Capítulo 4.

295 11 1
                                    

Narra _______

Baje a buscarle panqueques a Louis, mientras servía tres en el plato comencé a escuchar voces en el living. Y como no, mi curiosidad que siempre me acompañaba hizo que me acercará. Era la voz de una chica que estaba hablando con Liam. Entre al salón donde se encontraban con la intención de saludar y ser cortes, pero la cara de la chica al notar ni presencia, era digna de una fotografía.

Su ceño que estaba fruncido levemente, haciéndola parecer enojada, se tonifico más al verme; sus cejas se levantaron y sus grandes ojos color celeste se abrieron de par en par. Por el tamaño en el que se había abierto su boca podían pasar tres ratas sin problemas, en serio, no exagero.

-¿Contrataron una prostituta? Si Zayn fue el que la contrato, puedes ir diciéndole que vaya olvidándose de esta relacion- Dijo dirigiendose a Liam, quede impresionada. ¿Esa chica había tenido el tupé de llamarme dama de compañía?, mi cara debía de estar dando un show, Liam me miro apenado. Senti que tenia miedo de enfrentarse a esa oxigenada, y no lo niego, a mi tambien me daba un escalofrío estar en frente de una persona que transmitía tanta frialdad.

-Soy ______, y quédate tranquila, tu novio esta arriba seguro durmiendo y sin ninguna compañía, porque yo estoy aqui para vivir, no para complacer a nadie- Liam queda impresionado ante mi respuesta, y el ceño de la chica se frunce aún más. ¿Habré sonado muy borde? Me pongo nerviosa, tan sólo 2 dias aquí y ya monto un show, esto supera con creces mi dramatismo.

-Con permiso- Exclama la rubia entre dientes, y me da un, no tan leve, empujón para pasar hacia las escaleras. Liam sigue parado en el mismo lugar, sin articular palabra.

Decido darme la vuelta y volver a la cocina, donde deberia haberme quedado desde un principio. Jodida curiosidad, casi 19 años y sigo siendo esclava de ella.

Agarró el plato con los panqueques y voy hacia las escaleras, pero Liam me detiene.

-Perdonala por lo anterior, solo que... ella y Zayn no están en su mejor momento ¿sabes?.- Dice el mientras se rasca la nuca, ya saben, ese gesto que parece que todos los hombres comparten cuando estan nerviosos.

-Yo no estoy enfadada aun que haya sonado asi en mi contestación. Sólo que no es normal llegar a una casa y que la novia de uno de tus compañeros te llame prostituta, no pasa todos los dias- Ambos reimos levemente.

-¿Quién ha cocinado?- Pregunta al darse cuenta de la carga que tengo entre mis manos.

-Yo, ahora le estaba llevando a Louis, ¿quieres?

-Por supuesto, esperame y ya subimos juntos- Yo asiento y el sale corriendo a las escaleras, segundos después vuelve con panqueques en su plato, y ambos nos dirigimos al cuarto de Niall, donde nos encontramos a ambos chicos dormidos, y con un partido de Fifa a medio jugar en la consola.

Narra Liam

Había quedado impresionado por el tono que había utilizado _____ para hablarle a Perrie, pero no la culpaba, la novia de mi amigo se había pasado con ella, y cualquiera en su lugar habia reaccionado peor que ella.

La acompañe hasta arriba con los platos de comida y encontramos un Niall y un Louis dormidos, con la consola prendida.

Observe a _______ acercarse a ellos, dejo el plato de comida de ambos en la mesa de luz, y se giró para verme.

-¿Sabes donde hay mantas? Todavía no se todos los lugares. -Dice, yo asiento y voy hacia el armario de Niall, bajo una manta y se la entregó, ella me muestra una sonrisa sin dientes en seña de agradecimiento y tapa a los dormidos.

Camina hacia el armario nuevamente e intenta llegar hacia el estante de arriba donde se encuentran las mantas, pero debido a su baja estatura no llega. Yo río levemente, y ella se da vuelta al escucharme, me mira con un enfado fingido y vuelve a su tarea.

