CAPÍTULO 2: volví a ver a mi ex... con una chica

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Imposible! No podré irme como si nada y dejarlos aquí, mis padres salen a las 6:00 de la mañana al trabajo y como soy la única responsable en este momento tendré que tomar cartas en el asunto. Soy de esas personas que me desespero por cualquier cosa y este era el momento donde no sabía qué hacer, jack y Alex habían jugado con su balón en la sala y de repente jack se tropezó y había caído sobre la mesa de sala. Habían vidrios rotos por todo lado y jack tenía su rodilla llena de sangre y la verdad soy la persona más sensible que pueda existir y la sangre me da pavor... así que me única salida será llamar a Diana, que por suerte la tengo y siempre me saca de apuros.
Mientras llegaba Diana traté de calmarme, lo bueno es que vive a cuatro casas de la mía y no tardaría mucho en llegar.
...
-Toc, toc, toc, toc, toc, toooooooc!!

-No hay algo que me moleste más que Diana tocando una puerta, les susurre a mis hermanos se pega a ella de la manera más desagradable según mis odios.

- tranquilo jack, seguro Diana me ayudará con todo esto o al menos eso espero, deja de llorar por favor para que yo también pueda dejar de hacerlo, le supliqué

Salte rápido del llegar de donde estaba y abrí la puerta antes de que Diana siguiera timbrando y peor, antes de que mis odios explotaran y empeorara más la situación

- ¿pero qué fue lo qué pasó? ¿Que es todo esto? Grito Diana aterrada de ver a jack

Le explicamos lo qué pasó pero la verdad creo que no entendió muy bien todo ya que todos hablábamos al tiempo y ni hasta yo entendí lo que dijimos los tres. Diana es la persona más tranquila y paciente del universo así que tomo un buen suspiro  y empezó a hacerle una pequeña curación a jack, mientras tanto Alex y yo limpiamos todo el desorden, recogimos los vidrios rotos y todo lo demás

jack tenía una cortadura muy onda y la verdad no podía dejarlos ahí e irme al colegio así que llame al taxi para que recogiera a Diana y la llevara a ella, por este día me quedaría con los pequeños revoltosos y esperaría a que llegaran  mis padres. Prepare algo de comer luego vimos una película y así no la pasamos todo el día, en la noche llegaron mis papás, la verdad es que mi mamá lo tomo muy tranquila, todo estaba en orden, no había de qué preocuparse así que nos evitamos su sermón, mi papá le hizo una curación a jack y con una venda protegió su rodilla y después de un rato nos invitaron a comer donde pato, por cierto! Olvide mencionarles que el restaurante de pato es el mejor en toda la cuidad. Allí preparan las más deliciosas hamburguesas, alitas, costilludas, batidos y todo lo que te puedas imaginar, no es por nada pero qué magia con la que prepara pato y sus colegas. Así que sin demorarnos tanto estuvimos listos y fuimos al restaurante de pato.

- qué tal amigos, nos recibió pato con una gran sonrisa
- Hola pato, dijeron mis hermanos entusiasmados de probar las nuevas costillitas con su salsa secreta
- Hola patico, saludo mi mamá. ¿Que mesa está disponible?
- Síganme camarada, dijo pato y nos guió hacia una mesa familiar

Justo cuando me senté y mire hacia la ventana estaba Matt mi ex y eso no es lo peor de todo junto a él estaba una señorita nada desagradable la verdad, bonita estaba la flacuchenta esa. Lo importante era que ni mis papás ni mis hermanos notaran la presencia de matt o ahí si empezaría a padecer. Pero como es posible que me encuentre a mi ex hasta en la sopa, suena exagerado pero últimamente que salgo a cualquier parte está él y siempre con una chica diferente y eso precisamente no es lo que me frustra más, lo que realmente me molesta es que aún lo sigo amando y no lo olvido y cada vez que un chico me invita a algo le digo que no, por el simple hecho de respetarlo, pero vaya que matt me respeta saliendo a cada rato con chicas

HASTA MI ÚLTIMO DÍA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora