Sunshine// fictober

Flores

Luego de tres veces que tocaron el timbre Tony se resignó que nunca iban a dejar de molestar así que decidió por fin salir de su cama. Se levantó para ponerse sus pantuflas cuando tocaron el timbre por cuarta vez. - ¡ya voy! - gritó el joven Stark enojado aunque sabía que nadie lo escucharía debido al tamaño de la gran mansión. La razón por la que nadie había abierto la puerta antes de el era que sus padres, como siempre, se encontraban en un viaje de negocios y se le había ocurrido la noche anterior darle el día libre a Jarvis pensando que no pasaría nada al día siguiente, lo cual se arrepentía en ese momento.

Se fijó en el reloj que hora era antes de bajar, eran las 9 a.m. Tony soltó un suspiro que más bien salió como un grito frustrado, no era como si se acababa de levantar, al contrario, ya llevaba 4 horas despierto, y hasta había desayunado y bañado pero luego de eso volvió a ponerse la pijama para tomarse tiempo para el mismo y leer pero ahora estaba siendo interrumpido.

Tony bajó corriendo las escaleras cuando tocaron el timbre la quinta vez. En cuanto abrió la puerta todo el enojo y molestia que tenía se esfumó para ser remplazado por confusión cuando vio a su rubio y musculoso novio enfrente de el con una sonrisa digna de portada de revista mientras sostenía una flor roja que probablemente era una petunia. -¿que haces aquí? - preguntó el más pequeño frunciendo el ceño, acción que hizo al rubio reír. - Es que me acorde de lo mucho que te amo pero no me alcanzaba para comprarte las estrellas así que te traje una flor- dijo Steve entregándole la petunia a su novio mirándole a los ojos con una sonrisa sincera que hacía que su amor fuera expuesto hacia el menor. - Eres un idiota, te amo - dijo Tony mientras sonreía de la misma manera que el rubio lo hacía para luego besarlo.