Me acerco para alcanzarla yo, pero ella da un salto agarrando una, y al jalarla para bajarla, las tantas cobijas caen sobre ella, y a continuacion al suelo. No puedo evitarlo y lanzó una carcajada muy fuerte, es tan gracioso verla con la manta en la mano, y todas las restantes en el suelo, su rostro violentamente sonrojado y mirándome perpleja, así como mira una niña a su madre cuando rompe el juego de té más costoso de la casa.

-Yo... yo lo siento, ahora lo arreglo- Habla nerviosa y comienza a doblar todas las mantas.

-Tranquila _____, que tires unas cobijas no es un delito.- Sonrió para darle tranquilidad, y parece funcionar. La ayudo a recogerlas y las pongo en el lugar, ella me mira y siento que me lo está agradeciendo. Luego, camina hacia la cama en la que mis amigos siguen durmiendo, ni siquiera se han inmutado por el ruido de hace un momento. Ella, con la manta que se había quedado, vuelve a taparlos. Se da la vuelta y me regala una sonrisa, me hace una seña para que salgamos de la habitación, y así lo hacemos.
Me he olvidado mi comida dentro de la habitación, pero en ese momento no me importa. Lo único que quiero es seguir a la morocha y conocer mas sobre ella, me ha parecido un encanto.

Se dirige hacia el balcón del segundo piso.
Para llegar a la puerta que te da paso a este, se debe pasar por en frente de la habitación de Zayn. Mientras mas nos acercamos, mas gritos se escuchan, gritos femeninos, gritos de Perrie.
Observo a ______ que hace una mueca, pero sigue caminando hacia el balcón. Al llegar yo abro la puerta y la dejo pasar primera.

En este lugar hay una hamaca paraguaya colgando del techo, y al lado, tres sillas y una mesa, en las paredes de los costados hay portaretratos en los que estamos los cinco, sonriendo y abranzandonos. Esa fotografia había sido tomada cuando todos éramos realmente felices, cuando la fama nos hacía disfrutar y no nos pesaba. Mirar ese retrato me hacía sentir viejo, parecía que hace tanto tiempo habíamos sido felices.

-¿Este es su lugar?- Pregunto ella, observando las fotografías y a continuacion centro su vista en mi.

-Si, acá solíamos venir a escribir las canciones, o simplemente a tomar algo tranquilos mientras mirabamos hacia el jardín.

_____ chasquea la lengua, y me sigue observando.

-¿Les ha gustado cuando le han dicho que yo vendria?- Parecía nerviosa, como si mi respuesta le asustara.

-Bueno, ahora que lo pienso, necesitábamos un cambio, además la casa era muy grande. Podrías pensar que si queríamos un cambio podríamos haber traido a Perrie a vivir aquí, pero traer a la novia de uno de tus amigos a vivir suele ser muy conflictivo, y todos lo sabemos. Ha venido 2 segundos y ya ha montado un drama, ¿lo ves?. Pero, cuando nos han dicho que vendrías, pensamos que eras una niña mimada de 16 años, encaprichada con el mundo y que gracias al poder de su padre podría conseguir todo lo que quería. Pero nos hemos dado cuenta de que eres una persona que es humilde, y nos has tratado como chicos normales, no como los chicos de "One Direction". Créeme, que eso nos ha hecho bien. Nadie nos trata como personas comunes a demás de nuestras familias, y que tu lo hayas hecho, y te hayas mostrado tal cual eres y nos hayas dado la confianza para que nosotros hagamos lo mismo, significa mucho. Has llegado hace poco, pero estas acciones significan mucho, las primeras impresiones marcan, y demuestran la esencia de una persona. Y tú tienes una esencia única y bonita.- Digo y sonrio al darme cuenta de que hemos sido muy afotunados a que la chica que nos han traido no sea una persona mala, si no todo lo que he descripto- Y gracias al destino, a Dios, o a cualquier fuerza sobrehumana, te hemos encontrado a ti.- Ella sonríe, y mi corazón da un vuelco al pensar que yo y mis palabras han sido capaz de hacerla sonreír.
No entendía que me estaba pasando, pero esta chica me hacía sentir bien, y parecía que cada vez que estaba junto a ella, todo me pesaba menos, y simplemente era un poco más feliz.

Caída libre (One Direction y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora