¡Siguen los castigos!

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Jackie Pov
Todo iba tan bien, hasta que aparecieron JK y Suga en la escena. Cuando Yass abrió la puerta para que salieramos del supermercado, alguien me cargó en sus brazos. Era el maldito de Suga. ¡Cómo lo odio! Hizo que entrara en el auto a la fuerza.

-Se creen muy listas ¿Verdad? -me dijo mientras que su mirada iba puesta en el camino.-¿Qué planeaban hacer?

-Solo queríamos tomar un poco para olvidarnos de lo desgraciadas que son nuestras vidas gracias a ustedes-le dije-Eso era todo, pero ahora ya no podremos. Así que te lo agradezco mucho -dije sarcastica

-¡Tu a penas tienes 16 años! -me sorprende cada vez más todo lo que sabe de mi- ¿Como siquiera piensas en tomar? Todavía no tienes edad para eso. Mientras yo exista y aun seas menor de edad... no tomarás un solo trago ¿Entendido?

-¿Quien eres? ¿Mi padre? Porque hasta donde yo sé, no tengo un padre. Soy huérfana. -le dije-Así que tú no eres nadie para prohibirme cosas

Todo el camino cada vez que yo decía algo así él solo se callaba y se reía. Al llegar a casa, me bajé del auto y comencé a correr rápido para llegar a mi habitación, pero el es demasiado veloz así que corrió detrás de mi y me tomó del brazo...

-No hemos terminado. Debes pagar por salir y por querer beber. Te voy a castigar para que no pienses siquiera en beber o en escaparte -dijo.

Seguido de esto me cargó y me llevó hasta su habitacion.

- Que te crees grandísimo idiota suéltame. - dije tratando de soltarme.

El me tiro en a la cama, Por primera vez en esta vida le tengo miedo a algo. A el.

- Aprenderás a respetarme, eso te lo aseguro

Empezó a quitar mi blusa , y dar ciertos  besos en mi cuello.

- Qué haces,  suéltame. - trate de zafarme de él pero era algo imposible.
Cuando vi la oportunidad iba dar un golpe a su amigo. Para poder salir corriendo, pero falle.

- Sabes iba ser Gentil contigo pero veo que tú no lo quieres así.

- No no por favor no me hagas nada suéltame. - mis lagrimas no tardaron en salir no me imaginaba mi primera vez así. 

- No haré nada que tú no quieras. - su voz era juguetona.

Entro en mi sin darme ningun aviso

-¡Ah! - Grite por el dolor - Por..Favor pa..PARA.

Agarro más fuerte mis caderas  y aumentó su velocidad,  haciendo llorara más del dolor.

- PARAA. - fue el último grito que pude dar.  No podía con tal dolor y lo único que pasaba por mi mente es lo mucho que odiaba.

Él salió de mi y empezó a vestirse , yo me tome la sabana y me tapé.

- TE ODIOO! - dije con lágrimas no podía creer lo que me había hecho.

- el sentimiento es mutuo cariño. - el salió de la recámara. Espero y Yass se encuentre bien.

Luego de que él salió de la habitación me sentía tan sucia, tan debil es inexplicable la impotencia que inundó todo mi ser. Si nunca hubiéramos salido ese día del internado esto no habría pasado jamás. Me di una ducha y corrí a la habitación de Yass para ver si se encontraba bien. Al entrar ella tenía su cabello mojado y ya se había puesto el pijama. Estaba tirada en su cama y lloraba como un bebé. Al verla no pude contenerme y me lancé junto a ella en la cama a llorar. Ninguna de las dos decía nada solo llorabamos. Ambas ya sabíamos qué era lo que le había pasado a la otra o al menos nos lo imaginábamos. Terminamos de llorar y nos quedamos dormidas.
**********
Los rayos del sol entrando por la ventana hicieron que me despertara. Al despertar anhelaba con que este nuevo proceso en nuestras vidas fuera solo una maldita y terrible pesadilla pero no. Esta es nuestra nueva vida, nuestra triste, maldita y dura realidad. Fui a mi habitación a darme una ducha. Me cambié de ropa y fui hacia el comedor. Al llegar ahí solo estaba el maldito bastardo de Suga, las chicas no bajaban aun. Cuando yo entré en el comedor, el sonrió cinicamente.

-¡Qué noche la de anoche! -dijo mientras suspiraba y luego le dio un gran sorbo al jugo de naranja que tenía al lado.-¿Te divertiste? -dijo con ironía. Yo simplemente hice como que no lo escuché y decidí irme a mi habitacion. Pero el corrió y me abrazó por detras.

-¡Qué rayos! ¡Sueltame! -le dije mientras intentaba zafarme

-Tendré que hacer cosas como esta todos los días para que tú me dirijas la palabra -podía sentir su respiracion chocar en mi cuello. En ese momento entró JK y detrás de él los demás chicos así que esa fue la única manera en la que él me soltó.

Nos sentamos en el comedor para desayunar. Yo no tenía demasiada hambre así que solo le di un mordisco al sándwich y luego me levanté de la mesa...

-Aun no has terminado tu desayuno -Esa voz me irrita tanto es como si cuando el me dice que haga algo siempre termino haciendo lo contrario.

-¿Y qué? -le dije mientras seguía avanzando.

-¡Perfecto! Sigue con esa actitud de mierda que tienes y veamos que tal te va. -dijo retandome

-¡Nena! -era la voz maternal de Zoar- Sientate y come un poco más. Necesitas tener fuerzas -No me quedo más remedio que sentarme a terminar el desayuno.

Al terminar el desayuno, decidimos quedarnos a ver un poco de televisión. Las chicas Estaban tranquilas relajadas mientras que en mi mente se reproducían uno a uno los minutos en los que Suga me hacía suya. Siempre imaginé hacerlo por primera vez con alguien que yo amara no con un idiota que me secuestró. Oímos que el timbre sonó.

-¡Chicas vayan a sus habitaciones! -nos dijo Hoseok- Aun no están preparadas para estas cosas

Todas obedecimos y nos fuimos a nuestra habitación sin imaginarnos que quienes acababan de llegar nos cambiarían las vidas aún mas...

BANGTANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora