Hoy me he acordado de ti, a veces es inevitable volver al punto de partida, tener un momento de debilidad entre tanto tiempo siendo fuerte.
Tal vez haya sido esa canción de beret o que te sigo echando de menos, es curioso como hay días que no te pienso, y otros en los que me levanto deseando un mensaje en mi teléfono con tu nombre, y como hay copas de Ron que solo saben hablar de ti, y chupitos de tequila que hacen que olvide hasta tu nombre.
Noches donde el silencio me ayuda a dormir, y noches en las que me despierta, pero debo admitir que me gusta, el Ron, el silencio y las risas boca abajo.
Y es que de ti ya solo quedan esos días de nubes grises, de ti ya queda poco y quedará menos, tal vez un poco de vuelco al corazón al escuchar tu nombre, pero poco más.
Como la estela de humo que deja un tren que ya se fue.