Conociendote Dos Veces (DEMO)

1. A Distancia

Rose

Hoy es el día. Hoy dejo todo atrás para comenzar una nueva vida en otro país al igual que ingresar a la universidad. Después de mucho esfuerzo pude conseguir una beca en la universidad que quería; la Universidad Católica Santa María de los Buenos Aires en Argentina. Una de las razones por las que dejo todo; mis estudios. La universidad a la que he logré ingresar siempre me ha llamado la atención por su gran campus y la manera en la que imparten las clases. Por otro lado tengo un plan:

Hace casi tres meses que mantengo una relación con un chico de Buenos Aires, lo interesante del caso es que aún así no sé nada de él en cuanto a datos personales se refiere, tanto así que nunca he llegado a verle la cara, apenas he podido escuchar su voz.

No sé cómo terminé teniendo una relación de este tipo pero tengo que admitir que él es una gran persona. Según él todo el misterio se debe a que tiene miedo de que su verdadera identidad cambié mis sentimientos hacia él. Bien podría estar siendo víctima de catfish y en un futuro posible secuestro o sabrá que cosa. Nunca me han llamado la atención ese tipo de relaciones pero de alguna manera todo terminó sucediendo, así que hoy dejo todo atrás. Mi plan es sencillo: No decirle que estaré viviendo en la misma ciudad que él hasta que cumplamos nuestros primeros 100 dias de relación, luego, le daré una sorpresa.

—¡Rose! Ya se te va a hacer tarde para tu vuelo cariño —Dijo mi madre desde la sala de estar. Ella siempre ha sido todo para mí ya que ella y mi padre nunca estuvieron juntos (Llamemosle aventura de una noche). Al principio esta se negaba a que me mudara a otro país fuera cual fuera el motivo pero después de muchas súplicas logré convercerla de que estaría bien viviendo sola en otro país y que sería una buena experiencia para mi y una gran oportunidad en cuanto a mis estudios.

Tomé mis maletas y me dirigí a la sala a despedirme de mamá, le di un gran abrazo mientras escuchaba su larga lista de cosas que debo recordar cómo por ejemplo no hablar con extraños cosa que seguramente haré, porque como se supone que haga amigos en un país donde no conozco a nadie si no me doy el lujo de hablar con desconocidos en el proceso... Esa es sólo una de las tantas cosas que me dijo para terminar con un "llámame desde que llegues".

Después de despedirme de mamá la cuál no podrá acompañarme al aeropuerto por cuestiones de trabajo y su complicado horario, me dirijo junto a mi mejor amiga Marie al destino antes mencionado en un Uber. Al llegar al areopuerto todo fue arreglar documentos y recibir una corta despedida de parte de Marie ya que a ella no le gustan esas cosas de ponerse sentimental y mucho menos en público. A la hora de abordar el avión tomo asiento dónde me corresponde; al lado de una niña pequeña y su madre con las cuales converso un rato para matar tiempo mientras el avión despega. Al cabo de un tiempo la niña se quedó dormida y yo decidi sacar mi celular y seleccionar uno de mis playlist de música favorita de spotify para luego cerrar los ojos mientras me relajaba y preparaba mentalmente para lo que sería mi nueva vida, imaginar todo; desde los problemas hasta las nuevas oportunidades.

Al abrir los ojos me doy cuenta de que lo que para mi parecieron unos pocos minutos habia resultado ser el equivalente de casi el vuelo completo y que efectivamente ya estabamos a unos minutos de llegar a mi destino; Buenos Aires, Argentina. Observo rl panorama por la ventanilla mientras bostezo un poco liberandome de aquel sueño en el que estaba hace un momento. Todo es tan hermoso, al punto en que siento un pequeño revoloteo en el estómago que no sabría cómo explicar. Quizás esta ha sido la decisión más drástica o importante que he tomado en todo lo que llevo de vida pero al experimentar tantas cosas lindas me hace sentir que hice la decisión correcta, y eso que esto aún no ha comenzado.

Al aterrizar bajo del avión y me dirijo entre la multitud hacia afuera del aeropuerto en busca de un taxi. Mientras camino puedo sentir un ligero cambio de clima; acá hace un poco más de frío que en Perú. Llego a la salida e inmediatamente encuentro un taxi disponible, busco la dirección de la que será mi casa en el block de notas de mi celular y se la digo al chófer el cual asiente como si supiera de memoria a donde nos dirigimos.

En cuestión de algunos 15 minutos el chófer se detiene señalándome que hemos llegado a la dirección que anteriormente le habia señalado. Él me preguntó si estaba segura de que habia dicho la dirección correctamente ya que me veia un poco desorientada, por lo tanto tuve que explicarle que es mi primera vez en el país. Gracias a esto me dió algunos consejos sobre la vida acá, y además me contó que el tenia tan sólo dos años en Buenos Aires, que venia de Venezuela y de como tuvo que emigrar en busca de una mejor calidad economíca. Estuvimos hablando un rato hasta que se le fue encargada otra ruta por lo tanto pagué por el servicio y bajé del uber agradeciendole por todos sus consejos y recomendaciones.

Al fin me encontraba frente a lo que sería mi nuevo apartamento o algo por el estilo. Podria definir mi nuevo hogar como un apartaestudio lo suficientemente espacioso para mí y más teniendo en cuenta que mi situación económica nunca ha sido la mejor. Quizás tenga una beca pero a la hora de tener que viajar de un país a otro para poder aplicarla no es tan fácil y mucho más cuando no tienes familia en dicho país que te pueda ayudar a establecerte.

Al entrar dejo mi equipaje al lado de la puerta para dar un vistazo alrededor, la suerte es que todo parece idéntico a las imágenes que había visto cuando pague el alquiler y depósitos por adelantado. De pronto escucho mi celular sonar con un tono que conozco de memoria, se trata de Manuel, mi novio por internet. Me siento en la cama, la cuál no tiene sábanas ni nada, cosas que tendré que comprar yo por acá y sacó el celular del bolsillo, en estos momentos agradezco tener cobertura internacional.

—¡¡¡Rose!!! ¿Qué haces? No hablamos desde ayer :(          
te extrañoo.

No puedo evitar esbozar una sonrisa, él siempre se preocupa por mi cuando tardo en responder ya que normalmente o respondo rápido o le aviso que no estaré por un tiempo.

—Ahh, perdón amor, tuve que acompañar a mamá a otra ciudad a visitar a una tía mia —Esa fue mi respuesta, no le puedo decir que estoy acá todavía, eso arruinaria la sorpresa.