STRANGE'S ANATHOMY

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Una aventura es más divertida si huele a peligro...

Strange estaba frente al castaño con una fusta de cuero trenzado, tras cerrar las puertas de la sala de quirófano no.7; el pelinegro portaba esa filipina color azul marino que solía emplear durante sus cirugías, era perfecta ante la inquisidora mirada del playboy, ya que esta marcaba los músculos bien trabajados del cuerpo del neurocirujano; mientras que el castaño de encontraba acostado boca abajo en la mesa de cirugía completamente desnudo, con sus manos sujetas sobre su cabeza, no podía moverse y tampoco lo pretendía, al sentirse escutriñado cautivo por el hechizo de esa heterocromática mirada felina que a lado de una sonrisa triunfante provocaban que un escalofrío recorriera su espina dorsal.

Strange camino a paso lento, cual devorador analizaba a su presa, antes de devoralrle; relamió sus labios al contemplar la perfecta desnudez de aquella piel canela que le llegaba a desesperar.

Lentamente las hebras de cuero se deslizaban por las pantorrillas, acariciando la piel canela, era suave cual caricia mientras ascendía, hasta que uno...no, dos azotes fueron dejados sobre la voluptuosa retaguardia del castaño, provocando que un ronco gemido escapase de entre sus labios, los cuales luchaban entorpecidos por retener cualquier sonido sin éxito alguno; las hebras de cuero subieron y bajarom hasta acariciar la palpitante entrada del moreno.

-Siempre tan ansioso Anthony- las palabras del doctor eran arrastradas en un ronco y sexy timbre que denotaba su propia excitación.

Stephen le deseaba, y verlo a su merced, sobre aquel entorno que consideraba como su santuario personal, bajo las incandescentes lámparas, le incitaban a marcar su piel.

La punta de la fusta, se deslizo a lo largo de la espalda, sin perder elnperfecto trayecto pornsobre su columna, pasando por los hombros, hasta delinear el cuello del menor.

El ojimiel giro levemente sobre su cuerpo, para perderse en la azulina mirada del mayor; quien levanto su mentos con la fusta, antes de atrapar sus labios en un demandante beso.

Anthony  podía percibir el olor de cuero mezclado con el amoníaco del quirófano, mientras sus labios eran degustados con destreza.

Strange se alejó, mientrasbuno de sus dedos delineaba los rojos e hinchados labios del playboy

-chupalo-

El castaño sonrió ante la orden del pelinegro, tomando las hebras de cuero entre sus labios, degustandolas son sugerentes movimientos, como si se tratase de la hombría del imperturbable hombre frente a él.

-eres tan lascivo Anthony-

Volvió a jadear al sentir como la fusta era sacada de su boca boca, creando un nuevo camino desde la barbilla hasta ese cuenco del cuello y el hombro, para luego gritarle por completo.

La húmeda punta de la fusta paso por su cuerpo, a lo largo del esternón, delineando cada cicatriz del ocasionada por el reactor ARC, acariciando con suavidad cada marca que contaba por si sola más historias que las palabras mismas.

El cuerpo de Anthony se estremeció al sentir un suave azote sobre su sensible pezón, el cual no tardo en endurecerse.

-parece ser que le gustó, vamosna atender el otro, no quieres que se enoje-inquirió de manera juguetona antes de azotar el otro pezón que no tardó en tornarse en un color rojizo.

El cuerpo del moreno comenzaba a perlarse del sudor, mientras que su miembro, ahora expuesto entre sus piernas goteaba a más no poder.

El húmedo camino que dejaban mqs hebras de cuero le hacían estremecerse, pues el frío de la sala contrastaba con el calor de su piel

KINKTOBER 2018 -.IRONSTRANGE.-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora