MY LOVE.

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throne

Elián había sido muy amable con Michael. ¿Por qué? No lo sabía.
Incluso había invitado al teñido a una fiesta, supuestamente para conversar ya que Elián también era escritor. Michael había quedado como bobo ante el chico y por supuesto que había aceptado.

(...)

-No tenías porque aceptar e ir a una fiesta con ese desconocido.-Luke estaba celoso, demasiado.

-No es un desconocido. También es un escritor, no tan reconocido pero lo es.-Defendió Michael.

-Pues no, no estoy de acuerdo, ¿Qué persona te pide salir a cambio de un maldito favor?

-Él, Elián Russell.

Luke tenía razón. Era un favor, uno muy simple.

-Nos trae algo positivo dicha salida, ¿no lo crees?-Michael respiró llamativamente como si estuviese quejándose.-Encontrarás una secretaria rápidamente y todos seremos felices.

-¿Y si ese tal Elián tiene otras intensiones contigo? ¿Y sí intenta hacer algo?

-Luke.-Michael reía.-Eres un paranoico. Se supone que yo soy la mujer en la relación por lo tanto yo soy quien debería tener las crisis existenciales. 

-También estoy en mi derecho de crisis existenciales. Entiende que yo soy así y estoy celoso, ¿de acuerdo? ¿Cómo reaccionarías tú si un tipo sin razón aparente me invitase a salir? ¡Estarías malditamente eufórico! 

-No reaccionaria de tal forma Luke.-Respondió Michael.-Tengo bastante confianza en mi mismo y tu también deberías tenerla. Nadie te quitará el maldito trono Hemmings. 

Luke se sorprendió. Michael nunca le había dado una contestación de tal forma. ¿Pero que punto se debía apoyar? 

Por un lado Luke estaba dramatizando tanto según Michael.

Y por el otro lado Michael parecía tener interés en aquel chico según Luke. 

-Pues entonces disculpa los malos pensamientos Michael. Yo no quiero ser una simple razón más. Me largo.

Luke tenía la habilidad de poder decir las cosas de una manera tan sensata. Estaba triste y enojado porque Michael se notaba tan diferente. 

-Luke... No eres un motivo más...-Intentó comprender a Luke pero no encontraba las palabras adecuadas para ese momento. 

Luke soltó una risa muy escandalosa. 

-Idiota, dije razón no motivo.-Dicho eso, Luke salió de la sala donde se encontraban. 

(...)

Luke estaba en un lugar céntrico, gran idea de visitar Walmart para poder comprar muchas botellas de alcohol. Se encontraba en el pasillo de bebidas alcohólicas. 

Duda existencial, ¿tequila o vodka? 

Ambas bebidas se encontraban en sus manos, realmente se sentía indeciso. Una voz tan irritante sonó.

-Tequila, los mexicanos producen buena tequila.

-Vaya coincidencia Boyle, ¿qué haces aquí? 

-Creo que lo mismo que tú, pienso embriagarme esta noche... He de suponer que tu también, ¿o me estoy equivocando? 

-No. Sólo quiero un trago. 

-¿Por qué no ir a un bar y ya?-Cuestionó Dylan.

-No me siento cómodo para ver como otras personas me miran tan malditamente roto.-Luke comentó con suma melancolía. 

-No creo que estés  taaan roto.-Dylan intentó animar a Luke.-Tienes muchas cosas geniales en tú vida, empezando por Clifford.

-Me he peleado con él, creo que ahora siento lo que tú sentías hace unos años, cuando otra persona llega y quita lo que es tuyo, te quita el trono.

Dylan tragó saliva. Ese era un recuerdo muy fuerte. 

-Luke,estás dispuesto a más de lo que puedes dar, sólo relájate. 

Dylan simplemente se volteó y dejó al rubio impactado, ¿y las palabras de odio? ¿tan sólo le había dado un maldito consejo? 

La gente es tan extraña.