Querida,
He aquí la carta que nunca recibirás.
Mis deseos de verte son muchos,
Tanto como los soles y lunas.
Esos astros que han pasado.
Querida,
Te escribo esto,
Porque mi cuerpo necesita tus brazos,
Mis ojos buscan tu rostro,
Mis labios desean hablarte.
Árboles se mueven con tu recuerdo.
Eres energía desplegada en esperanza.
Sin ti ¿Mi corazón que sería?
Otro bulto más.
Querida,
Escribo esto,
Para avisarte que no llegaré.
Se hizo tarde el destino,
Para la salida que tanto planeamos.
Esa salida con cafeína de por medio.
Ve a tomar ese café gustoso.
Quizás con el que es tu amor ahora.
Sí, él.
El nuevo suspiro tuyo,
Del que no tengo idea de su nombre.
Querida,
Te escribo esto,
Con ganas que esto hablara.
Espero tu felicidad,
Con gusto a sacrificio mío.
Querida,
Esta carta,
He de ser dedicada,
A la chica que conocí antes.
Con sus miedos,
Tristezas y alegrías.
A ella,
La ladrona de corazones.
Querida,
Le escribo a ella.
Si aún existe,
Hazle saber que aún pienso en ella.
Me enamoré de ella a distancia y tiempo.
Querida,
Sé que a lo mucho te acuerdas,
De un nombre mío.
A pesar de mis esfuerzos,
La luna se le ha antojado acercarnos.
No te reconocí,
La verdad duró en llenarme,
O yo no quise creerla.
Querida,
¿Quién eres tú?
Atenta he de estar,
Ordena las letras confusas.
La imaginación usa.
La escritura entre tintas y renglones,
Suave he de ser.
No te preocupes,
Y tu nombre escrito aquí,
Ha terminado rompiendo el papel.
Querida,
Estas últimas palabras,
No son las que debería decir.
Para una despedida en concreto.
Me has enamorado con canciones,
Una que no entendí.
La tormenta de arena ha pasado.
Solo quedo en el desierto.
Te quiero al tiempo y distancia.
Y si la luna y las estrellas,
Conspiraran de nuevo,
Conspiraran para una cita inequívoca.,
Yo asistiría indeciso y sin razón.
Eso es mi despedida perdida.
Y lo que me queda es esto.
Hasta la próxima luna llena.
Con inmenso cariño tardío.
El escritor perdido en tu memoria.
ESTÁS LEYENDO
Gritos de Ilusión
PoesiaDespués de todos los versos absorbidos por los muros, ya es tiempo que alguien más escuche mis gritos.
