*9*

38 3 0
                                    

(Pov. Jimin)

El cielo ya se había oscurecido cuando ya estábamos en frente del domicilio. La furgoneta estaba de nuevo a escasos metros de nosotros, algunos de hecho observaban el panorama.
-Nuestro último día -a pesar que no fuera un buen trabajo, habíamos conocido a gente nueva, con sus pasados tan horribles, que habían cambiado. Sin excepción, estoy seguro de que incluso en mismo Yoongi tuvo un mal pasado.
Hyojong observaba la casa a mi lado.
-Es bastante fácil para ser nuestro último día, ¿No crees? -Hyojong se gira para mirarme.
-La verdad, no nos ha dado detalles así que sospecho que no será lo que aparenta -realmente en anteriores encargos, parecía de una forma, cuando lo era de otra totalmente diferente.
-Puede ser -sus ojos claros de nuevo se dirigen a la casa -Bueno, ya basta de cháchara, vamos a ello.
El resto del equipo ya había cogido la jeringuilla con el veneno y nos dispusimos a saltar la valla. Matthew fue el primero en tomar la iniciativa y saltar. El resto le seguimos sin dificultades, pero cuando nos dispusimos a abrir la puerta...
-¿Veis eso? -un pequeño rayo de luz provenía de las escaleras -Mierda, hemos venido demasiado pronto, ¿Y ahora qué? -Vernon parecía agobiado.
-Tranquilidad, simplemente le cogeremos por la espalda -dije sin pensar demasiado.
-¿Y cómo estarás seguro de que no hará ruido? -Matthew se cruzó de brazos.
-Podemos coger un cojín del salón y simplemente taparle la boca -propuso Hyojong.
-No parece una mala idea, ahora sí, vamos -dije, abriendo la puerta, intentando no hacer ruido.

Hyojong se aproximó al sofá y agarró el cojín más grande que encontró, y de puntillas, aguantando la respiración nos dirigimos a las escaleras. Unos pasos se podían escuchar, venían del pasillo.
-Mierda mierda mierda -susurré.
-Vamos, no hay tiempo que perder -dijo Vernon.
Empezamos a subir las escaleras, y cuando llegamos al pasillo, no había nadie.
-Esto es muy raro... ¿Se habrá metido en la habitación? -dijo Matthew con un tono apenas audible.
-La luz del baño está encendida -Hyojong señaló a una habitación.
-¿Estás seguro de que es un baño? -le miré extrañado.
-Lo pude ver desde la ventana cuando estábamos fuera -apuntó hacia la ventana.
-Dejaros de tonterías y pensemos, ¿Quién va a matarle? -Vernon tenía razón, no lo habíamos pensado.
-Lo haré yo mismo -realmente no me importaba. Matthew me tendió la jeringuilla y Hyojong me dio el cojín -Gracias chicos, vamos.
Empezamos a aproximarnos a la habitación, de repente, junto al marco de la puerta, y un estruendo resuena en el pasillo.
-¡MIERDA! -una voz masculina grita en el momento.
-YA -dije en un susurro, más bien fuerte.
Rápidamente abrimos la puerta y visibilizo a un hombre en el suelo, observando el suelo. El sujeto de repente se gira, y antes de poder siquiera observar su cara, cojo su cintura, pegándola a mi cuerpo y le tapo la cara con la almohada. Hyojong rápidamente me ayuda a sujetar la almohada y de esta misma empiezan a provenir algunos gritos ahogados del muchacho en cuestión. Matthew agarra su cuerpo para que permanezca quieto y agarra su cabeza, girándola de modo que su cuello queda al descubierto, con delicadeza inserto la aguja y empiezo a presionar y observo como el líquido empieza a bajar, de la jeringuilla a su cuello. El hombre deja de oponer resistencia y noto como su cuerpo empieza a pesar cada vez más hasta que de repente, Matthew deja caer su cuerpo sin vida al suelo. Giro su cabeza con las manos para poder observar su rostro. Era hermoso. Jóven, la piel inmaculada, tenía la piel muy pálida y ojos rasgados, con el cabello bastante claro, me atrevería a decir que incluso blanco.
Cuando los demás se acercaron a ver su rostro, Vernon al momento se tira al suelo soltando un grito.
-¡¿Qué ocurre?! -estábamos realmente confusos.
Vernon no dice nada pero de repente empieza a llorar. No puede apenas respirar, su respiración sonaba entrecortada.
-¿Le conoces? -Hyojong clava sus ojos azules en él.
-Él... era una viejo amigo. ¿Qué has hecho para merecer esto, Soonyoung?
-¿Soonyoung?
-Chicos, no vale la pena lamentar su muerte, tenemos cosas más importantes que hacer -la voz de Matthew suena fría y cortante.
-T-tú... ¡¿QUÉ CREES QUE DICES?! -Vernon se levanta y coge a Matthew del cuello.
-La realidad, Vernon. Él está muerto, asúmelo ya.
-Chicos ya basta. Vernon, no vale la pena discutir, vayamos al sótano -los separo y me dirijo al pasillo.

