastro de sangre con mis ojos hasta que mis ojos lo vieron... Una masa amorfa de color piel, una boca con dientes enormes, ojos completamente blancos, tenía cabezas humanas saliendo de él, se retorcían...

El monstruo abrió la boca y cuando lo hizo expulsó una exagerada cantidad de sangre, corrí bajando las escaleras para alejarme de esa cosa, entonces se bajó del techo y comenzó a perseguirme, era más rápido de lo que alguno pensaría, habré bajado unos 5 pisos hasta que estaba por alcanzarme entonces fue cuando entré a a la puerta del segundo piso, cerré la puerta tras de mi, guardé mi espada, me dispuse a tomar un respiro.

La criatura expulsó más sangre que se colaba por debajo de la puerta y después dijo.

-No puedes escapar de nosotros -lo dijo con una voz de ultratumba

El Fin Del Universo (Cancelada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora