Last Magical World

Capítulo 4. Cápsula de tiempo

A la mañana siguiente, salimos con provisiones suficientes, y la cautela debida. Durante el trayecto, me iba preparando a mi misma mentalmente para volver a ver aquel escenario apocalíptico que tanto había marcado mi infancia. Y cuando por fin llegamos, mis vagos recuerdos del lugar no le hacían justicia a aquella horrible imagen. El sitio se encontraba completamente en ruinas, dentro de las casas se divisaban aun algunos cuerpos masacrados de familias enteras, cubiertos tan solo por una delgada sábana blanca, manchada además de sangre seca. No había parte alguna que el polvo, y la hierba del lugar no hubiesen reclamado, capturas desgarradoras de cadáveres vueltos esqueleto se apreciaban por doquier y un inmenso ambiente de enojo y tristeza cubrían el lugar.

Al llegar por fin a la casa, y verla tal y como Gasaii la había descrito; tan perfecta, y mágica ... me quede simplemente congelada, luego de haber pasado por el pueblo entero y haber contemplado tales atrocidades... ahí estaba, frente a mi, la cápsula del tiempo más hermosa de todas.Cuando pude al fin reaccionar, el primer impulso que vino a mi fue entrar, sin embargo, en el momento en que conseguí dar el primer paso... un enorme estruendo seguido por un inexplicable movimiento, me detuvo y de un momento para otro en el piso se comenzó a abrir una grieta tan imponente, que en cuestión de segundos se estaba tragando al pueblo entero; Gasaii me tomo de los brazos y comenzó a levitar; mientras yo veía ser enterrado lo único que quedaba de mi pasado. Cuando al fin hubo paz en el lugar, mi hermana me bajo, mientras yo destrozada, lloraba al pie, del ahora cañón. 

+Se ha ido Gasaii... todo se fue... se terminó- dije mientras me dejaba caer de rodillas al pie del barranco

-En verdad lo lamento Caty... pero... ya no podemos hacer nada al respecto, deprisa, tenemos que irnos antes de otro terremoto- decía ella para intentar calmarme- tenemos que... CATY!- dijo angustiada, pero para cuando yo pude reaccionar, caí en cuenta que la orilla en la que me encontraba, se desmoronaba, y caía al vacío

Esta vez en verdad parecía ser el fin, todo sucedía tan deprisa, que ni siquiera pude preocuparme por intentar salvar mi vida y justo cuando todo parecía perdido, algo magnífico sucedió... el dije al que tanto me había aferrado desde el hallazgo de mi amiga aquella noche; se había iluminado, irradiando así una luz rosa-anaranjada que formaba a mi alrededor una especie de burbuja protectora, al percatarme de ello, me quede boquiabierta, no tenía idea alguna del porque había pasado aquello ni del como aprovecharlo para salir de aquel espantoso lugar.

Cuando la burbuja se aseguro de dejarme fuera de peligro, se desvaneció y su luz, regreso al collar; pero este, siguió encendido en dirección a las ruinas subterráneas del pueblo; e intentando descifrar lo que pasaba comencé a seguirla, al mover un par de escombros, salió levitando un gran libro forrado en piel, que traía consigo un símbolo raro en la portada. Al extender la mano para tomarlo, la luz del dije se hizo enorme, y luego de esto, se apagó por completo. Con el libro en mano, regresé al punto del cañón de donde había descendido y grite por ayuda; luego de unos instantes Gasaii se asomo sorprendida, con evidentes indicios de haber sollozado.

Durante el viaje de regreso, le describí a mi hermana con lujo de detalles lo que había ocurrido y ella sin saber como reaccionar, me pidió ver el misterioso libro, no sin antes percatarse de algo inusual... en el hombro derecho, se había marcado en mi una especie de tatuaje, idéntico al símbolo del libro, luego de intercambiar miradas incrédulas, nos dispusimos a ver su contenido. Aquel libro no era más y nada menos que la historia, descripción y datos de suma importancia relacionados a los khats, según los escritos, este era parte de las reliquias mas importantes en la familia real, puesto que en sus páginas, se escondían los secretos más fundamentales de la especie, habilidades ocultas, enigmas aun no resueltos y puntos de debilidad que llegaban a ser letales. Al contemplar con detenimiento sus páginas, Gasaii y yo decidimos poner manos a la obra y a partir de aquel día comenzamos a pulir todo aquello que de acuerdo a mi crecimiento, debía saber. 

Y... se preguntarán... "¿Pero...qué ha pasado con la búsqueda de tu familia?"; bueno, pues me alegra decir que luego de un par de meses, comenzamos a realizar expediciones, en busca del paradero de mis hermanos Clood y Crystal, y aunque les perdimos la pista luego 300 km a la redonda; algo de lo ambas estábamos seguras, era que ambos seguían con vida, y estaban ahí afuera, en algún sitio, esperando por el bienestar de su hermanita.

Fin del capítulo 4.