El sótano está realmente oscuro. No palpo el interruptor con los dedos, así que continúo caminando con los brazos extendidos, hasta que me deslumbro cuando alguien enciende la luz del sótano. Al principio no veo nada, hasta que todo se empieza a esclarecer, y veo a alguien amordazado, y sus manos atadas en la espalda, a demás de estar tirado en el suelo. Como la persona en cuestión estaba de perfil no pude reconocerle, hasta que me atreví a darle la vuelta.
-¡¿Wonho?! -estaba inconsciente, de nuevo. Noto una extraña sensación, como si esto ya hubiera sucedido. Claro, como aquella vez en el apartamento.
-¿Está bien? -Vernon se aproxima hacia mí -Oh, dios santo.
Wonho tenía varios cortes repartidos por todo el cuerpo, que por cierto él estaba completamente inmóvil.
Pegué mi oreja a su pecho. Sí, estaba vivo. Comienzo a examinar algunas de las heridas, no parecen recientes... pero, ¿Quién le haría esto? ¿Ese tal Soonyoung tenía algo que ver con esto?
-Chicos, el tiempo se agota -Hyojong señala su muñeca -Cogedle, vamos a llevarle a la sede.

A pesar de todo, cuando le llevamos a la base, permanecí a su lado. Curé y vendé sus heridas. Él estaba realmente debilitado. Después de un tiempo, se despertó.
-¿Ji-jimin? -es exactamente el mismo tono que puso en la ocasión anterior. Confuso, miró a los lados, al rato reconoció el edificio -¿Qué hago aquí? ¿qué ha pasado?
-¿No recuerdas nada? Haz un esfuerzo -Wonho frunce el ceño.
-Lo último que recuerdo es que alguien me mandó un mensaje. Me dijo que podía decirme cosas relacionadas con el jefe -¿Yoongi? -Y, como estaba muerto de la curiosidad, fui. Ni siquiera recuerdo bien el lugar. Después de eso no recuerdo nada más -Wonho calla, pero después de un segundo abrió sus ojos -Creo que recuerdo algo -cogió su cabeza con las manos -Cuando llegué al lugar, alguien me agarró, de hecho no una, sino dos personas. Una tercera, se aproximó a mí y me golpeó la cabeza. Ya si que no recuerdo nada más.
Golpe en la cabeza. Giro su cabeza y observo. Efectivamente, tiene la marca de un golpe. Un golpe bastante seco, lo bastante fuerte como para dejarle inconsciente al acto. El golpe lucía alargado, podría ser alguna porra o bate de béisbol.
-Está bien, ahora descansa, debes de estar muerto -Wonho me sonrió. Me levanté dispuesto a irme, pero cogió mi muñeca, lo cuál me mantuvo sentado.
-Espera, tengo que decirte algo -levanto una ceja. La última vez que me dijo eso no fue para decirme algo razonable -Siento lo idiota que he sido últimamente, no pensaba con la cabeza. Entiendo que ahora ya no sientes nada, lo entiendo y lo respeto. No sé en que pensaba la última vez que nos vimos -algunas lágrimas empezaban a brotar de sus ojos -Jimin, lo siento -su mirada era totalmente sincera, empezó a llorar desconsoladamente.
-Wonho, lo entiendo, no pasa nada, ¿Está bien? La próxima vez piensa antes de actuar -no pude evitar sentirme bien, había recapacitado
-Gr-gracias, Jimin -me acercó a él y me dio un tierno abrazo. Agarré su espalda con fuerza.
-Descansa -me separo de él mientras me dedica una sonrisa llena de arrepentimiento.

-Yoongi, ¿Estás en casa? -coloco las llaves en el llavero. Me dijo que después de volver de trabajar, traería sus cosas y se vendría a vivir un tiempo conmigo. No escucho nada. La verdad que es bastante tarde, y como me quedé con Wonho, aún más tarde...

Fui a la habitación a cambiarme, y ahí estaba. Completamente dormido. Intento hacer el menos ruido posible, me cambio y me meto en la cama, pero...
-Mmm... -Yoongi se gira hacia mí -Jimin... ¿Qué hora son estas de volver a casa? -pregunta todavía con sus ojos cerrados -Estaba preocupado... menos mal que no tendrás que volver más tarde -me mira. Sus ojos, cansados pero aún así me mira.
-Sí, así podré estar más tiempo con mi novio -le abrazo por debajo de las sábanas. Corresponde mi abrazo. No puedo evitar pasar mis manos por su fornida espalda.
-¿Te gusta mi espalda? -Yoongi me susurra tiernamente, tanto así que mis vellos se erizan -Ya veo que sí -empieza a besar mi cuello, tan bien que no puedo evitar un pequeño gemido por mi parte. Él me mira divertido -¿Sabes lo que me gusta a mi de ti? -le miro con curiosidad -Todo -siento mis mofletes ardiendo -Es que, eres perfecto, maldita sea -giro la cabeza y agarra mi cabeza para así besarme. Yoongi sabe ser intenso cuando besa. Mientras nos besamos, entrelazamos nuestras piernas, y 'accidentalmente' me dirijo a su entrepierna, con lo que este gime irremediablemente. Después de una ronda de besos, caricias y demás, apoyo mi cabeza en su pecho. Su corazón late aceleradamente. Lo pienso bien. Todo esto empezó porque escuché a su corazón, lo que tenía que decirme. Siento como me van pesando cada vez más los párpados, mientras sigo abrazado a él, es demasiado tierno.

the rules of the game❦ [yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora