The fun of falling in love-Stingue Month

«05. Deportes»

Stingue Month

[Sting x Rogue]

«Deportes»

Por: Lightkey27

Disclaimer: Los personajes de fairy tail son propiedad de Hiro Mashima, la historia por otra parte es de mi completa autoría.
A

claración: Esta parte de la historia está escrita desde el celular, por lo que los guiones largos pueden no estar presentes, a pesar de que sí los utilicé.

¡Disfruten!
Hay notas de la autora, por supuesto UwU

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No lo podía creer.

No daba crédito a lo que sus ojos veían, o más bien enfocaban, pues por más amplio que fuera el panorama, su mirada se desviaba a cierta parte específica del cuerpo del rubio, que ahora se encontraba en su práctica de voleibol.

Rogue no soportaba tanta presión.

Y es que tras haber culminado su última hora de clases con el profesor Jura, el peli-negro se dirigió al gimnasio en donde se supone que su novio entrenaba para el próximo partido que tendría su equipo, el cual sería la próxima semana, pero se llevó una gran sorpresa al abrir la puerta del gimnasio y ver a una gran multitud de féminas en las gradas.

—Qué ruidosas — fue lo único que dijo, pues inmediatamente comenzó a localizar al rubio de ojos azules, que aunque no lo quisiera admitir, amaba con locura.

Inesperadamente encontró el motivo de los suspiros de la aglomeración en el gimnasio, por alguna razón los chicos se encontraban practicando sin su playera deportiva y sólo vistiendo el calzado y unos shorts,

Pero qué shorts.

Simulaban tan bien a la ropa interior que Rogue tuvo que recordar cuál era la pieza que había elegido estaba mañana para el rubio, pues sí llevaban ropa interior a juego y al ver que el color era diferente se tranquilizó, al menos hasta que un grito en conjunto de las estudiantes lo trajo de regreso a la realidad.

Y no era para menos el motivo por el cual hacían tanto escándalo, Sting y Jellal, éste último capitán del equipo, estaban rematando el balón con una intensidad y precisión que hacía que estuvieran en constante movimiento y por ende, por cada saque —e inclinación para el mismo— se marcaba a detalle aquellas dos gloriosas, tonificadas, majestuosas, esculpidas y todos los adjetivos que se requieran para describir la vista que estaba teniendo el público en aquel momento, del trasero de ambos jugadores.

Era algo impresionante.

Rogue no se había percatado de que se había quedado estático al lado de las gradas, hasta que una mano se posó sobre su hombro.

—Rogue-san, debería tomar asiento, no todos pueden soportar tan apasionado juego — le comentó su compañera de clases Juvia, la cual portaba una playera, banderines y una pañoleta con el nombre de Gray en ella.

Nada nuevo.

Era lo menos que se podía esperar de la novia del capitán de hockey, conocida por su amor vehemente hacía el peli-azabache.