Caída libre (One Direction y tu)

Capítulo 10.

Narra ______

Aún en el piso, vi la cara del idiota que me había tirado.

-Mierda Louis, podrías tocar ¿no?- Dice Liam reaccionando y ayudándome a levantarme- ¿Estas bien? Te has pegado muy fuerte.- Dice preocupado.

- Duele, pero no ha sido nada grave, sólo me ha aplastado el trasero- Dije fulminando con la mirada al culpable, que miraba atónito, como si no cayera en que me ha hecho caer.- ¿Podrias pedir permiso, No?- Le recrimine.

-Yo... Yo lo siento _______. ¿Puedo hablar contigo a solas?

Yo asiento al igual de sorprendida que Liam. El último sale por la puerta, dejándonos a solas.

-¿Qué ha pasado?

-¿Te has golpeado muy fuerte?- Dijo con un tono en el que se notaba preocupación y culpabilidad.

-No, tranquilo, ha sido el susto del momento, nada mas.- Mentí, claro que me habia dolido, pero no quería hacerlo sentir culpable.- ¿Qué es lo que querías hablar?

-Sobre lo de hoy en la mañana... ¿puedes entender que si uno de nosotros llega a tocarte un pelo tu padre nos matara? Sólo te lo advierto, no podemos tener nada contigo... estaría mal.

Quedé realmente sorprendida. ¿En serio estaba haciéndome un planteo de este tamaño? Por favor, como si yo me muriera por ellos. Es que, vamos, Dios Santo. Estos chicos si que tenían alto el ego. Esta bien, si, son lindos; pero eso no significa que me gustasen, ¿por quién me tomaban?

-¿Piensas que yo quiero algo con alguno de ustedes?

-Pues... cualquier adolescente querria. Y créeme, si no fueras menor de edad yo sería el primero en intentar algo contigo, pero lo eres, eres una niña y no voy a ir contra una ley.- Dijo muy seguro.

¿Una niña? ¿Es en serio Tomlinson? Te demostrare lo niña que soy.

-¿No quieres infringir ninguna ley, o es que tienes miedo de que yo no te haga caso?- Dije bajando un poco la voz, en un intento de que suene sensual. Me acerqué un paso y levanté la vista hasta mirar sus ojos. Joder, que bonitos ojos.

- Vamos cariño, ambos sabemos que si yo utilizará mis encantos, caerias rendida a mis pies- Levanté una ceja, a este chico debían bajarlo de las nubes.- Pero aún no estoy tan necesitado como para recurrir a la pedofilia.- Sonrió sinicamente. ¿Me había llamado plato de segunda mesa? Oh Louis, no sabes lo equivocado que estas. Me acerqué un paso más.

-¿Crees que yo dejaría que me trates como un segundo plato?. Creeme, cariño, que si pruebas conmigo siempre sere tu primera opción.- Doble la apuesta, y sonrei al igual que el, sinicamente. Me acerqué un paso más para seguir hablando, y me puse de puntillas para lograr quedar un poco más alta. Levanté mi mano y la pose detrás de su cabeza, comenzando a jugar con su cabello, enredandolo y desenredandolo entre mis dedos. Su nuez de Adán subió y bajo, dándome a notar que habia tragado fuertemente saliva en señal de nerviosismo. Amplíe aun más mi sonrisa. Me acerqué todavía más y deje que nuestros labios estén a solo centímetros, el no se movió.

-Te vas a enamorar, y no te podré corresponder. -Dijo intentando mantener su ego, pero ya había caido y me había mostrado su debilidad, esta batalla era completamente mia.

-¿Estas seguro que la que se enamorara sere yo?- Con el movimiento de mis labios mientras hablaba, nuestros labios se rozaron, haciéndome sentir la tentación de besarlo, pero no lo hice, el que caería en la tentación seria el. Su vista bajo hacia nuestros labios, y lo aproveché.- Creo que el que se está enamorando eres tú.- Dije en un susurro audible solo para nosotros dos. Deje de hacer puntitas, me separe y camine hacia la puerta, sin voltear a verlo. Le había dejado bien en claro que no era una niña.