Estabas cansada de mandarle indirectas a Zhang Yixing, indirectas que nunca daban resueltado. Tu amigo ignoraba completamente que estabas loca por él, por eso decidiste pasar página, no malgastarías tu tiempo en alguien que al parecer no estaba interesado en ti, solamente te veía como una amiga. Querías mucho a Yixing, desde el colegio de primaria cuando llegó nuevo de China. Es un gran amigo, pero hace varios meses que descubriste que sentías algo más que una amistad.
–¡Lay! ¿me estás escuchando?-golpeaste suavemente su cabeza al ver que estaba distraído.
Yixing siempre había sido distraído, pero pudiste notar que últimamente lo estaba más de la cuenta.
Te miró desconcertado y negó con la cabeza.
–Perdona. -se disculpó con una inocente sonrisa. En seguida lo perdonaste por no haberte escuchado.- ¿Que me estabas diciendo?
–Jongin me regaló entradas para su presentación este viernes. ¿Te apetece venir?
Jongin era algo así como tu novio, no echarías tu vida amorosa a perder por alguien a quien no le gustabas. Te encantaba Jongin porque era bastante atento contigo además de divertido y guapo, pero tu corazón siempre pertenecería a Yixing. Aunque eso lo estabas intentando cambiar.
–Que amable de su parte.
–Sí. -sonreíste.- ¿vendrás o no? Me ha dado tres, puedes invitar a alguien.
–¿Puedo invitar a Junmyeon? -preguntó mientras le daba un trago a su zumo.
Asentiste con entusiasmo, Junmyeon te caía muy bien, eras la única que se reía de sus chistes, sabías perfectamente que no tenían gracia, pero tu humor era así de simple. Además estabas encantada de que Yixing te acompañara, te aburrirías allí si no.
–Lo único que es...es esta noche ¿Podréis pasaros a buscarme? -preguntaste con inocencia.
Yixing simplemente sonrío y revolvió tu cabello. Cogió una de las entradas que le habías mostrado y miro la hora en la que daba comienzo la presentación.
–Estaremos a las nueve y media.
–Gracias, Lay. -sonreíste y besaste su mejilla.
***
Ya habías terminado de arreglarte para la presentación de Jongin, dijo que había que ir muy arreglados porque asistiría gente muy importante y de clase muy alta. Se lo hiciste saber a Yixing para que él y su amigo no asistieran con pantalones rotos y gorras.
Justo cuando cogiste tu bolso llamaron a la puerta, sabías que eran tus amigos. Bajaste con cuidado las escaleras, no querías matarte con los tacones.
Finalmente abriste la puerta encontrándote a tu mejor amigo vistiendo de traje, con su pelo hacia atrás e incluso se había puesto una pajarita. A su lado estaba Junmyeon, que al igual que Yixing se había puesto traje, solo que él lo acompañaba con una corbata.
–Que guapos. -dijiste sonriente.
Yixing no dijo nada porque estaba demasiado ocupado analizándote, estabas segura de jamás te había visto llevando ese tipo de ropa.
Mientras caminabais hacia el coche de Junmyeon te agarraste al brazo de Yixing, todavía no controlabas muy bien el andar con tacones altos.
En menos de diez minutos llegasteis al teatro donde sería la presentación.
–Ahora vuelvo. -le dijiste a tus amigos.- Iré a desearle suerte a Jongin.
Ni siquiera te diste cuenta de la mueca que había puesto Yixing porque ya estabas de camino a los camerinos. No había guardias de seguridad lo que te sorprendió un poco, pero aún así entraste.
–Disculpa, ¿sabes dónde puedo encontrar a Kim Jongin? -preguntaste a una chica que pasaba por allí.
Ella, amablemente, te dijo donde se encontraba y tras agradecerle por su amabilidad caminaste hacia allí. Llamaste a la puerta pero nadie contestó. Pusiste la mano sobre el pomo descubriendo que no estaba cerrada con llave, asique decidiste abrir y entrar.
Desearías no haber hecho aquello para no ver como Jongin devoraba los labios de una chica mientras la tenía subida al tocador y él estaba entre sus piernas. Estabas dolida, más bien enfadada, nunca hubieras esperado algo así de Jongin. Saliste corriendo sin importar que todavía no controlabas aquellos dichosos zapatos.
–Yixing...-dijiste con la voz a punto de romperse cuando llegaste al lado de tu amigo.
Yixing en seguida se levantó de su butaca y te abrazó, no sabía que había pasado, pero te conocía lo suficiente como para saber qué no estás bien.
–Vamos fuera por favor. -le pediste abrazándote a él.
–¿Qué ha pasado? -preguntó el una vez estuvisteis fuera.
Notaste como ponía su chaqueta sobre tus hombros y en seguida te aferraste, olía a Yixing.
Negaste no querías recordar lo que habías visto, pensabas que Jongin te quería, incluso tú lo querías, aunque no siempre como a Yixing, pensaste que con él no volverías a pensar en tu mejor amigo. Te dolía que la realidad te golpease, no había otro hombre como Yixing y estarías mejor con otra persona.
–Todo es tu culpa. -dijiste causando la sorpresa del chino.- Salía con Jongin porque no podía sacarte de mi cabeza. Maldita sea Yixing, si no fueras tan perfecto no me hubiera enamorado de ti y no tendría que haberme buscado a otra persona para olvidarte.
Limpiaste tus lágrimas rápidamente, te habías declarado ante Yixing y ahora temías por su reacción. Sentiste como su mano cogía la tuya y lo miraste. Él te sonrío y sin decir nada más besó tus labios.
–Eres una idiota, t/n. -dijo y volvió a besarte muchas veces sobre tus labios.- Pensaba de verdad que ese idiota te gustaba y que nunca podría decirte que me gustas. Ahora sé que es mutuo.
Tú sonreíste ampliamente, jamás esperaste que Yixing correspondiera tus sentimientos.
–Tu eres el idiota, ¿por qué has tardado tanto?
–Igual que tú, supongo que tenía miedo.
Volviste a sonreír y esta vez fuiste tú la que lo besaste.
