Karma x reader

Hablo >.<

Y vuelta a clase una vez más. Salí de mi casa con antelación y camine tranquilamente hasta nuestra aula. Subí toda la montaña y a mitad me encontré con Nakamura. Últimamente ella y yo nos llevábamos bastante bien, creo que podía haber hecho una amiga. Hablamos durante la subida sobre algunos asesinatos y ella aprovechaba cualquier oportunidad de intentar trasvestir a Naguisa. Yo, en esos casos, me río un poco, pero no me hace mucha gracia sabiendo la verdad.

-Hoy hay entrenamiento con Karasuma-sensei. ¡Que pereza!- dijo Nakamura con un bostezo.

-Ya ves.- conteste si más, pensando que ojalá me dieran igual estas clases y poder saltármelas, pero desgraciadamente no podía. No quería perderme ni un segundo en esta clase.

Estábamos en el entrenamiento aprendiendo técnicas para acuchillar. Es sencillo, solo tienes que pensar como el enemigo y en el el último momento pensar como tú. Respiraba lentamente mientras miraba mi mano sujetando el cuchillo con tanta naturalidad. Yo seguía acuchillando, cuando todos giraron su mirada hacia un punto en concreto: korosensei y alguien más. Pensé que era un absurdo intento de asesinato, así que seguí con lo mío. Pero entonces vi a Naguisa, tenía la mirada un poco perdida, así que me acerqué. Una persona le estaba ofreciendo su mano a korosensei, probablemente un nuevo alumno. Al darle la mano, uno de los tentáculos de korosensei explotó, y ese ¿pelirrojo? Sonrió sádicamente.

-Karma...- susurró Naguisa a mi lado.

Karma. Con que es él. Él ha sido la primera persona en volarle un tentáculo a Korosensei sin ayuda o sin plan. Siempre lo he admirado por sus notas, por su seguridad... ¿y ahora lo voy ha envidiar por sus dotes de asesinato? Una parte de mi sentía un gran apego hacia él, pero otra parte de mi sentía enfado. Siempre había querido tener la misma relación con Karma como la que tenía Naguisa, incluso creí tenerla, pero su relación con Naguisa era mucho más fuerte. Por eso estoy enfadada. Por dejar cualquier contacto con nosotros sin avisar. A Naguisa eso, aunque no lo admitiera, le dolió. Y supongo que en parte a mi también. Me gustaba pasar tiempo con los dos.

Solo que ahora estoy un poco nerviosa al verlo. Ya lo sé, muy ridículo, pero la confianza que gané con él, ahora la he perdido y lo vuelvo a ver como una persona lejana a mi. Incluso si no me gusta admitirlo, como alguien... Superior.

Estaba tranquilo, cosa que yo en esos casos no consigo. Observaba a su alrededor con curiosidad, su mirada se paró en mi y Naguisa por un instante, pero antes de que él pudiera reaccionar me fui al cuarto de baño, el único lugar al que él (a menos de que sea un acosador y un pervertido) no irá.

Solo necesitaba despejarme.

Pasaron unos 15 minutos y no había salido del baño. Decidí volver a clase. Solía plantarle cara a mis problemas, además, iba a tener que ver a Karma de todos modos. Caminé tranquilamente hacia la clase, mirando los alrededores de la montaña. El sitio era bonito. Entré en el edificio y me dirigí al aula lo más segura que pude. Me paré frente a la puerta y la abrí. Me dirigí a mi asiento. Todos estaban en silencio, excepto el pulpo, que no paraba de gritarme cosas como: "¡primero llama y saluda!" o "¡¿como se te ocurre llegar tarde?!" O incluso "¡Estaba preocupado!"

Yo lo ignoré, me senté y miré hacia la ventana. Karma estaba sentado a mi lado. Me miró, pero no le devolví la mirada. El pulpo acabó calmándose y dando la clase tranquilamente. Bueno, no tan tranquila, ya que Karma aprovechaba cualquier oportunidad para intentar asesinar a korosensei, pero al fallar, le ridiculizaba pintándole las uñas o poniéndole un delantal. En esos momentos no podía evitar el repentino impulso de mirarlo y reírme. Entonces me daba cuenta de la mirada asesina que me mandaba en esos instantes, de manera que yo desviaba la mía. Pero me seguía riendo.