El chico de la libreta.

Cap n.-3: Una promesa.

{Pasa el día aburridamente, con charlas esporádicas hasta llegar a la noche, momento que Emma esperaba.}
Emma: {Lanza con cierta fuerza su mochila al suelo y se lanza a su cama.} Estoy realmente cansada...
{Emma cierra sus perlados ojos y concilia el sueño, descansando claramente.}
{Llegan las 3:00 AM, a lo cual Emma vuelve a soñar con aquél tipo, con Edward.}
Emma: ¡Hola!
Edward: Hola, Emma, ¿No?
Emma: Sí, ahora deseo saber quien eres tú.
Edward: Creo que ya sabes quién soy...
Emma: Si lo supiera, ¿Te estaría pidiendo tu nombre?
Edward: Buen punto, me llamo Edward...
Emma: ¿Por qué estamos conectados en sueños?
Edward: Ni idea, pero el destino ha de querer algo de ambos...
Emma: Bueno, aprovechando que ambos estamos aquí, ¿Deseas hablar? {Con una sonrisa notoria, debido a que había descubierto quién era aquél chico.}
Edward: Ok. [Sonriendo igualmente.]
(Ambos empiezan a hablar de diferentes cosas, de la naturaleza y hobbies del otro, hasta que sale el tema de si estaban en una relación.)
Edward: [Riendo.] Y, ¿Tú estás en algo con alguien?
Emma: ¿A qué te refieres?
Edward: Que si estás en una relación...
Emma: Pues, es algo complicado, estoy con alguien, pero él se comporta de manera inapropiada referente a mí...
Edward: Entonces, ¿Por qué no haz de terminar con él? [Su sonrisa se va desapareciendo poco a poco.]
Emma: Es que no quiero romperle el corazón, lo amo, pero no lo sé...
Edward: [Una mueca que denota tristeza se asoma por su rostro, causando preocupación en Emma.] ...
Emma: {Preocupada.} ¿Qué sucede?
Edward: Nada...
(Un sonido suena a la lejanía, una alarma despierta a ambos, dejando aquél sueño que ambos deseaban nunca olvidar.)
/[Narra Edward.]\
Edward: [Despierta, atormentado.] Prometo en mi nombre que yo haré feliz a Emma...
[Edward se levanta de su cama y empieza a arreglar las cosas del colegio y se dirige al mismo.]
[Intercepta Max y Ivette a Edward.]
Max: ¡Edward!
Ivette: ¡Gigante!
Edward: Oh, hola. [De manera deprimida mantiene la conversación con sus amigos.]
Ivette: (Preocupada.) ¿Qué sucede? (Dice ello tomando el mentón de Edward, de manera tierna.)
Edward: [De manera fría.] Nada...
Max: Mira melodramático, vas a subir el ánimo o te prometo que voy a decirle a la chica.
Edward: [Sonríe.] Ustedes son especiales, a su manera.
Ivette: Sí, lo que digas y... (Saca su celular y ve la hora.) ¡Vamos tarde!

(Al enterarse de ello, todos empiezan a correr en dirección al establecimiento.)
(Ivette llega de las últimas, debido a su estatura.)
Edward: ¡Apura, mini!
Ivette: ¡Qué ya voy, maldita jirafa!
Edward: Igual eres tierna al correr.
Ivette: (Sonrojada.) ¡Ay sólo calla!

(Así, todos alcanzan a llegar a la clase a tiempo.)
(Ya en recreo.)
Edward: [Paseándose por el establecimiento.] ¿Qué podría dibujar para esta semana?, Tal vez a un gato, algún animal medieval o otra cosa, ¿Qué creen?
Max: Sinceramente dibuja arte medieval, es más interesante.
Ivette: (Piensa en decirle a Edward a todo pulmón: Dibuja yaoi.) Un gato.
Edward: Sí un gato estaría bien...
(En ello pasa Emma al lado de Edward,el cual obviamente se queda embobado por ella.)
Max: (Notando que quedó loco por Emma.) ¡Reacciona hombre!
Ivette: Se quedó pegado.
Edward: [Recién se da cuenta de lo que los otros dicen.] Perdón, ¿Qué decían?
Max: No, sólo hablábamos de física cuántica. (En tono sarcástico claro.)
Edward: Vale, pues ¿Vamos a caminar?
(Max e Ivette asienten a lo que Edward les ofrece.)
Edward: No se diga más, ¡Vamos!

[Pues así pasa el recreo, donde todos se dirigen a sus respectivas aulas, no sucede nada fuera de la monotonía del día.]

(Toca timbre nuevamente.)

