No me agradas

Cinco

Después de haber tenido sexo esa noche, los chicos habían caído profundamente dormidos. Y al día siguiente Shownu ya se había cambiado y bañado. Pues fue el menos cansado —Además ya sabía dónde estaba la bañera y cuando venía para acá consiguió ropa, sabía que se venía algo bueno—

—Kihyun, despierta— Le decía al menor que aún seguía dormido en la cama. Pero ya estaba con ropa porque en la madrugada se levantó con frío y se fue a cambiar.

—¿Por qué me duele tan horrible mi trasero?— Decía en su intento fallido de pararse.

—¿Acaso creíste que tu placer no tendría consecuencias?— Respondió riendo del menor.

—O sea sí... Pero no...— Buscó su celular y comenzó a mandar mensajes, aún en la orilla de la cama junto a Hyunwoo.

—¡Espera! Se te cayó algo— Dijo señalando el suelo el mayor.

—¿Qué?— Miró por todos lados hacia abajo.

—La heterosexualidad— en cuanto dijo eso estalló de risa recibiendo el golpe de Kihyun, lo cual se sintió como el golpe de un niño pequeño.

—Yo sigo siendo heterosexual— Renegó al mayor.

—Tus "Más duro Hyunwoo" No dicen eso— Lo imitó, y el menor sólo lo fulminó con la mirada.

—Mejor cállate, y vamos con los chicos—

[...]

Después de alrededor de unas tres horas, en lo que el menor se cambiaba. Ambos almorzaban y peleaban un poco, terminaron y se dirigieron al centro comercial donde verían a los chicos.

—Hey, hola, Hyunwoo. Espera, ¿tú eres el famoso Kihyun?— Dijo el chico de hoyuelos.

—¿Por qué me conoces?— Preguntó al otro.

—No, por nada— Todos comenzaron a reírse, y el único que no entendió fue Kihyun.

—Bueno, venimos aquí para convivir un rato, ¿no es así, WonHo?— Hyungwon intentaba que las cosas dejaran de ser incómodas. Así que recurrió a su novio.

—Ah, sí, claro. Jooheon, Minhyuk, Changkyun, Kihyun, Hyunwoo, ¿se les ocurre algún lugar?— Hoseok pensó que todos dirían lo mismo.

—Vamos a los juegos— Y efectivamente le atinó.

Los siete chicos caminaron hacia el lugar donde se encontraban los distintos tipos de juegos, mecánicos, no mecánicos, etc. Ya saben, la variedad de hoy en día.
Pero mientras iban caminando Hyunwoo se quedó parado con una sonrisa muy grande, y no, no era por estar viendo como a Kihyun se le dificultaba caminar, tampoco era por haber visto a Minhyuk caer y tirar a Hyungwon.
Ni mucho menos porque Changkyun y Jooheon le habían robado su helado a Hoseok.
Era por algo más genial aún. Tendría dinero para comprarse una rica cena.

—Chicos, ¿se les olvida algo?— Comentó el mayor de todos, recibiendo miradas confusas de algunos. Y después como todos levantaban sus manos frustrados y sacaban dinero de sus bolsas, dándole varios billetes. El único que no entendió fue Kihyun, otra vez. Ese pendejo nunca entiende nada.

—¿De verdad lo hiciste?— Changkyun le aventó el dinero. Recibiendo la sonrisa triunfante del otro.

—¿De qué hablan? ¿Y por qué otra vez no entiendo? Y no me digan que por imbécil, que sí estoy. Pero no tanto, aquí es obvio que me ocultan algo— Casi gritó Kihyun a sus compañeros.

—Apostamos a que terminaban teniendo sexo— Respondió Hyungwon viendo sonrojarse a su pequeño amigo.

—Él al principio no quería apostar— Apuntó Minhyuk a Hyunwoo —Pero después de que todos decidimos apostar aceptó— vio la cara de tristeza en Kihyun y volvió a hablar —tranquilo, no me refiero a que te haya usado para ganar dinero, sí te quiere, pero nosotros pensamos que tú a él no. O que al menos te harías más del rogar...

—Sí... Mejor vamos a los juegos— Changkyun interrumpió. Y todos lo siguieron.

[...]

Pasaron varias horas jugando juntos todos, hasta que en un momento Shownu aprovechó y se llevó a Kihyun a un lugar a solas —O sea, uno de los mil tipos de juegos que les dije—

—¿Qué hacemos aquí?— El menor estaba desconcertado por estar en un lugar a solas.

—Te quería preguntar algo...

—¿Será alguna de tus cursilerías?

—¿Por qué te dedicas siempre a arruinar todo?— El mayor cambió su sonrisa y puso su cara de Póker.

—Perdón, sólo finge que no dije nada, ¿sí?— Intentó arreglarlo mientras ponía su sonrisa nerviosa.

—Bueno... Eh...— El mayor dio un suspiro —¿Quieres ser mi novio?

El menor estaba apunto de volver a arruinarlo con sus palabras anti-cursilerías, pero contestó con algo no tan cursi, pero aceptable.

—Ya te habías tardado, pero sí, aceptó ser tú novio— Se abrazaron y se regresaron con los otros.

Fin.