Hariks seguía vigilando el lugar en la espera de que el guardián estuviese más que de buena forma para que juntos retornaran a su refugio temporal. Sif no le había dirigido la palabra en ningún momento después de un par de minutos de haberse reencontrado. Aún estaba reconsiderando el hecho de dejar que la espectro siguiera a donde fuera. Sabía que no podría protegerla de todos los peligros que amenazan a seres tan frágiles como lo era ella, incluso creía que era mejor que los guardianes tomaran su cuidado antes de que un tragedia diese lugar.
Una mano sujetó su brazo superior izquierdo.
—Eros me dijo que hay refuerzos Cabal en camino —anunció Kelso pasando a un lado suyo con una vara y su casco en la punta de esta —. El problema aquí es que tenemos a aquel francotirador cuidando nuestra salida.
El cazador extendió la vara fuera del lugar con lentitud. El casco fue derribado de un disparo hecho casi al mismo instante en que esa pieza de armadura había salido fuera de la cobertura.
—¿Qué sugieres?
Él permaneció en silencio. Usarse de escudo no era la mejor opción por el simple hecho de que apenas y resistiría un disparo; el siguiente sería una baja instantánea. Observó al fondo del lugar sólo para asegurarse de que Sif siguiera ahí, y así era, pero mostraba mucha atención por el techo.
—¿Sif? —inquirió sin dejarla de ver.
La espectro se giró al instante que escuchó que era llamada. Su ojo dorado se centró en él, decidiendo si aún seguir con la ley del hielo o no.
—Podríamos ponernos a su altura, eliminarlo y escapar antes de que los refuerzos lleguen —finalmente habló tornando su vista al cazador, dando a entender que se dirigía al mismo.
Kelso apretó los labios por una milésima de segundo en una expresión de aprobación. No era para nada un mal plan, sólo esperaba que el francotirador no cubriera todas las salidas posibles.
—Entre más rápido salgamos de este aprieto, mejor —afirmó caminando hasta Sif.
El Caído siguió observando a la espectro, misma que le explicaba más o menos al cazador como subir sin provocar el mínimo derrumbe; tal vez había sido duro con ella hace poco, ponerle su muerte como un peso de culpa pudo haberle afectado ya que, como sabía, él era lo único que la espectro conocía desde que fue creada. Entonces en ese rápido momento de reflexión, se alzó para ir al mismo punto que sus otros compañeros, y subir con gracia y agilidad por las paredes. Una vez en la cima volvió a dedicarle una mirada a la espectro, esta voló hasta su lugar y materializó sobre sus brazos un fusil lineal muy usado entre los suyos. Chequeó la munición y se posicionó para dar el tiro de suerte, apunto de disparar, transportes de los Cabal volaron sobre su cabeza.
—Haré lo que pueda para mantenerlos a raya —gritó el guardián desde su lugar.
Sif por un corto momento envió una afirmación hacia el cazado, seguido de retornar su vista al Eliksni.
—Usa el ruido para encubrir el disparo —susurró la espectro.
Hariks esperó pacientemente por el ruido, hasta lograr su cometido al disparar a la par que una detonación de granada, propiciada por el guardián allá abajo, voló en pedazos a más de un Cabal. Tan pronto lo logró, se levantó de su lugar y sujetó a Sif con uno de sus brazos para cubrirla. Se asomó en el hueco por el que había salido y contempló como el guardián daba pelea a bestias de guerra Cabal con un sólo cañón de mano y una excelente puntería.
—Recuerda que él puede ser el primero en jalar del gatillo en dado momento —dedicó nuevamente su compañera.
Hariks pensó una vez más, escuchando con más atención las advertencias dadas por su espectro, llegó a entender aún más su preocupación. Si su destino era ser un Kell, siempre habría guardián que intentaría asesinarlo para evitarlo.
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Destiny: The Journey
FanfictionCuando parecía que la Luz seguiría en pie por largos años de prosperidad y paz, se ve opacada por la Oscuridad que nunca para de cernirse sobre los guardianes y habitantes de la Última ciudad, ahora más que nunca por un nuevo enemigo. Antiguas leyen...