Mi mente lo deseaba a él.
Esas veces que nos vimos, nos tocamos y nos descubrimos. Apropiándose de mi cuerpo puesto a su merced.
Me fui a bañar. Buscando apagar ese fuego que encendía en mis entre piernas sintiendo el agua fría de la tina al hundir mi cabeza. Pero él seguía ahí. Dañando mis recuerdos. Mis heridas. Mis pasiones y mis olvidos.
Lo deseo.
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El amante debajo de mis bragas
Romance-Eres un monstruo. -Y la mejor parte es... que acabas de decirme que me amas.