luke simulator ♡ muke

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Todo estaba completamente salpicado de sangre de aquel baño; el espejo, las paredes, la cortina que cubría la ducha y la alfombra que alguna vez fue blanca. La respiración del rubio estaba agitada y los tics en su ojo se producían sin voluntad propia mientras observaba el cuerpo sin vida de aquella chica quien tenía un corte profundo en el cuello y varias puñaladas en la zona de su abdomen. Sonrió poco a poco y empezó a soltar risas quisquillosas, como si lo que estuviera viendo fuera algo que implicara risas, pero una persona normal en su sano juicio no se reiría de la horrible escena que se presentaba en estos momentos.

Luke no era normal, dejo de serlo cuando conoció a Michael Clifford.

¿Temor? ¿Angustia? ¿Arrepentimiento? Para nada. Felicidad, satisfacción y especialmente orgullo era lo que en estos momentos. Porque matar por el amor de tu vida se sentía verdaderamente bien ya que tenías un buen propósito para hacerlo y tenías el presentimiento de que no estaba mal, eso según Luke. A simple vista la escena que se presentaba era parte de alguna película de terror o de algún programa de crímenes en los cuales tienen que censurar por las fuertes imágenes, pero, para la vista de Luke era nada más que una hermosa obra de arte que él había pintado con su afilado pincel.

"Hermoso... " halago cínicamente. Se miró al espejo que tenía una salpicadura de sangre en forma de línea atravesándolo. Abrió el compartimiento y saco una pequeña toalla húmeda para pasársela por la cara y limpiar las pequeñas salpicaduras de sangre que habían en su rostro "listo" murmuro. Por supuesto que no sería tan idiota para tirarla allí mismo, así que salió del baño para seguidamente salir de aquella casa a la cual no volvería a pisar, ya no tiene motivos.

Su trabajo ya estaba hecho y no le importaría volverlo hacer si alguien se cruza en su camino, él disfrutaba de esto.

Salió por la parte trasera del patio, todo estaba en completo silencio hasta que escucho el sonido de un auto llegar en la parte delantera, sonrió. Dio un brinco para montarse en la cerca y saltarse hacia el otro lado, para empezar emprender camino hacia su casa como si lo anterior jamás hubiera pasado. Las calles estaban completamente solas, solo se escuchaban el sonido de los grillos y a lo lejos el ladrido de un perro, los faros alumbraban la calle mientras insectos volaban alrededor de la luz. Ya estaba lejos de la casa, el rubio cruzo la calle y pudo escuchar el sonido de la sirena de una ambulancia aproximarse. Volteó para observar y se dio cuenta de que iba hacía la dirección por la que él se había ido del lugar. Sonrió. Coloco sus audífonos en ambos oídos y puso la lista de reproducción en su IPod, y sin dejar de sonreír siguió con su camino.

Al parecer hoy fue una muy buena noche para Luke.

Quien diría que una tranquila casa de los suburbios de Sídney se convertiría en la escena de un horrible crimen y al parecer a partir de hoy sería algo cotidiano en la vida de Luke Hemmings. Él se sentía completamente fantástico, como si hubiera ganado un cien millones de dólares en efectivo con facilidad o como si hubiera perdido la virginidad con Michael, bueno aunque eso ultimo debe de sentirse mejor que asesinar a alguien con tus propias manos.

«Y vaya que se siente muy bien» pensó, mordiéndose sus labios.

7:10 a.m.

(Horas antes del asesinato)

La alarma sonó indicando que, desgraciadamente, era hora de levantarse para ir a la escuela. Entre maldiciones, el joven rubio logro sentarse en su cama y luego froto sus ojos seguido de un suspiro. Recordó algo que lo hizo sonreír tímidamente, alzo la almohada en donde anteriormente había descansado su cabeza y tomo la pequeña foto que se encontraba ahí, su corazón empezó a latir un poco rápido.

"Buenos días, Mikey" susurro con voz ronca y luego planto un beso en la foto, en la zona de los labios del anterior mencionado.

Coloco la foto en su lugar anterior y luego poso la almohada sobre esta, se levantó de la cama y arrastrando los pies fue al baño para tomar un baño y bajar a desayunar. Una vez que salió del baño fue hacia su habitación a vestirse y luego de un par de minutos bajo a la cocina para prepararse su desayuno. Como era de esperarse esta mañana se encontraba solo al igual que las anteriores, esto debido a que su madre era enfermera y se iba temprano para luego llegar a altas horas de la noche, había veces en la que ella no llegaba sino hasta el otro día para descansar de su trabajo.