Tin.
Arrastro su cuerpo a la superficie, mientras me arrastro en el barro, siento espasmos en el mío y sin poder hacer nada empiezo a vomitar el agua y a toser una incontable cantidad de veces.
Sin embargo ningún tipo de respuesta proviene de él, su cuerpo está frío y blanco. No me había dado cuenta de lo pequeño que es hasta ahora.
Lo cacheteo. Golpeo su cara, nada. Can sigue con sus ojos cerrados.
-Can!Can!.- Grito desesperado, miro a mi alrededor, todavía es muy temprano para que haya alguien merodeando por aquí.-Can! Vamos idiota! despierta!.- Otra cachetada, es inútil. No hay respuesta.
Los segundos me parecen una eternidad, empiezo a desesperar.
Tomo su muñeca intentando encontrar su pulso, pero no lo siento o quizás mis dedos están tan helados que no puedo sentirlo.
No hay opción.
Coloco mis manos en su pecho, apretando su esternón y empiezo a presionar con fuerza. "1,2,3,4,5,6,7,8,9,10...." Presiono 30 veces rápidamente y con fuerza. Termino y me acerco a su nariz, no hay respiración.
Con mis manos aprieto su naríz y uno mi boca a la suya, empiezo a dar insuflaciones boca a boca, una por segundo.
Me alejo y vuelvo a comprimir su pecho, presiono nuevamente la misma cantidad de veces y vuelvo a tomar su boca para pasar oxígeno. No veo cambios, no veo respuestas, Can no despierta, antes de que empiece a caer en la completa desesperación decido continuar con el RCP.
Sigo presionando su esternón con mayor velocidad y me agacho para volver a pasar oxígeno, esta vez no me detengo, lo hago por una considerable cantidad de tiempo, aunque todo esto me está pareciendo una eternidad. Exhalo aire con mas fuerza y en ese momento veo a Can abrir sus ojos de golpe.
Me aparto y él empieza a vomitar agua, lo ayudo a levantarse y él sigue expulsando el agua de sus sistema sin poder medirlo. Tose de forma desmesurada, su cuerpo tiembla, sigue estando frío y me acerco a él para abrazarlo y darle algo de calor, lo cual es difícil conseguir con mi cuerpo también helado.
-T...Ti..Tin...-Tartamudea, con sus dientes chirriando.
-Tranquilo, llamaré a alguien.- Le digo, intentando consolarlo, luego recuerdo que mi celular cayó conmigo al lago. No puede ser!
-¿Can puedes levantarte?.- Pregunto tomando su rostro, a penas pueda hablar y su mirada parece perdida. Lo Levanto, su cuerpo es más pequeño que el mío, casi no pesa nada así que decido cargarlo encima.
Intento correr aunque fácilmente me agito y se me complica demasiado sostener el ritmo, son solo unos minutos, las cabañas de economía quedan más cerca. Corro con su cuerpo sobre el mío, él no hace ruido alguno, quizás volvió a desmayarse, debería revisarlo pero ya no siento mis piernas y el oxígeno que inhalo no es suficiente.
Veo una luz a lo lejos y un par de personas, intento gritar pero ni fuerzas para eso tengo en este momento.
Caigo de rodillas con Can aún sobre mi, mi vista se torna nublosa y entonces todo se vuelve obscuro.
....
-¿Solo es un poco de fiebre?.- Escucho decir, creo que es Pete quien habla, tengo pocas fuerzas para abrir los ojos.
-Sí, para mañana ya estará bien, no se preocupen, solo fue un susto. Por eso no deben jugar en el lago tan temprano.- Dice otra voz que no logro reconocer.