You are My Omega [ChenYeol / ChanChen]

Capítulo 2

Narra Chanyeol:

- ¡Oh Mi Dios! ¿Que hice?- dije agarrándome la cabeza, sin poder creer que lo deje inconsciente. Enseguida reaccione y me arrodille a su lado. Empecé a golpearle la mejilla para que reaccionara, por suerte lo hizo y pude respirar tranquilamente.- ¿Estas bien? Perdón no quería golpearte tan fuerte, pero es que no me gustaba la forma en la que me tocabas y lo que me decías- dije lentamente para que tanta información como la que le di no le shokeara.

- No te preocupes, estoy bien.- Dijo regalándome una sonrisa ladina. Decidí ayudarlo a levantarse y en un momento siento su mano en mi cintura y aunque me avergüence admitirlo, me gusto. Siento que con su sola presencia me doblego y me entregaría a él.

- Bueno...Creo que me tengo que ir- dije mirando incómodo hacia otros lados, si bien su presencia me gusta creo que lo mejor sería alejarme y pensar un poco la situación en la que me encuentro...encontré a mi alfa y este se comportó como un imbécil posesivo y celoso que soplo quiere marcar territorio...pero aun así me gusta y tengo que ponerme a pensar en eso y otras cosas. Parece que por alguien voy a tener que faltar a la universidad.

- Espera un momento. ¿No quieres que te acompañe? Digo así no te sucede nada en el camino- es de día y todavía cree que algo malo podría pasarme- Y de paso, podemos hablar sobre nosotros... ¿Qué te parece?- me dijo con una mirada esperanzada...que tierno.

- Okey, me parece una buena idea- le dije con una mirada suave y tranquila, pensando en todos los temas que podríamos hablar en el camino a casa. No no conocimos de la mejor manera así que espero que podamos congeniar y lograr alivianar este ambiente tan tenso que creamos tras el golpe que le di...me arrepiento de haberlo hecho porque me puse a mirarlo detenidamente y su pómulo derecho estaba hinchado tras el golpe.

Empezamos a caminar con dirección hacia mi casa, él trataba de acercarse a mí y rozar su mano con la mía y por impulso, forme un agarre entre nuestras manos, encajaban a la perfección. A pesar de ser un omega y él un alfa, yo tengo las manos mucho más grande que él y al mismo tiempo son suaves y cálidas. Y no importa si tiene las manos de tamaño normal, me transmiten una sensación de protección y calidez.

Comenzamos a charlar sobre nuestras vidas, que estudiábamos o en que trabajábamos, nuestros padres y familia, nuestros amigos, simplemente de nosotros y lo que nos rodea. Me doy cuenta que mi alfa, porque es mi destinado, encaja completamente conmigo, aunque me molesta su actitud posesiva y celosa, me puse a pensar que es algo normal e impulsivo, y se lo dije, el me respondió que prometía controlar ese instinto natural para que yo no me sienta como enjaulado o atrapado. Me siento muy bien a su lado, creo que debo conocerlo más porque este es mi destino, mi futuro.

Sin darnos cuenta habíamos llegado a mi casa, lo invite a pasar. Tomamos algo y seguimos la conversación. Nos entretuvimos tanto que no nos dimos cuenta cuando fue que nos acercamos tanto hasta que sentí sus labios sobre los míos. Nos saboreamos mutuamente, exploramos la cavidad bucal del otro, entrelazamos nuestras almas, con un solo beso supimos que estar juntos era nuestro destino, no una coincidencia, nuestro destino. Lo que es aún más fantasioso y romántico. Pensar que dentro de unos años vamos a estar juntos, con hijos, una casa y posiblemente el sentimiento de total entrega hacia el otro, es hermoso. Pero muy apresurado porque todavía quiero vivir mi vida, aunque no creo que mi alfa me obligue a ya tener hijos cuando apenas nos conocemos, no puedo descartar ese pensamiento de mi cabeza, porque con sus celos en la tienda me da esa idea del típico alfa arrogante, altanero, posesivo y celoso de la actualidad.

Luego de separarnos, me doy cuenta que no sé el nombre del alfa que hasta el momento me enamoró con una sonrisa.

- Puede que suene vergonzoso, pero ¿cómo te llamas?- dije con un sonrojo a más no poder, realmente creo que me veo muy ridículo preguntándole su nombre recién ahora, luego de haberlo dejado entrar a mi casa y a mi vida de la nada. No quiero que crea que soy así con todas las personas que conozco, no quiero que crea que soy un confianzudo de primera.