IV

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Pasaron dos días desde que hablé con Kim, en esos días no había salido de mi casa. La editorial pidió que tuviese listo mi manuscrito para la semana siguiente, fueron días tranquilos, de tanto en tanto recibía llamadas del rubio preguntando por mi avance, contándome cosas graciosas que le habían ocurrido o simplemente para reventarme los tímpanos.
Era viernes por la tarde, tuve que salir por comida para mi gato. Las calles estaban desoladas, iba sumergida en mis pensamientos, no pensaba que volvería a ver a alguno de mis antiguos amigos, por una parte estaba ansiosa y por otra sentía incomodidad. «Espero que no diga nada sobre aquello» pensé.

No pasó mucho rato para que algo interrumpiera mis pensamientos, se sentía como algo gigante chocaba contra mi. Una electricidad se esparcía por todo mi cuerpo, algo me estaba empujando, el viento chocaba contra mi. Activé mi quirk en un acto de reflejo, mi cabello cubrió mi cuerpo mientras detenía aquello que chocaba contra mi.
Una mano estaba posada sobre mi mejilla, lentamente abrí los ojos, un fuerte dolor cruzó por mi cabeza.

—Auch.—Posé mi mano sobre mi cara tratando de amortiguar el dolor.

—¿Estás bien Naoko?—dijo una voz conocida.

Levanté lentamente la vista, Aizawa me miraba fijamente. Su mirada era preocupada, no podía entender del todo el por qué de su mirada.
Inconscientemente miró a mi alrededor; a unos cuantos metros se encontraba un villano tendido en el suelo atrapado con las vendas del pelinegro y con largos cabellos negros rodeándolo, torné la mirada hacia mi. Mi cuerpo seguía cubierto con mi quirk y mi mano estaba cubierta con sangre.

—Naoko, ¿estás bien?—volvió a preguntar.

—Solo tengo un dolor de cabeza... ¿ese villano fue lo que chocó contra mi?

—Sí.—dijo entre suspiros—. Estaba peleando contra él cuando se me pasó la mano y salió volando... hacia ti. En fin, vi que usaste tu quirk, pero como fue en defensa propia no sucederá nada, fuiste rápida y lógica al usarlo para protegerte y a la vez capturar al villano. Sin duda es un quirk muy fuerte

—Gracias... aunque la verdad no me interesa mi quirk... en fin, debo irme.—Intenté levantarme, pero mis piernas tambalearon y mi dolor de cabeza aumentó.

—No creo que debas moverte mucho, recibiste un fuerte golpe en tu brazo y cabeza, espera a que llegue la ambulancia—dijo mientras me sostenía de la cintura.

—¿La ambulancia?, ¿cuánto tardará eso?, debo comprar comida para mi gato y volver a trabajar. No quiero retrasarme mucho... además... — un nudo invadió mi garganta, no supe si decirle a Aizawa aquello.

—¿Además...?

—Bueno.—Tragué saliva—. ¿llegará la prensa antes de la ambulancia o junto con ella?, ¿me entrevistarán?, la verdad me ponen incómodas ese tipo de cosas, me molestan y llego a sentir vergüenza. Nunca me ha gustado ser el centro de atención.—Un leve sonrojo se esparció por mis mejillas.

Aizawa torció la comisura de sus labios mientras me miraba.—Midnight tenía razón—dijo casi para sus adentros.

—¿Midnight?—lo miré extrañada.

—Nada, luego te hablaré de eso. En fin, no te preocupes, soy un héroe underground, también me molesta la prensa. Así que tardará más de lo normal en saber de esto, la ambulancia ya debe estar por llegar. Te atenderán y te acompañaré a lo que debas hacer, consíderalo mi disculpa por haberte lanzado a un villano con gigantificación.

Pasaron unos minutos hasta que llegó la ambulancia, atendieron mis heridas. Por suerte solo tuve una herida superficial en la frente, y mi brazo solo tuvo contusiones leves. Aún así me encontraba un tanto mareada por el impacto.
Aizawa me acompañó a la tienda de conveniencia más cercana, compré lo que necesitaba y me acompañó hasta mi casa. Durante el camino hablamos de esto y lo otro, de cosas tontas que nos sucedían a diario y graciosamente coincidíamos en varias cosas. Hablar con Aizawa era distinto a hablar con el rubio, cuando hablaba con el pelinegro era como si estuviese con alguna especie de "yo" y no necesitase pensar en lo que debo decir.

Noisy Boy (PresentMic x OC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora