Cazadragones (En pause ^^U)

Aquel fatidico dia...

Ese día... ese maldito día todo comenzo... toda mi vida se vio cambiada desde entonces...

Todo comenzo un helado día de invierno, yo y mis compañeros de la milícia rebelde estabamos descansando en el campamento provisional que teníamos asentado cerca de una base del imperio, la cual atacaríamos por la noche, estábamos asentados en las inmediaciones de un bosque helado por la nieve, pensábamos que donde estábamos no se nos veria... pero nos equivocamos rotundamente... los soldados imperiales nos atacaron a media tarde sin previo aviso, logramos defendernos un tiempo pero eran demasiados; justo después de que yo atravesase a un soldado con mi espada, algo me hizo caer, pero no recuerdo si fue un golpe o que fuera pero el caso es que caí... al despertarme, estaba atado de manos y en una carreta tirada por un caballo, íbamos por un camino en el cual mirando a mano izquierda podía verse un río de buen caudal, pasábamos justo por una zona de rápidos y el agua me salpicaba en la cara, y a mano derecha, había una montaña enorme, rodeada por arboles y matojos, habia caminos que subian por esa montaña, pero nosotros seguiamos por nuestro camino sin desviar el rumbo.

No tenia ni mi espada, ni mi armadura ni casi nada, solo unos harapos. No estaba solo en la carreta, iban dos de mis compañeros de la milícia, Tomás y Zidán; dos personas a las que no conocia, una joven de cabello moreno azabache y largo, que le llegaba a la cintura, un cuerpo esvelto, unos ojos de un tono miel, apagados con la mirada fria, distante y perdida y un joven, flaco y sin fuerza, de cabello corto y castaño que lo unico que hacia era intentar soltarse las ataduras sin éxito, en sus ojos verdes oscuros se podía leer el miedo y por último una joven que se mantenía serena, tranquila y callada, una joven de pelo castaño oscuro y largo que le llegaba a media espalda, un cuerpo delgado y muy bello, permanecia sentada tranquila sin decir nada, conocia a esa joven, era la hija del jefe de la revelión, Roxanne, si la habian capturado a ella... entonces debian haber atacado la base general de la revelion en la ciudad de Sarcai... esto no era bueno...

Intente soltarme las ataduras pero no habia manera, no podía, tras relajarme un poco le pregunte a Tomás

-Oye Tom... a donde nos están llevando?- mi mente ya sabia la respuesta pero no queria creerla, el joven Tom me miro con unos ojos que decian "Ya lo sabes..." y tras un suspiro el joven pronunció sus palabras

-Dan... nos estan llevando... al verdugo...