Edward: Ya no veo la hora de que las clases acaben... [Dice ello con un tono cansado y de aburrimiento.]
Max: Pero ¿Qué hablas tú?, siendo que tienes notas muy altas.
Edward: Que tenga notas altas no significa que me guste ciertas clases.
Ivette: (Observando a Edward.) Para mí que igual te gusta algo de clases, ¿No?
Edward: Además de molestarte y leer, pues no.
Ivette: Algunas veces me dan ganas de quemarte ese rostro...
Edward: ¿Con alcohol gel hipoalergénico? [Riéndose.]
Ivette: Ya calla.
Max: Sí, lo que digan, por cierto, ¿Qué día es hoy?
Ivette: Estamos a... (Introduce su mano derecha en uno de sus bolsillos y busca fervientemente su celular, luego recuerda que lo dejó en clases.) ¡MI CELULAR! ¡VOY A MORIR! (Al borde de un colapso emocional.)
Edward: Ni que fueras a morir, cabeza hueca.
Ivette: ¡AY VOY A MORIR!
(Y así, pasa el recreo, luego clases y a la casa.)

Edward: ¡Ya llegué!
[Edward escucha unos gritos del piso de arriba y, observa un panorama horrible, ve como su padre está insultando a su madre, mientras la golpea.]

/Padre = Alex y madre = Miriam/
(Alex se encontraba bajo los efectos del alcohol.)

Alex: Así que nada está ordenado, maldita puta.
(Con tono prepotente y agresivo, mientras sostiene del pelo a la madre de Edward.)
Miriam: (Con voz temblorosa y con lágrimas en los ojos.) Sueltame, por favor, no se repetirá...
Alex: (Le da una cachetada a Miriam, dejándole una marca roja en su cachete.) No te voy a perdonar, me tienes hasta los huevos con tu mierda, maldita perra.
Edward: ¡Ya déjala, analfabeto de mierda!
Alex: (Se enoja más y jala el cabello, haciéndola gritar más.) Observa lo que les pasa a los que no hacen caso.
Edward: ¡DÉJALA EN SERIO!
Alex: Y si no lo hago, ¿Qué harás?
Edward: (En un golpe de furia, le lanza lo primero que tenía a mano, una taza de su madre.)
Alex: ¡Agh! (Suelta a Miriam por el dolor.)
Edward: [Toma a Miriam del brazo y sale corriendo de la casa, llegando a la calle sumamente enojado, con la sangre hirviendo.]
Miriam: Es mi culpa, mi culpa... (Se desmorona y llora, lamentándose.)
Edward: Oh vamos, deja de llorar, no es tu culpa madre, él necesita controlarse igual.
Miriam: (En el suelo, tratando de hablar, tartamudeando casi.) S-Sí es m-mí cul-culpa...
Edward: Deja de llorar, tenemos que buscar dónde pasar la noche, porque con ese simio no volveré...
[En la mente de Edward: Prometo que nos iremos de aquí, lo juro por mi madre y por el destino cruel que nos observa...]

(De noche, a las 10:36 P.M se dirigen a una casa algo lejos de la de Edward, en busca de un refugio, nunca la noche se había sentido tan fúnebre y fría.)
Edward: [Dirige sus nudillos hacia la puerta de la casa, tocando levemente.] Espero que abra...
(Ivette abre la puerta, observando el panorama en su pijama de unicornio.)
Edward: Oye...
Ivette: ¿Si?
Edward: ¿Puedo quedarme por la noche?, Debido a que no tenemos donde dormir ni menos deseo volver a mi casa...
Ivette: (Piensa un rato y los hace pasar.) Pasa, no hay problema.
Edward: Muchas gracias...
(Todos entran, así Miriam se va a hablar con la madre de Ivette y Edward habla con la hermana y, obviamente, Ivette.)
Ivette: (Con curiosidad.) ¿Qué sucedió?
Edward: Un problema familiar, nada especial, no es la primera pero fue la más agresiva...
Ivette: Tranquilo...
Melissa: (Se acerca y le da un abrazo a Edward, mientras sonríe con esa inocencia de niña.) Todo estará bien.
Edward: No sé qué hacer...
Ivette: Todo se solucionará, créeme... (Ella se une al abrazo.)
(Edward siente el abrazo de ambas y siente que, esa noche, había mejorado drásticamente.)
(Luego de ello, Edward se queda despierto en el sillón, mientras su madre se va a dormir arriba, en un cuarto extra.)

[12:30 A.M.]

(Ivette baja para hablar con Edward, debido a que ella pensaba que él estaba mal y, acertó.)
Edward: [Deja su mochila al lado del sillón y saca su libreta, donde dibuja a Melissa y a Ivette.] Al menos ustedes me apoyan.
Ivette: Sí...
Edward: [Sobresaltado.] ¿¡Qué haces aquí!?
Ivette: Baja la voz, sólo busco hablar...
Edward: Ok, siéntate...
Ivette: (Se sienta al lado de Edward y observa su libreta.) Vaya, me dibujas como si fuera bonita.
Edward: ¿Acaso no es así?
Ivette: (Sonrojada.) No, para mí...
Edward: [Suelta una leve carcajada.] Sí lo eres...
(Ambos se quedan hablando, Edward le cuenta de lo ocurrido a Ivette, ella, a su vez, le cuenta experiencias similares.)
(Así pasa el tiempo hasta las 2:00 A.M y ambos se van a dormir.)