IV

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Carta a un desconocido

Dime Shadow donde estas?
Pase tiempo buscándote, camine hasta casi morir por muchos lugares sin rumbo alguno.
Simplemente no se que hiciste conmigo.
Te importaria decirme donde estas
Te llegue a importar?
Nunca fui nada en tu vida pero tu eres la mía.
Me odio
Lo deje todo
Camine sin saber a que lugar ir, deje de hacer lo que más amaba con tal de vivir alejado de todo lo que me recordaba a ti.
Eres como un hechizo que me encantó desde el primer día que pose mi vista en ti.
Te odio
Pero amo a la vez
Donde estas?
Ahora vivo en una aldea normal, soy simplemente alguien ordinario o eso aparento ser.
Me odio por amarte tanto.
Quiero dejar de hacerlo pero no puedo
Aún puedo sentir tu calidez tocar mi piel por la noche.
Me volveré loco tal vez.
Lo odiare por miles de años lo haré.
Pero amaré a la vez. 

El erizo cerró el pequeño cuaderno que tenia entre sus manos, levanto su vista para mirar su casa, hace unos meses que vivía ahí. Las personas de la aldea lo encontraron tirado en el bosque, no dudaron en traerlo aquí, lo aceptaron sin saber lo que solía ser. Nunca hablaba sobre como llegó a ese lugar, a lo lejos se escuchaban rumores ninguno acertaba al verdadero, Cómo decir que llego a ese lugar por buscar a un amor perdido? Un simple desconocido que cautivo su corazón en tan poco tiempo, un simple error de la vida.
Dejo el cuaderno de hojas amarillentas sobre una repisa, toco con las yemas de sus dedos la portada y se retiró,  la luna estaba en su punto igual que la noche que desapareció, la observó por unos segundos sacudiendo su  cabeza, se había dicho que debía olvidarlo todo, no lo volvería a ver nunca más.
No volvería a caer en el por segunda vez.
Un pensamiento estúpido pues nunca lograban cumplirlo.
Dispuesto a dormir colocó la única vela que servía de iluminación sobre una pequeña mesa la observó, un estruendo provocó que apartará la vista y corriera  a la entrada, tomó la puerta y la deslizó. Sus ojos no lo creerían, intento pronunciar alguna palabra sin embargo sus labios no se movían.

- Sonic..

Esa voz, sus plegarias no habrían servido? 
Acaso los dioses castigaban su torpeza?
Acaso su sufrimiento tenía que ser mayor?
Simplemente nunca lo sabría.

Que La Luz Nos Guie.. //Shadonic // Donde viven las historias. Descúbrelo ahora